Pedro Sáez y Luis Sempere
El callejero de Alicante: secretos sepultados bajo placas
Más de cincuenta nombres de viales alicantinos esconden realidades relacionadas de algún modo con el franquismo
La aplicación de la Ley de Memoria Histórica en los nombres de las calles de Alicante sigue siendo, hoy en día, una herida abierta. Volvió a saltar la polémica cuando el pasado mes de Octubre se denegó la moción de Guanyar Alacant de recuperar la calle dedicada a Miquel Grau con los votos en contra de PP, Ciudadanos y Vox. Todo ello después de más de dos años de idas y venidas, sentencias, cambio de placas y reposiciones de las antiguas. Los secretos que años de Democracia han dejado escondidos detrás de placas con aspecto inocente siguen sin esclarecerse.
Tucumán, 25 de Mayo o Alemania son nombres de calles que, seguramente, no generen el escándalo y la crispación que puedan provocar otras como Generalísimo Franco o General Sanjurjo. Sin embargo, en Alicante tienen más que ver con la memoria histórica de lo que puedan imaginar.
Hombres del Régimen
Según Mariano Sánchez Soler, periodista, profesor de historia contemporánea y experto en la Transición; “desde la muerte de Franco hasta que el PSOE ganó las elecciones del 86 se produjo un cambio de régimen, pero siguieron mandando los mismos”. El profesor afirma que, esto se hace patente, entre otras cosas, en las calles. “En lugar de decir Camarada César Elguezábal, cambiaron el nombre a César Elguezábal. Pero es el mismo hombre. Simplemente se descafeinó”.
Alicante y Sus calles Modernas y Antiguas es un libro publicado por el Ayuntamiento en 1974 en el que se explica calle por calle el porqué de su topónimo.
Apoyó el Glorioso Alzamiento que salvó a España de las ordas rojas del Frente Popular. Voluntario del Ejército del Generalísimo Franco.
Esta afirmación aparece más de una treintena de veces -con diferentes variaciones- junto a nombres como “Antonio Noguera”. “Si no paras a estudiar el porqué de estos nombres no puedes comprender que se trata de un homenaje a un fascista”, sentencia Sánchez Soler.
Muy crítico con la gestión de Gabriel Echávarri en este aspecto, el profesor de la UA (Universidad de Alicante), afirmaba que “el acuerdo fue escaso y la gestión penosa”.
“El acuerdo para cambiar los nombres de las calles fue escaso y la gestión penosa” Mariano Sánchez Soler
Se refiere a la facilidad que tuvo el PP para eliminar estos cambios y después retomarlos con sus enmiendas. La portavoz adjunta del PP, Mari Carmen de España, en 2017, instó al tripartito a abrirse al diálogo: “Pedimos al tripartito que no tengan tanta prisa porque volverán a meter la pata” tras la retirada de calles como General Primo de Rivera.
Algunos de los nombres que cambiaron fueron de personas poco conocidas para el ciudadano medio. Buen ejemplo de ello puede ser la eliminación de la calle a Francisco Candela Martí, jefe local de la Falange en Crevillent cuando se produjo el Golpe de Estado de 1936. Crevillent, sin embargo, sigue teniendo una calle y un Centro de Educación Infantil y Primaria a su nombre.
Con todo y con eso, tan sólo cinco de estas calles dedicadas a ciudadanos alicantinos desconocidos, pero que apoyaron el golpe y lucharon en favor del dictador Franco o de la Alemania nazi con la División Azul, se han eliminado. Más de veinte viales alicantinos mantienen su nombre a hombres que “Apoyaron el Glorioso Alzamiento que salvó a España de las ordas rojas del Frente Popular. Voluntario del Ejército del Generalísimo Franco.”
Vestigios del Eje
También es interesante hacer un ejercicio de memoria con aquellas calles dedicadas a otros estados. Sin ir más lejos, las calles que en Alicante están dedicadas a Alemania, Italia y Portugal. Estos nombres por separado nos pueden parecer un inocente homenaje a estados miembros de la Unión Europea pero, al verlos juntos podemos atisbar otro motivo “Alemania, Italia y Portugal ayudaron al ejército de Franco a ganar la guerra. Sin ir más lejos, los aviones que mataron a más de 300 personas en el bombardeo del mercado eran italianos” sentencia Sánchez Soler.
Y, efectivamente, si nos acercamos a Alicante y sus calles antiguas y modernas podemos descubrir el por qué original de llamar así a estas calles. Y no es otro que su participación en la Guerra Civil como potencias del Eje en la II Guerra Mundial.
En el caso de Alemania leemos:
Alicante en prueba de reconocimiento y gratitud rotuló esta calle en honor de la gran nación para conmemorar sus entusiasmos y fervorosos deseos y ayuda por el triunfo de la Cruzada Española de 1936–1939.
