#LasDeSistemas
La idea nació hace un tiempo, casi un año, cuando una tarde tres chicas se juntaron a charlar sobre anécdotas e historias de su ambiente laboral. Las preguntas fueron muchas y el motor uno solo: los interrogantes sin contestar.
Ese mismo motor hizo que el encuentro no terminara en una tarde. Las chicas se dieron cuenta de que podían y, especialmente, querían hacer mucho más.
Meses después de aquel encuentro original, una de las tres chicas publicó un tuit. La invitación se extendió a otras mujeres del sector que quisieran sumarse para charlar, conocerse, tomar algo e intercambiar historias.
En solo diez días, más de 100 se unieron a un grupo de Slack para participar. Pero la reunión se convirtió en algo más grande: una comunidad. Y así el tuit original publicado por una de las chicas se tuvo que trasladar a la creación de una cuenta especial @lasdesistemas
Las de Sistemas son mujeres que trabajan en diferentes ramas de la tecnología (ingeniería, desarrollo, seguridad, programación, docencia, investigación, gestión) y sienten pasión por lo que hacen.
Son trabajadoras, jefas, empleadas, socias, emprendedoras, estudiantes, aficionadas -de todas las edades- que aportan su visión, talento, capacidad, empuje, constancia, y ganas de aprender, enseñar y crear.
También son mujeres que quieren visibilizar un escenario que no solo es tierra de hombres. “Los de Sistemas” y “Las de Sistemas” pueden formar un gran equipo: el de la diversidad.
Pero también son mujeres que atraviesan situaciones que van desde la desvalorización de sus tareas solo por su género hasta problemáticas más graves (como acoso laboral o sexual).
El viernes pasado, casi 30 de las 100 participantes (que siguen aumentando) de la reciente comunidad nos juntamos en la ciudad de Buenos Aires.
“Somos un montón”, fue la sensación que tuvimos todas.Tal vez pensando que un viernes a las 7 de la tarde suele vencer el cansancio post-laboral o que un click online confirmando asistencia en una convocatoria de pocos días no garantiza su cumplimiento en el “mundo real”. Y mientras lo decíamos, nos reíamos.
Las ganas le ganaron a todo. Esa fortaleza se respiró desde el momento cero.
A medida que fuimos llegando al espacio de encuentro nos presentamos:
ingenieras en Informática; ingenieras en Sistemas; licenciadas en Ciencias de la Computación; especialistas en Seguridad Informática; ingenieras electromecánicas; desarrolladoras Front-End y Back-End; diseñadoras; project managers, sociólogas, psicólogas y comunicadoras vinculadas con la tecnología.
Sí, somos un montón.
Expusimos nuestras historias, contamos decenas de anécdotas, nos confesamos situaciones conflictivas. Nos escuchamos. Nos divertimos. Y nos contuvimos.
Las palabras las registramos en afiches, y en pequeños cuadraditos de colores trasladamos lo que queríamos hacer. Por haber sido un primer encuentro, el resultado fue mucho más que positivo.
La idea no es solo atraer a que más mujeres se unan a la tecnología, sino también convertir un espacio de contención para las que ya están.
La contención en el más amplio sentido de la palabra. No solo para brindarnos apoyo en situaciones conflictivas o graves, sino también para juntarnos y crear iniciativas, aprovechando la diversidad de perfiles y conocimientos.
Para solidarizarnos con aquellas que están buscando trabajo y ayudarlas, o con las que se quieren ir de donde están porque no se sienten cómodas.
Para visibilizar no solo la brecha de género que existe en el campo de la tecnología, sino también para mostrar que hay muchas que ya están y pueden convertirse en modelos para la próxima generación.
Con humor, con respeto, con ganas, con fortaleza, con alegría, con contención, con deseos, con las puertas abiertas a las que quieran participar. Nos unimos Las de Sistemas porque no estamos solas. Estamos acá.