Mirar de otra manera para pensar de otra manera
Estamos intoxicados de información. De metodologías. De técnicas. De herramientas. Da igual cuál sea reto a resolver: hay cientos de soluciones disponibles a un click de distancia.
Tener tantas (todas) soluciones a nuestro alcance nos está haciendo perder capacidad de pensar de otra manera. De innovar. De arriesgar. De obtener resultados diferentes.
¿Qué podemos hacer para fomentar la creatividad? O mejor dicho, ¿qué podríamos hacer para fomentar la capacidad de mirar las cosas desde otros ángulos? Se me ocurren cientos de cosas pero voy a decantarme por tres que nos sacarán de nuestras rutinas y nos obligarán a pensar de otra manera.
1 ∼ ¿Y si eliminases cualquier forma de comunicación no-verbal?
Normalmente usamos una o muchas aplicaciones de mensajería instantánea (Slack, Hipchat, Whatsapp, etc.) para comunicarnos en el día a día. Decenas de usos que le dábamos a la voz, ahora han pasado a nueva vida “gracias” al maravilloso mundo de la mensajería. ¿Útil? No lo pongo en duda, pero si el objetivo es pensar de manera diferente, generar nuevas sinergias, etc. seguramente necesites cambiar tus hábitos de comunicación.
Digital no significa que todo lo que hagas tenga que ser online o con una app o en un dispositivo.
2 ∼ ¿Y si alternases los roles y rutinas de trabajo entre el equipo?
Una de las claves en la teoría de la motivación de Herzberg: redistribuye las tareas rutinarias entre los miembros del equipo y recalca a todos la importancia que tiene su trabajo para el rendimiento global del equipo.
Algo tan sencillo que no es tan fácil de conseguir. ¿Por qué? La zona de confort que creamos alrededor de nuestras rutinas es tan grande que nos cuesta, a nosotros y a nuestros responsables, creer que otra persona hará esa tarea igual de bien que la estamos haciendo nosotros. Pero no se trata de bien o mal: se trata de conseguir nuevos puntos de vista. Y para eso, hay que cambiar la rutina y por tanto escapar de esa zona de confort como podamos.
Tip: empieza por algo fácil, por ejemplo, el email de atención al cliente.
3 ∼ ¿Y si la próxima reunión la hicieses caminando?
Obviamente no por razones médicas, que también. Según la Universidad de Stanford, caminar multiplica tu creatividad. Y no es raro, caminar incrementa la circulación de la sangre y oxigena el cerebro, lo que estimulará tu capacidad de generar nuevas ideas y buscar nuevos ángulos.
Aunque solo sea por desafiar lo establecido, salir de tu inercia, pruébalo. Desafiar el status-quo siempre genera buenos resultados. Sean o no los esperados.
