Sobre el valor detrás de los sentimientos
Este pasado día del padre, me dejé ir… me fumé 4 cigarros, comí Domino’s pizza y no salí de la casa mas que para ir a misa. Para muchos esto es un día normal, pero para mí, esto es un día de “crisis” en el cual me permito “pecar” de más.
Como habitualmente sucede, durante la noche de un día de crisis comienzo a escuchar en mi interior la voz de Dante (mi pe… crítico interior) que piensa así:
“¿4 cigarros? Que asco. Pizza…. sí, muy sano, vas por buen camino… Ah y además no te moviste en todo el día… vientos, serás la gelatina humana, de ahora en adelante te llamaré Flubber…” y continúa durante algunos minutos hasta que gracias a Dios me interrumpe mi mujer pidiendome que le pase el control de la televisión.
A la mañana siguiente percibí durante mi meditación que estaba más concentrado y se me dificultaba menos permanecer quieto. Cuando empecé a correr me di cuenta que traía más….fua, más determinación. Al llegar a la oficina estaba 100% enfocado y con mucha energía. Estaba determinado a comer sano durante toda la semana y a solo fumarme mi 1 cigarro de todos los días e inclusive durante el transcurso del día ni se me antojó echarme otro.
Pensando en todo esto llegué a la conclusión de que así como con el paso del tiempo el día se convierte en noche, los días se convierten en semanas y los meses en temporadas; también nosotros experimentamos ciclos que guían nuestros estados de ánimo y niveles de energía.
Necesitamos de la oscuridad de la noche para poder descansar y disfrutar de la luz del día, necesitamos días malos para poder gozar los buenos, necesitamos días de echar la flojera para tener días de mucha energía, necesitamos pecar para reivindicarnos y salir adelante con una mayor convicción de permanecer en vida de gracia, necesitamos sentir culpa y remordimiento (aunque sea por algo tan tonto como fumar 4 cigarros) porque muchas veces de estos sentimientos sale la determinación y la FUENTE de ENERGÍA para poder llevar a cabo nuestros planes y superarnos (o en mi caso, dejar de fumar).
Todo en nuestra vida tiene un porqué , todo es cíclico y momentáneo. Lo importante es tener la conciencia (“awareness” o “midfulness”) para entender en qué parte del ciclo estamos.
¿Han notado que hay personas que tienen mucha flojera y de repente se enojan y pareciera que les inyectaron adrenalina? Esto es porque hay sentimientos que están hechos para llevarnos a la acción y hay sentimientos que nos llevan al descanso.
Todos los sentimientos tienen una razón de ser y los menos agradables como el rencor, la vergüenza o el enojo son muy poderosos porque detrás de ellos siempre hay una bandera amarilla para cambiar algo de nosotros mismos o de nuestra vida que no comulga con nuestra identidad.
Los invito a que esta semana identifiquen al menos una ocasión en la que experimenten un sentimiento negativo y lo exploren hasta llegar a la causa, identifiquen el porqué y se asombraran de lo que pueden encontrar.
Los dejo con un par de citas de una poeta llamada Nayyirah Waheed:
“running away from an emotion. is a sure way to carry it with you.”
“become intimate with your fears. listen to them, sit cross legged. give them your undivided attention…. offer them comfort. offer them rest.”
Si tienen cuenta de Twitter, sigan a @nayyirahwaheed, no se van a arrepentir.
