Temporada Alta trae el mejor teatro internacional a Timbre4
Tres recomendados internacionales de la sexta edición del Festival Temporada Alta.
Ya se volvió un clásico de las noches de febrero, ese mes en el que la cartelera de teatro todavía no arrancó con su programación habitual. Por sexto año consecutivo, el Festival Temporada Alta llega a las tres salas de Timbre4 con obras que vienen de España, México, Perú, Uruguay, Chile y Francia, y con el ya célebre “Torneo de Dramaturgia Transatlántico”.
“Imaginamos un espacio de encuentro. Un lugar de aprendizaje, de cruce, de mezcla. No puedo imaginarme un proyecto mejor en este instante del mundo que juntarnos con esto que amamos y nos quema el cuerpo y poner todo ese fuego juntito a trabajar”, dice su anfitrión y organizador, Claudio Tolcachir.
Acá van tres recomendaciones.
Psicosis de las 4.48, de Sarah Kane
Desde Cataluña, este unipersonal –interpretado por Anna Alarcón y dirigido por Moisés Maicas– pone en escena la obra más cruda de la dramaturga inglesa Sarah Kane. Es su obra más personal también, porque fue escrita durante una fuerte depresión y trata sobre el suicidio y las voces que escuchaba en su cabeza. Poco tiempo después de escribirla, Kane se quitó la vida. El reto de montar esta obra es mayúsculo, y Anna Alarcón sale airosa. Oscura y profunda.
Funciones: viernes 9 y sábado 10 a las 20. (entradas)
Savia, de Luis Alberto León
Luis Alberto León se enfocó en tres momentos críticos de la historia de Perú en tres obras diferentes. Savia es la segunda de esa trilogía y se ocupa de la época de abusos hacia los indígenas por parte de los empresarios del caucho. La obra surgió de Sala de Parto, un programa que estimula a dramaturgos peruanos creado por Chela de Ferrario, encargada de la dirección de esta puesta.
Funciones: sábado 3 y domingo 4 a las 19 horas. (entradas)
Pompeya, de Rodrigo Soto
Esta obra sobre la marginalidad llega de Chile para poner el conflicto social en primer plano. A partir de la desaparición de una amiga, se instala la crisis en un grupo de travestis que pone en riesgo sus vidas. La tensión urbana y la disputa entre las travestis chilenas y colombianas aparecen en la obra para desnudar las problemáticas más crudas del comercio sexual. Está basada en testimonios y material real, que recogió su director: “El travesti es una excusa para hablar de un Chile que trata a su gente como inmigrante en su propia tierra. Somos nosotros mismos excluidos”, cuenta Soto.
Funciones: jueves 8 a las 20 y viernes 9 a las 22.30. (entradas)