“Francotirador”, de Clint Eastwood

Los Inrockuptibles
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3 min readJan 22, 2015

“Estuve en contra de ir a la guerra en Irak, ya que me imaginé que íbamos a tropezar de alguna manera. Y en cuanto a Afganistán, también tuve grandes dudas.” Con estas palabras, Clint Eastwood hacía frente, en noviembre pasado, al que según The Hollywood Reporter era su mayor desafío del año: “conseguir que los votantes liberales (de Hollywood) amen Francotirador”. Son declaraciones que habrán dejado pasmados a muchos frente al cineasta republicano, ex cowboy y policía de mano dura icónico.

Lo cierto es que ya hace un par de décadas que Eastwood ingresó en su etapa “revisionista”, con cierta sensibilidad y hasta sentimentalismo, en su crepuscular Los imperdonables, en su conciliadora Gran Torino, y en su voluntad de mostrar las dos trincheras de la guerra (La conquista del honor/ Cartas de Iwo Jima). En esta secuencia tan liberal, Francotirador deviene un ejercicio narrativo engañoso. En los papeles, lo que hacen Eastwood y su guionista Jason Hall no es sino utilizar la historia real del francotirador Chris Kyle –que, en cuatro “tours” en Irak con los Navy SEAL, se cargó la cifra récord de más de ciento sesenta bajas, y fue víctima de una alienación tal que lo llevó a volver a Medio Oriente una y otra vez– como biopic y alegato antibélico. Pero el efecto real de sus dos horas y cuarto es otro: una glorificación del héroe militar. Conflictuado, sí, pero no por eso menos glorioso.

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Una de las elogiosas reseñas con que fue recibida en los Estados Unidos indicaba que “la política de la guerra” queda fuera del cuadro esta vez. Pero si bien es clara la intención de concentrarse en un seguimiento individual –es decir, de referirse estrictamente a los hechos– de Kyle (Bradley Cooper, anabolizado, con la mira puesta en el Oscar), el propio relato hace una y otra vez una interpelación directa y hasta emocional al espectador, al que no le queda otra que tomar partido sobre “el Eje del Mal”. Desde el comienzo, cuando vemos a Kyle enfrentando una de las decisiones más terribles de su vida: la de volarle la cabeza a un nene-bomba iraquí enviado por una mujer (acaso su madre) en dirección a los soldados de las fuerzas de ocupación. Como en los cliffhanger de los seriales, la escena queda en suspenso, y ¡flashback a la infancia de Kyle! –y, de algún modo, a cómo fue que las cosas llegaron hasta donde llegaron. Es acá donde el guión juega algunas de sus fichas más prometedoras, porque parece reflexionar sobre la violencia, las armas y cierta arrogancia de policía global como elementos constitutivos del ser americano (o, al menos, del ser texano). Pero esa línea se corta rápidamente.

El referente más obvio es, por supuesto, The Hurt Locker (Vivir al límite), de Kathryn Bigelow, una comparación que la película asume conscientemente (cada vez que Kyle vuelve del frente y su esposa lo increpa porque “su cabeza aún sigue allí”). Pero mientras que Bigelow se dedicaba a seguir a su personaje, por momentos casi de manera documental, Eastwood insiste con tanto ahínco en mostrar que el conflictuado Kyle no se consideraba a sí mismo un héroe, que termina encumbrándolo y martirizándolo. También le provee una línea narrativa secundaria –centrada en el enfrentamiento casi personal del protagonista, uno a uno, con su archi-némesis, el francotirador invencible de los talibanes– que va deshaciendo, con su inevitable carga emocional, todo lo que la aparente neutralidad política inicial parecía querer mantener a raya.

Eastwood sigue siendo un gran narrador clásico que pone la bala donde pone el ojo, y si hubiera elegido hacer una película que abogara abiertamente a favor de la intervención americana en Medio Oriente, probablemente hubiera conseguido una obra maestra. Pero esta vez los presuntos dos Eastwood –el de la vieja guardia republicana y el sensible cowboy crepuscular capaz de filmar este mismo año a los cuatro crooners de Jersey Boys cantando en falsete y bailando– chocan de frente y ninguno sale invicto; solo gana, parcialmente, una conciencia culposa.

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Francotirador (American Sniper)
De Clint Eastwood
Con Bradley Cooper, Sienna Miller y Luke Grimes.

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