Cartas al Polo Norte
Solía ser que enviar un cargamento a través de largas distancias era casi un acto de fe.
El envío podía tardar semanas e incluso meses en llegar a su destino y era común encontrarse con que alguna correspondencia o producto era extraviado durante larguísimos periodos de tiempo, algunas veces incluso para siempre. En aquellas épocas los productos que enviamos o pedimos por correo estaban tan sujetos a perderse en el éter inmenso de los envíos olvidados que hasta las cartas de los niños a Papá Noel tenían una mejor probabilidad de llegar al Polo Norte.
“Es cosa del pasado”, dirán. “Hoy en día, con los avances en los medios de transporte, la facilidad de comunicación que ofrece el internet y la precisión que se deriva de la tecnología de los sistemas de posicionamiento global (o GPS), es inverosímil que un paquete sufra los mismos problemas de antaño en llegar a su destino.”
Tienen razón. Es inverosímil, pero lamentablemente aún sucede gracias a la negligencia de empresas que todavía deciden ignorar los múltiples beneficios tecnológicos que existen para favorecer formas más arcaicas para el rastreo de sus productos. Pensarán que son casos aislados pero incluso la oficina postal de los Estados Unidos aún tiene problemas para entregar sus paquetes a tiempo gracias a sus anticuados procesos.
Actualmente, los clientes cuentan con que sus paquetes o cargamentos lleguen o sean entregados de forma rápida y segura; y por lo tanto es fundamental para la logística de una empresa que realice este tipo de envíos el apoyarse en la tecnología y ofrecer el rastreo (ojalá en tiempo real) de su preciado cargo.
¿Por qué invertir en este tipo de procesos?
Integración entre producción y distribución, eficiencia en el transporte, seguridad del cargamento y un mejor tiempo de respuesta en caso de percances son solo algunas de las razones que inmediatamente saltan a la vista, pero al final, todo se reduce a una sola cosa: satisfacción del cliente.
Porque aún sí la entrega padece alguna demora ocasionada por errores organizacionales en el envío o calamidades de orden natural, es preferible que el cliente tenga plena conciencia de estos infortunios por medio de una interfaz que le permita acceder a la locación de su paquete, minuto a minuto, en lugar de tener que enterarse el día de la entrega que su orden sufrió una demora inesperada y que ahora probablemente tenga que ir a buscarla entre cientos de cartas al Polo Norte.
En Liftit pensamos que eso debe cambiar en un sector que grita innovación. Por eso los invitamos a que hagan uso de nuestra plataforma y accedan a todos estos beneficios.
Logística para todos-Liftit.
