Los muros que repetían curso

La Consellería de Educación inicia la reforma del Instituto de Educación Secundaria Torrellano después de tres años de reivindicaciones por parte de los padres y madres

Toni Ortega
Periodismo Local Lab
5 min readMay 22, 2019

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Son las once de la mañana y el timbre dicta la pausa en la jornada escolar. Segundos después, centenares de adolescentes se dispersan por el patio. Algunos quieren divertirse en la zona de juegos, sin embargo, un cordón de seguridad les prohíbe el paso. Tampoco pueden acercarse a los muros, pues una malla impide acceder a ellos. Las grietas, los ladrillos deteriorados y las fisuras son quienes marcan las normas en un instituto que espera unas reparaciones desde hace cuatro años.

Malla que impide a los alumnos acercarse a la fachada. Foto: Pablo Beneit.

Esta es la rutina que los estudiantes y las familias del IES Torrellano denuncian desde el derrumbe de una de las fachadas del centro en el 2015. Después de tres años de espera, la Consellería de Educación ha iniciado la reparación del edificio. Sin embargo, un sector de los padres ha puesto en duda la reforma tras consultar un informe patológico de 2017 acerca del estado del mismo.

“Las obras tienen un presupuesto de hace dos años que pretende cubrir daños que han aumentado”, afirma Pablo Beneit, el portavoz del sector más reivindicativo de las familias. El colectivo critica la escasa movilización del AMPA del instituto, que resta importancia al estado de este, según el padre. Beneit añade que el estudio técnico de 2017 confirma la inexistencia de daños graves, sin embargo, mantiene que el paso del tiempo ha empeorado la situación de las infraestructuras y las patologías.

El instituto cuenta con ladrillos fisurados, filtraciones y huecos en sus fachadas, según un informe de 2017

Las familias también han criticado la falta de información de Consellería, que constató ante los padres la inexistencia de riesgo para la seguridad del alumnado, algo que ha mantenido el gobierno municipal. “Si existiera peligro de caída no permitiríamos que los alumnos acudiesen a clase”, afirma Patricia Maciá, concejala de Educación del Ayuntamiento de Elche.

Sin embargo, el informe patológico al que las familias han tenido acceso niega las versiones de Elche y Valencia. Éste califica como el “caso más crítico” a la fachada este del centro, en la que el ladrillo caravista apoya sólo tres centímetros cuando la normativa establece un mínimo de siete. Además, el estudio denuncia que el instituto cuenta con ladrillos fisurados, filtraciones y huecos en sus fachadas, todo ello desde 2017.

El ladrillo caravista apoya únicamente tres centímetros en la fachada del IES. Foto: Antonio Ortega.

“La Consellería ha desinformado premeditadamente porque conocía el riesgo que existía en el instituto”, denuncia Beneit. Estas reivindicaciones motivaron que los padres elevaran sus quejas ante el Defensor del Pueblo, que criticó también la falta de diligencia del gobierno autonómico por el retraso de la remodelación. Tras este escrito, los padres plantean llevar el caso a instancias superiores ya que afirman que se ha puesto en riesgo la seguridad de menores y la licitación debería haber sido urgente.

Deficiencias en Torrellano

El paso del tiempo también ha sido criticado por el Ayuntamiento de Elche que mantiene su compromiso por acelerar los procesos de adjudicación. “Hemos reivindicado ante Consellería más celeridad en los procesos de licitación de infraestructuras en las que estudian niños”, afirma la edil. Maciá lamenta la calidad de las instalaciones docentes de la pedanía y señala que mejorarlas es la prioridad del nuevo mandato.

“Las infraestructuras de Torrellano sufren grandes carencias en materia educativa”, declara el portavoz de los padres

“Las infraestructuras de Torrellano sufren grandes carencias en materia educativa”, declara el portavoz de los padres. Las deficiencias están presentes en todos los centros pedáneos , como es el caso del Colegio Público La Paz, cuya reforma se retrasará hasta verano de 2020.

El presidente de la Asociación de Padres y Madres del centro, Juan Carlos Mogica, afirma que el proyecto de remodelación se ha sustituido por barracones y denuncia las carencias de infraestructuras en la partida ilicitana. “Torrellano ha sufrido dejadez en educación durante los últimos años”, señala el portavoz. Este destaca el esfuerzo realizado por el colegio para impartir clase con normalidad, lo que obligó a eliminar la biblioteca, el gimnasio y el aula de música para atender el volumen de alumnos.

El Colegio La Paz también ha tachado como “un engaño” la gestión del proyecto por parte de Valencia, ya que el plan de reparación presentado en 2017 se iba a realizar sin un informe patológico previo, según denuncia el AMPA.

El Ayuntamiento de Elche lamenta la lentitud en la licitación del proyecto, al igual que en el caso de la fachada del Instituto, y afirma que la próxima legislatura será notable para la educación de la ciudad. “Si no conseguimos dignificar los colegios e institutos habremos fracasado como gobierno”, afirma la concejala mientras reconoce que entiende la indignación de los padres.

La edil culpa del deterioro de las infraestructuras a la legislatura del Partido Popular y afirma que desde su entrada al gobierno han reiterado a Consellería que eliminase los barracones. Por otro lado, Maciá atribuye el estado del instituto a la empresa CIEGSA, constructora del mismo durante el mandato del PP.

El material de obra se transporta al centro para el inicio de éstas. Foto: Antonio Ortega.

Por otro lado, las familias critican la escasa actuación del gobierno actual, aunque también mantienen que las patologías corresponden a la edificación del centro durante la legislatura anterior. Además, tachan el proyecto de reforma como una medida para “salvar las elecciones” y denuncian que las obras se realicen con los estudiantes dentro del edificio.

Desde el instituto señalan que se trasladará a los alumnos a otras aulas y se bajarán las persianas de las más próximas a la zona de obras si el ruido impide impartir clase. Mientras tanto, los alumnos oyen cómo el timbre vuelve a sonar y su descanso termina. En clase se preguntan si las obras serán las responsables de que los que marcan las normas de su recreo pasen de curso. Para conocer la respuesta tendrán que esperar a que la hora del patio llegue de nuevo al IES Torrellano.

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Toni Ortega
Periodismo Local Lab

Estudiante de Periodismo en la Universidad Miguel Hernández.