Arquitectura: utilidad y belleza

Arquitectura. Ese arte que domestica el espacio y que está presente en nuestro día a día de diferentes maneras. Nuestra casa, nuestro lugar del trabajo, nuestro bar favorito… Todos esos espacios existen gracias a la arquitectura, que es la que los crea. Y para cada uno de ellos se han debido tener en cuenta diferentes aspectos, entre ellos que tengan una composición funcional, una belleza de diseño y una estructura segura. Luego, según la función de cada uno de ellos, se habrán acabado construyendo de una u otra manera, y es que la utilidad de los espacios define sus formas, su arquitectura.

Oficina en Rusia. Fuente: www.pixabay.com

Sin embargo, todo esto no ocurre en la llamada arquitectura espectáculo, donde ya no hablamos de un lugar «normal y corriente» como los mencionados, que sí son enteramente funcionales. En el caso de la arquitectura espectáculo no hay relación entre utilidad y belleza, la arquitectura no se comunica con el entorno, lo rompe. Se diseña sin reglas ni límites, suelen ser iconos de marcas, muestran poder y fuerza y son obras más para admirar que para habitar. En resumen, que no es un lugar en el que vivirías ni en el que irías habitualmente a pasar el rato. Son sitios que te llaman la atención por su diseño y la manera en la que destacan sobre todo lo que les rodea. Un edificio de viviendas no te llama la atención. La Ciudad de las artes y las ciencias en Valencia, por ejemplo, sí. También el Museo Guggenheim en Bilbao. Y es que no tiene nada que ver con las construcciones que la rodean.

Ciudad de las artes y las ciencias en Valencia. Fuente: https://es.wikipedia.org/wiki/Archivo:Ciudad_de_las_Artes_y_las_Ciencias,_Valencia.jpg
Museo Guggenheim en Bilbao. Fuente: https://es.wikipedia.org/wiki/Museo_Guggenheim_Bilbao

En contraposición a la arquitectura espectáculo que no se comunica con el entorno ni lo respeta, la Casa de la Cascada de Frank Lloyd Wright es un ejemplo de espacio arquitectónico que hace todo lo contrario, porque consigue integrarse en su entorno. Es lo que se conoce como arquitectura orgánica:

Casa de la cascada en Pensilvania. Fuente: https://es.wikipedia.org/wiki/Casa_de_la_cascada

A pesar de todo esto, lo que tienen en común ambos tipos de arquitectura es la luz. Pues es gracias a esta que los espacios se hacen posibles, es la que los genera. Y es que, ¿de qué serviría construir si no hubiera luz que se relacionara con los materiales y las construcciones, si no se reflejara ni hubiera sombras ni se produjeran volúmenes? No serviría de nada porque no seríamos capaces de apreciar nada, de apreciar el espacio. Por eso es tan importante. La luz es necesaria para vivir.

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