Mercadona muestra los dientes (de leche) a Amazon

Nuestro review del nuevo e-commerce del gigante de Juan Roig.

El nuevo e-commerce de Mercadona es probablemente uno de los proyectos digitales más esperados del año. Nosotros estábamos impacientes por verlo. Este mes por fin lo tenemos aquí, con noticia en todos los diarios incluida. El nuevo site está online, aunque de momento sólo activo en Valencia (hemos tenido que engañar al Sr. Roig con nuestro código postal para poder verlo).

El proyecto

Hace alrededor de un año, la cadena de supermercados, que es casi un emblema nacional, se embarcaba en titánica tarea de convertirse en el Amazon español. O, según sus propias palabras:

“Vamos a reinventar la forma de comprar alimentación”
Mercadonatech

Sin presión, las expectativas bajas para empezar. El objetivo era evidentemente ambicioso y, para conseguirlo, han invertido 20 millones de euros y se ha creado un equipo de 240 personas. Aunque puedan parecer cifras desorbitadas, si las vemos desde el prisma del sector, no son números tan descabellados. Sobre todo teniendo en cuenta que la venta online de Mercadona supone el 1% (210M€) de su facturación, estos números entran en la categoría de lo modesto. Además estos números incluyen la nueva “colmena” logística y el personal de distribución.

Diseño del servicio

Empezamos por la conceptualización del propio servicio. Sabemos que es un piloto (o un MVP si eres modernis-agile), pero el factor “reinventar” ni se le ve ni se le intuye en esta propuesta.

A primera vista no parece ofrece nada revolucionario en el valor que aporta al usuario. Es un e-commerce muy funcional, sencillo y directo, pero lejos de producir un efecto WOW.

¿Es esto algo negativo? Para nada. Mercadona sabe muy bien cuál es su target y ha hecho los ajustes mínimos y necesarios a su visión del servicio para ajustarlo al entorno digital. Ni un byte más.

Eso sí, ¿qué pasa con el coste del servicio? Queda francamente atrás de la oferta de los competidores, tanto pure players digitales como cadenas “de toda la vida”.

El pedido mínimo es de 50 € (!) y ni con esas nos libramos de los 7,21€ (!!!) extra en concepto de manipulación y transporte. La explicación que nos dan en su servicio de ayuda (muy bien resuelto, por cierto): su preocupación por el medio ambiente y la optimización logística. Aha 🤨

Arquitectura de la información

Lo primero que se nos ha hecho raro es la ausencia de accesos a las categorías de productos en la navegación principal. Se habrán inspirado en la web de El Corte Inglés, pero no sabemos hasta qué punto les beneficia.

Por otro lado es igual de raro que, al clicar “categorías”, directamente se abra la primera de estas. Además, el menú lateral está desvinculado del literal “categorías”.

Hemos encontrado algunas clasificaciones algo dudosas (¿cous-cous y quinoa en “arroces”?). Las subcategorías en el listado nos gustan pero echamos de menos accesos más directos y que estén presentes en más secciones (como en “arroces” 😉).

El área personal es sencilla pero cumple. Las secciones se muestran de manera limpia y son claras y usables.

Por otro lado, es interesante el apartado “Mis habituales” destacado en la cabecera. Mercadona ha trasladado a la web un caso de uso muy común de sus clientes: la compra recurrente de productos clave. Será interesante ver cómo evoluciona esto en comparación con las típicas “listas de la compra”.

La interfaz

En el apartado visual sí que se aprecia el alma de Mercadona, o lo que nosotros hemos llamado zero bullshit style.

Todo es funcionalidad en estado puro: elementos diferenciados, contraste entre estados y un paleta cromática (la suya) con suficiente juego para garantizar máxima legibilidad. Eso sí, no verás una interacción de más, una animación superflua o textos inspiradores haute-couture. Nos recuerda a Amazon en sus orígenes.

Es notoria la intención de crear una interfaz que transmita más modernidad y elegancia que los puntos de venta físicos. Aun así, mantienen cierta esencia cañí, quasi-kitch, visible en pequeños detalles como la aplicación de las sombras (made-in-2010) o el trabajo tipográfico. Pero sin llegar al nivel de las míticas etiquetas amarillo pollo de sus tiendas.

Todo muy Mercadona, espartano en estilo y sin florituras. Hecho para el cliente más práctico. ¿Funcionará esto en digital?

La usabilidad

Como hemos comentado, las funcionalidades de portal son las que te podrías esperar de cualquier e-commerce de estas características (llevadas a menos). Aun así hemos querido repasar algunas de las que consideramos más relevantes.

Buscador

Se podría argumentar que este es el elemento más importante de un supermercado online.

Tenemos que preguntarlo gritando: ¿DÓNDE ESTÁN LOS FILTROS? No entendemos cómo se ha decidido abdicar de esta funcionalidad básica en listados tan largos y variopintos como los del nuevo site de Mercadona.

Nuestro método patentado para testar buscadores de supermercados son las semillas de chía. Por alguna extraña razón el nivel hipsteriano de este superalimento puede con muchos de los sites que hemos probado. Mercadona entre ellos.

Si introducimos “semillas” en el buscador de Mercadona, el primer resultado que obtenemos son las semillas de chía (¡bien!). Si, por el contrario, buscamos “chía” tenemos que bajar 80 (!) posiciones en el grid para encontrarlas. 🤔

Compra

La interacción con el carrito nos ha convencido. Queda clara la acción de añadir productos al carrito y la gestión de cantidades está muy bien resuelta a través de los iconos. Nos gusta particularmente el cambio de icono de “quitar” a “eliminar” cuando solo tenemos una unidad de un artículo.

El checkout está muy bien resuelto: el mapa, la selección de horarios, la introducción de tarjetas… No tenemos queja.

Sí tenemos dudas con el concepto de “total aproximado”. Los productos a peso no muestran el precio final y no sabemos hasta qué punto los clientes lo entenderán. Prevemos quejas, por lo menos en los inicios del servicio.

La conclusión

Mercadona ha hecho un buen trabajo a la hora de sacar una nueva propuesta al mercado. Aplaudimos la audacia de lanzar un MVP en una zona geográfica concreta y con funcionalidades algo limitadas.

Sin embargo, el hype generado alrededor del proyecto no juega a su favor. Esto se suma a una competencia que lleva mucha ventaja y pone el listón muy alto para Mercadona. Decisiones como la falta de filtros o el precio de envío tan elevado nos parecen errores, teniendo en cuenta la liga en la que juegan.

Tenemos mucha curiosidad por saber cómo evoluciona el proyecto y por ver si la innovación va más allá de la interfaz y es capaz de ofrecer servicios de valor añadido a los clientes. Juega a su favor su marca. Sin embargo todavía le falta un buen recorrido para amenazar a Amazon.

Pero… ¿y en móvil?

Y cuando abrimos la página en móvil… ¡sopresa! Hay que descargarse la app. No estamos seguros de que esta solución sea ideal, sobre todo para personas que están on the go y no quieren descargarse la app.

La revisión de la app la dejamos para otro post de Medium. Si quieres que ver nuestra review de la app, déjanos un aplauso o un comentario 👏

MAGNT es una conversación entre Asier Delgado y Lourenço Viana.

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