Nicolas Cage y Willem Dafoe hablan de “Dog Eat Dog”, de Paul Schrader

En 1990, Corazón salvaje se llevó la Palma de Oro en Cannes. ¿Qué recuerdan de ese día?
Willem Dafoe: Que después de la cena Nic se subió a la mesa y cantó “Love Me Tender” para todos los comensales. En ese momento pensé: “Este tipo es encantador”. Yo sería incapaz de algo así.
Nicolas Cage: ¡Me acuerdo! Fue uno de los momentos más vergonzosos de mi vida. El presidente del festival me pidió que cantara, y como yo estaba medio reacio, Lynch pegó un grito: “Nixter… ¡Subí a la mesa y cantá!”. Siempre me dice “Nixter”. Al final terminé cediendo, pero mi voz estaba muy desmejorada.
Defoe: ¡Nada que ver! La rompiste. Me acuerdo perfectamente. Yo te miraba y decía: “Mierda, eso es un actor”.

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¿Qué los motivó a hacer Dog Eat Dog?
Cage: Yo venía de hacer Dying of the Light (2014) con Paul, una película que de alguna manera nos la robaron los productores, porque el corte final lo decidieron ellos. Nos quedó esa espina clavada y quisimos volver a trabajar juntos, pero esta vez manteniendo el control. Cuando Paul me contó qué era lo que tenía entre manos, me pareció perfecto, porque yo ya estaba más o menos interiorizado en la obra de Edward Bunker (el autor de la novela original). Y cuando supe que Willem también estaba interesado, listo: esa fue la frutilla del postre.
Defoe: Yo también conocía los libros de Eddie, porque había actuado en Animal Factory, de Steve Buscemi, que está adaptada de una de sus novelas. Y siempre es una alegría trabajar con Paul: hicimos siete películas juntos. Con respecto a Nic, tenía muchas ganas de volver a cruzarlo veinticinco años después de Corazón salvaje.

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Ninguno de ustedes es un actor naturalista, a pesar de que ese parece ser hoy el estilo dominante. ¿Eso los convierte en outsiders?
Cage: Puede ser, pero no me importa para nada.
Defoe: Está todo bien con el naturalismo, pero no tiene por qué ser el único estilo. Creo que es algo que se impuso a partir de la relevancia que cobraron las series de televisión en el último tiempo, que quizá necesitan una actuación más relajada y prolija. Muchos de los actores de cine hoy vienen de ese mundo. Pero yo siempre admiré la capacidad de Nic para correr esos límites.
Cage: Willem puede actuar de manera muy natural, como de hecho lo hizo en Anticristo, y yo también sé cómo hacerlo, pero no nos interesa. Nosotros queremos romper las barreras. La comedia no es diferente a otros géneros en ese sentido. Lo abstracto, lo realista, lo barroco… Todo eso debería poder convivir. Muchas veces me dicen: “Nic, te estás pasando de la raya”. ¡Muéstrenme la raya y yo les aviso si me estoy pasando o todavía me falta un rato!
Defoe: ¡Ja! Nic no puede pasarse de la raya básicamente porque no tiene ni idea de dónde está la raya…

Dog Eat Dog todavía no tiene fecha de estreno programada en la Argentina.