25 BAFICI: El cambio de guardia, de Martín Farina
La nueva película del director de Cuentos de chacales (2017), Mujer nómade (2018) y Los niños de Dios (2021), entre otras, propone un acercamiento a un grupo de ex compañeros del servicio militar obligatorio, cuatro décadas después.
El multifacético Martín Farina (director, pero también guionista, editor y co-responsable de la fotografía, cámara y sonido) ingresa en la órbita de la amistad entre seis excompañeros del servicio militar obligatorio (“la colimba”) a partir de una serie de encuentros en donde afloran recuerdos emotivos, pero también acaloradas discusiones políticas. El título de su más reciente filme (presentado en la Competencia Nacional del 25° BAFICI) hace referencia al cambio de guardia del Regimiento de Patricios frente al Cabildo, ritual al que asisten como uno de los momentos que, de algún modo, los mantiene unidos.
El hecho de que el padre del propio realizador integre este grupo de amigos sexagenarios sirve para entender la encomiable naturalidad con el que registra los encuentros, cualidad que ya se hacía perceptible en sus trabajos previos. Es claro que a Farina no le interesa el documental de formato tradicional, con los consabidos primeros planos mixturados con material de archivo. También se evidencia la intención de no definir un tema principal o, al menos, no ofrecer una tesis que sintetice aquellos momentos registrados; hay, en tal caso, núcleos de sentido aunados por una historia transgeneracional en donde se visibilizan modos y sensibilidades masculinas (abordaje reconocible en su ya nutrida filmografía), pero también el debate por la herencia política en un país en el que las antinomias no perdieron vigencia (en particular, son álgidas las discusiones en torno al macrismo y al kirchnerismo, que sitúan a la historia al menos uno o dos años atrás).
El cambio de guardia posiblemente sea el trabajo más “abierto” al público de un realizador siempre interesado en la formación de subjetividades en cruce con lo grupal (ya sea familiar o de otra índole). Dentro de una línea de trabajo vinculada a ahondar en la propia historia, lo que resulta singular en esta película es que el tono ensayístico, experimental, cede para habilitar un acercamiento más directo, pero no por eso menos sentido.
