¿Cómo Gollo dejó de acosarme por deudas que no son mías?

Defiéndase de las casas comerciales, bancos y agencias de cobro y sus constantes llamadas y mensajes abusivos.

Mauricio Valerio
Yo tengo un Blog
4 min readFeb 9, 2020

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El siguiente texto, el cual fue elaborado gracias a una investigación en jurisprudencia costarricense, decidí hacerlo debido a las constantes llamadas (incluso domingos a las 7 am) y mensajes (hasta 10 por día) de una agencia de cobro por una deuda que un familiar contrajo con Gollo.

Agrego que el texto no lo envié, más bien se lo recité a un agente de cobro, el cual aceptó ser grabado en audio.

Según lo que establece el Reglamento de Tarjetas de Crédito y Débito, en el CAPÍTULO IX, en su Artículo 35, “Sobre las prácticas abusivas en las cobranzas: Las entidades financieras, abogados, gestores o agencias de cobranza, para llevar adelante las gestiones de cobro, deberán hacerlo directamente con el deudor y sus fiadores. No se podrá realizar dicha gestión con personas distintas a las ya indicadas. Tampoco podrán utilizar prácticas de acoso y hostigamiento para el cobro de las acreencias.”

Este mismo Reglamento establece en su Artículo 2º — Definiciones la palabra Acoso u hostigamiento para la cobranza como: “Conducta por parte de un acreedor o agente de cobranzas, que oprima, moleste o abuse a una persona, de manera insistente y repetitiva, con ocasión de la gestión de cobro de una deuda”

De igual manera, el artículo 392 del Código Penal, inciso 9, impone de cinco a treinta días multa a quien realice llamadas mortificantes por teléfono u otro medio análogo.

Según la Agencia de Protección de Datos de los Habitantes (Prodhab), adscrita al Ministerio de Justicia, una empresa que recopile datos y los difunda sin consentimiento del titular se expone a una multa de entre 5 a 30 salarios base del cargo auxiliar 1 (de ¢2,1 millones a ¢12,9 millones).

Tomando como referencia los párrafos anteriores, Yo ______________, Cédula ___________, quiero denunciar que la empresa ___________________________, con cédula jurídica _____________-, domiciliada ante el Ministerio de Hacienda en _______________, me hace llamadas o me envía mensajes de texto desde el teléfono___________, a mi teléfono personal ____________, en donde se me cobra una deuda que yo no adquirí.

La deuda corresponde a ____________, cédula ___________, cuyo parentesco es __________ y quien no me nombró como codeudor, fiador o referencia a la hora de adquirir un crédito con la empresa anteriormente mencionada

Y, en el escenario de haberme nombrado como referencia, lo hace sin mi autorización y de igual manera es considerado como acoso.

Además de todo lo señalado, la empresa __________________ está lesionando mi derecho a la intimidad, el cual está amparado bajo el artículo 24 de la Constitución Política de Costa Rica.

Esta violación a mi privacidad es debido a que ____________, con sus llamadas y mensajes acosadores, irrumpe injustificadamente en mi ámbito de privacidad, ya que sin ninguna autorización o anuencia de mi parte, procede a efectuar llamadas o envío de mensajes por el cobro de una deuda de la que no soy ni codeudor ni fiador. Se debe tomar en cuenta que no tengo ninguna relación con la empresa __________________., y a la fecha no mantengo ninguna deuda con ellos.

Esto es una vulneración del derecho a mi intimidad por la realización de acoso telefónico por no ser yo la persona deudora, ni fiadora, ni al tener relación alguna con ellos, como lo es el caso de mi __________, a quien su esfera de intimidad no puede ser vulnerada por el Estado ni por ningún particular en la forma antes dicha.

Concluyo haciéndole saber a quien corresponda, que esta carta no es una advertencia, sino, por lo contrario un aviso de una acción legal que he interpuesto contra ustedes, la cual será notificada oportunamente por el circuito judicial correspondiente.

Atentamente,

Anotaciones: Si el acoso procede de una agencia de cobro, se debe mencionar que la empresa con la cual se tiene una deuda compartió sus datos personales con un tercero (la agencia de cobro).

También es importante aclarar el porqué se está violentando su derecho a la intimidad o porqué está causándole daños personales.

Yo, por ejempló, alegué que no quería contestar números desconocidos por el estrés que me generaba que me cobraran y mortificaran por una deuda ajena.

Añadí que, por la naturaleza de mi actividad económica, el no contestar números que no conozco podría impactar negativamente en mi economía personal, esto ya que podría estar obviando llamadas de futuros clientes.

También les dije que estas llamadas estaban ocasionando problemas y fricciones de carácter familiar.

Espero que les ayude.

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Mauricio Valerio
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Todo un colocho mental y verbal — Siempre en Shuffle Mode