La primera novela de Cecilia Fanti es un ejercicio conmovedor de valentía
La primera novela de Cecilia Fanti es un ejercicio de reconstrucción personal que transita por el dolor y la valentía. Es también el primer lanzamiento de la nueva editorial Rosa Iceberg.
Por Malena Rey
La última página de la primera novela de Cecilia Fanti está ocupada con una foto en blanco y negro, opaca: la de un corset ortopédico visiblemente rígido, incómodo, con clavos y orificios de distinto tipo. Es esta imagen fría la que vuelve sobre todo el libro reclamando la veracidad de lo que acabamos de leer: la historia de cómo a su protagonista le cambió la vida de un día para el otro –o mejor, de un momento al otro– al ser atropellada por un auto una mañana de invierno como cualquier otra en el barrio de Belgrano. Este ejercicio de autoficción, o este relato autobiográfico escrito con pulso literario, es el que procesa todo lo que el cuerpo de Cecilia sufrió, incluso la pesada carga de ese corset para mantenerse erguida. Es el relato desde la perspectiva de la reconstrucción. Está descripta la previa del accidente (un comienzo fuerte que pinta a su protagonista de forma certera), está el instante después, y están ahí también los treinta y cinco interminables días que pasan hasta que Cecilia sale del hospital, con su vida suspendida. Con distintos recursos aparece el relato imposible del dolor, y el desparpajo de un cuerpo intervenido por los médicos, manipulado.
Este ejercicio de autoficción, o este relato autobiográfico escrito con pulso literario, es el que procesa todo lo que el cuerpo de Cecilia sufrió.
Por momentos conmovedor, por momentos obsesivo, por momentos hasta cómico, el libro se encarga de convertir un hecho traumático en experiencia. En una de esas experiencias que nos recuerdan nuestra fragilidad instantánea, las bondades de la medicina –con sus paradojas– y la potencia de la literatura para transmitir y transformar la realidad. La chica del milagro es un ejercicio valiente, conmovedor, revitalizante, entre otras cosas porque deja afuera la pena, la culpa, la victimización, para proclamar que desde un cuerpo hecho pedazos una mujer nueva y modificada puede volver a ponerse de pie. La chica del milagro marca también el primer lanzamiento del nuevo sello editorial Rosa Iceberg, junto con la publicación en simultáneo del libro de relatos Los arreglos, de Marina Yuszczuk, una de sus editoras.
Cecilia Fanti
La chica del milagro
(Rosa Iceberg) 128 páginas
