Arturo a los 30, de Martín Shanly

Marcela Barbaro
Sitio Leedor
Published in
3 min readOct 4, 2023

El peso de las marcas

Nueve años atrás, la proyección de Juana a las 12, ópera prima de Martín Shanly, nos permitió descubrir el potencial de un joven realizador que exploraba con solidez las dificultades de crecer y ser distinto frente a lo socialmente esperable. En línea con aquella temática introspectiva y en tono de comedia dramática, el estreno de Arturo a los 30, indaga sobre las consecuencias de las pérdidas afectivas en un joven inmaduro y desorientado que no logra proyectarse. En busca de saldar deudas con el pasado, el protagonista se enfrentará a un sin fin de situaciones tan absurdas como reveladoras.

El inicio nos sitúa en marzo de 2020, donde Arturo (interpretado por el mismo director) narra en off el peor día de su vida: el casamiento de su amiga Daphne (Camila Dougall) al que asiste desganado y desvinculado de los demás. Finalizada la ceremonia en la iglesia, y de camino a la fiesta en compañía de otras invitadas, sufrirán un choque automovilístico del que saldrán todos ilesos y dispuestos a llegar al festejo. Sin embargo, a partir de allí, el relato comienza a estructurarse en distintos flashback, intercalados con el presente, aportando la información y los nexos narrativos necesarios para darle sentido y espesor a su protagonista, como a los personajes con los que interactúa. El recurso temporal -atravesado en tiempos de pandemia-, nos permitirá ser testigos de la cotidianeidad del protagonista, de sus vínculos, sus rutinas, sus afectos, dependencias, como del duelo irresuelto que atraviesa su familia.

En esa búsqueda personal por encauzar su vida, Arturo -que parece no encajar en ningún lado-decide escribir un diario íntimo que relata en off como si tuviera la necesidad de ser escuchado por el espectador que irá hilvanado su vida junto a él. A pesar de su soledad y la incomprensión de su entorno, el humor que subyace le otorga el equilibro necesario a una historia con la densidad suficiente, de quien se muestra inmerso en un hastío existencial que le impide avanzar y madurar.

Al igual que en Juana a las 12, Shanly demuestra ser un gran observador del rol que ejerce la sociedad y la familia sobre quienes se sienten distintos a los demás. La calidez de su mirada se enfoca en el dolor a crecer, en las marcas que los definen, como en el aislamiento que sufren quienes no responden a los cánones aceptados por las mayorías; tópicos sobre los que vuelve a pronunciarse a través de sus protagonistas: primero lo hizo en Juana con 12 años y ahora, con Arturo de 30, a quienes muestra contenidos entre sus planos.

Tras su estreno mundial en el 73º Festival Internacional de Cine de Berlín (BERLINALE) y su participación en la 24° Edición del Buenos Aires Festival Internacional de Cine Independiente (BAFICI), donde resultó ganadora del premio a la mejor dirección de la Competencia Argentina; Arturo a los 30 es una propuesta interesante, desde lo temático y lo formal, que nos reencuentra con uno de los referentes del cine argentino contemporáneo.

--

--

Marcela Barbaro
Sitio Leedor

Lic. en Relaciones Públicas. Crítica de cine. Profesora de Historia del cine. Escritora