¿Sientes que Dios no te escucha?

H. Roberto Allison, LC

Lanzar las Redes
Lanzar las Redes
2 min readDec 1, 2016

--

lienzo-en-tela-senor-de-la-misericordia-55-x-70-cm-883901-mlm20440590121_102015-f

Siempre que oramos, le pedimos a Dios ciertas cosas importantes: por nuestra salud, por algún familiar, etc. Pero, ¿cuántas veces en nuestra vida nos parece que Dios no nos escucha, que no actúa? ¿Sera por nuestra falta de fe? ¿O por algo más profundo?

Lee lo que el catecismo dice al respecto:

“En este combate hay que hacer frente a lo que es sentido como fracasos en la oración: desaliento ante la sequedad, tristeza de no entregarnos totalmente al Señor, porque tenemos “muchos bienes” (cf Mc 10, 22), decepción por no ser escuchados según nuestra propia voluntad; herida de nuestro orgullo que se endurece en nuestra indignidad de pecadores, difícil aceptación de la gratuidad de la oración, etc. La conclusión es siempre la misma: ¿Para qué orar? Es necesario luchar con humildad, confianza y perseverancia, si se quieren vencer estos obstáculos.” (№2728)

¿Estamos convencidos de que “nosotros no sabemos pedir como conviene” (Rm 8, 26)? ¿Pedimos a Dios los “bienes convenientes”? Nuestro Padre sabe bien lo que nos hace falta antes de que nosotros se lo pidamos (cf. Mt 6, 8), pero espera nuestra petición porque la dignidad de sus hijos está en su libertad. Por tanto es necesario orar con su Espíritu de libertad, para poder conocer en verdad su deseo (cf Rm 8, 27).

“No tenéis porque no pedís. Pedís y no recibís porque pedís mal, con la intención de malgastarlo en vuestras pasiones” (St 4, 2–3; cf. todo el contexto de St 4, 1–10; 1, 5–8; 5, 16). Si pedimos con un corazón dividido, “adúltero” (St 4, 4), Dios no puede escucharnos porque Él quiere nuestro bien, nuestra vida. “¿Pensáis que la Escritura dice en vano: Tiene deseos ardientes el espíritu que él ha hecho habitar en nosotros” (St 4,5)? Nuestro Dios está “celoso” de nosotros, lo que es señal de la verdad de su amor. Entremos en el deseo de su Espíritu y seremos escuchados. (No 2736–2737)

“La confianza filial se prueba en la tribulación, ella misma se prueba (cf. Rm 5, 3–5). La principal dificultad se refiere a la oración de petición, al suplicar por uno mismo o por otros. Hay quien deja de orar porque piensa que su oración no es escuchada” (No 2734)

¿Cómo esta nuestra fe? ¿Y nuestra confianza en Dios?

Cuando Dios parece que se calla es la ocasión perfecta para crecer en nuestro abandono. Él siempre quiere nuestro bien aunque a veces no sepamos cómo. A nosotros nos toca entrar en medio de este silencio con la conciencia de que somos guiados por la providencia de un Padre amoroso que SIEMPRE es fiel. !No queramos separarnos nunca de esa mano!

--

--

Lanzar las Redes
Lanzar las Redes

“Esta es la red que queremos. Una red hecha no para atrapar, sino para liberar, para custodiar una comunión de personas libres” -Papa Francisco