El caso italiano es aún más llamativo:
En la misma linea encontramos el nombre de Portugal:
Sin embargo, también podemos encontrar otros ejemplos similares con ciudades españolas como Teruel, al que, lejos de dedicarle la calle por el mero hecho de ser una capital de provincia, Alicante nombra una calle de esta forma por la victoria del ejército sublevado en esa ciudad.
En la Cruzada española, 1936–39, la ciudad de Teruel quedó del lado de los nacionales; y los rojos consiguieron entrar en ella tras un desesperado y fuerte ataque. Pronto fue Teruel reconquistada, después de la batalla del río Alfambra, que costó grandes pérdidas al Ejército republicano.
Embarcaciones
Otros nombres que esconden tras de sí una relación directa con la dictadura pueden ser algunos como 25 de Mayo, República Argentina o Tucumán. Estos nombres según Mariano Sánchez Soler “sufrieron un lavado de cara durante la transición pero siguen representando lo mismo”. Se refiere a la eliminación, por ejemplo, de la palabra previa “Acorazado”, en el caso de Tucumán. Con lo que se consiguió enmascarar el porqué original de este topónimo.
En este caso la calle está dedicada a uno de los portaaviones que participó en el bombardeo del Mercado Central en Alicante según Alicante y sus calles antiguas y modernas. Además, este navío sirvió para evacuar a centenares de sublevados hasta puerto seguro en zona nacional.
Lo mismo ocurre con 25 de Mayo y República Argentina: fueron embarcaciones que, de una forma u otra participaron en la Guerra Civil junto al bando golpista.
Alicante y sus olvidados
Después de la polémica generada cuando el PP consiguió deshacer los cambios realizados por Gabriel Echávarri en el callejero de Alicante a través de los tribunales; Barcala, una vez en el gobierno, retomó la cuestión. Eso sí, aplicando algunos cambios al proyecto original. Esto supuso que algunos de los nombres propuestos para algunas calles cayeran en el olvido. Para Sánchez Soler, “dejar caer en el olvido a las víctimas es como matarlas dos veces”.
Por ejemplo, Miquel Grau se quedó sin calle. Un joven militante de izquierdas que fue asesinado por Miguel Ángel Panadero, de la formación fascista Fuerza Nueva. Cuando Grau pegaba carteles convocando a la manifestación del 9 de octubre de 1976 (autorizada), Panadero le lanzó un ladrillo desde un ático en la Plaza de los Luceros, acabando con su vida. El concejal de Cultura, Antonio Manresa, afirmó que tiene un reconocimiento “grande” y “suficiente” por parte del Ayuntamiento de Alicante con la placa que se colocó en su memoria en el lugar donde fue asesinado.
Otro caso que cayó en el olvido con Barcala en el poder son las Maestras de la República. Mujeres que contribuyeron a crear el tejido educativo que nació con la II República por toda España y fueron ejemplo de modernidad, comprometidas con la educación en los valores de la igualdad, libertad y fraternidad.
Las 27 constituyentes también se quedan sin calle. Las primeras mujeres que entraron al parlamento en la legislatura constituyente tras la muerte de Franco pierden con el gobierno conservador la calle que el tripartito progresista había propuesto para ellas.
El último caso llamativo de este proceso es el de Amado Granell, militar leal al régimen democrático de la II República que se exilió en París tras la contienda. Este militar es reconocido en toda Europa ya que liberó la capital gala de las manos del nazismo.
Metodología
La pieza se ha basado en el estudio del callejero oficial de Alicante facilitado por el propio consistorio. Para dicho análisis, intentamos cruzar el listado de calles con la base de datos de Alicantepedia (previamente scrapeada) para identificar el menester de cada persona incluida en el vial. Ante la imposibilidad del cruzado, y con el apoyo de diferentes enciclopedias, bases de datos como la Cátedra Pedro Ibarra o Alicante y sus calles antiguas y modernas, y mecanismos digitales como Google Scholar, buscamos y clasificamos, de manera manual, todas las personalidades por su profesión.
Tras ordenar todos los datos, contactamos con Mariano Sánchez Soler, experto en Transición para darle al reportaje el contexto político y social necesario. Por otro lado intentamos dar otra visión acerca de la aplicación de la Ley de Memoria Histórica en el callejero, intentando contactar con Ciudadanos y el PP desde el Ayuntamiento. Fuimos completamente ignorados.
Por otra parte, para complementar, realizamos una sesión de fotografías a las placas de las calles más polémicas de Alicante. Y por supuesto, de la placa dedicada a Miquel Grau situada en la parte exterior de la Plaza de los Luceros.
