Una Corte de Australianos ancianos

RoverismoSV
Miscelaneas Scout
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4 min readNov 25, 2015

UNA CORTE DE AUSTRALIANOS ANCIANOS

Los hombres viejos con cabellos y barba gris son los consejeros de la nación, y portan diademas de plumas negras en sus cabezas, mientras que los hombres jóvenes usan plumas blancas. Para las ceremonias o “corroborees”, como ellos las llaman, su pelo y su cara está pintada con bandas de colores rojas y blancas.

EL ADIESTRAMIENTO DE LOS MUCHACHOS

Los muchachos antes de que lleguen al rango de hombres, deben presentarse delante de los ancianos, y son sometidos a pruebas y ceremonias.

Una de las pruebas es que el curandero armado con un cincel de piedra y un martillo, saca uno de los dientes del muchacho. A veces se necesitan media docena de golpes antes que el trabajo sea realizado, pero se espera que el muchacho no dé señales de miedo o dolor.

La actitud de cómo él lleva a cabo la iniciación es curiosa: primero dos hombres se acuestan boca a bajo, en el suelo, y el muchacho que va a ser operado se acuesta atravesado sobre ellos.

El muchacho posteriormente es empapado en pintura blanca y mandado hacia el bosque para que permanezca sin ser visto por algunas semanas.

Si él permitiera ser visto por una mujer, ambos serían asesinados. De hecho, a las mujeres no les está permitido estar presentes en las ceremonias de su iniciación, y así, antes de que comience, heraldos corren haciendo sonar el “Bidu Bidu” o “Bramador de Toro”, un pedazo de madera plano con un corto hilo amarrado a él con el que lo agitan alrededor y alrededor hasta que hace un profundo sonido.

El muchacho recibe también algunas palabras de consejo paternal de los mayores acerca de cómo debe comportarse como un hombre, después de lo cual se le dan ornamentos y armas que sólo a los hombres se les permite usar. Éstas consisten en un cinturón ornamental, un pedazo de soga alrededor de la cintura hecho con cabello humano; también una banda alrededor de la cabeza de la que cuelgan dos manojos de plumas de cacatúa blanca.

Sus armas son lanzas con puntas afiladas de hueso o piedra; boomerangs, que son curvos, varas afiladas que pueden volar una distancia inmensa a una gran velocidad, y en ciertos casos pueden ser lanzadas para que regresen al lanzador; también woomera, una especie de manopla plana con un pico que embona en una ranura en la base de la lanza, con el que pueden arrojar sus lanzas a una gran distancia. (Haz una e inténtalo tú mismo. Lanzar el boomerang es un buen deporte también, y algunos sujetos se vuelven extraordinariamente buenos en ello, arrojándolo setenta u ochenta yardas y haciendo que regrese a ellos).

JUSTICIA

La corte de ancianos también juzga a cualquier hombre que se niegue a cumplir las leyes de la tribu. Cuando hacen discursos lo hacen de una manera más vívida que nosotros; un viejo describe el crimen del prisio nero, brinca, arguye y gesticula con tal excitación que generalmente termina su discurso de puro exhausto.

En este caso el culpable se había reído cuando uno de los ancianos se tropezó con un leño. Si tal cosa pasara con un joven, cualquiera lanzaría una carcajada (ya que son de lo más joviales), pero los ancianos deben ser tratados con mucho respeto.

Entonces el prisionero es confrontado con el ejecutor, un médico brujo horriblemente pintado, decorado y armado con una gran hacha de piedra.

Antes de ser asesinado se le permite hablar en su propia defensa.

En este caso el prisionero le dice a los ancianos cómo una vez peleó con un gran “canguro anciano”, y muestra en acción cómo el canguro trataba de golpearlo y abrirlo con sus patas traseras mientras daba brincos inmensos hasta que vio su oportunidad y le arrojó su lanza en el corazón.

La corte naturalmente se excitó mucho con la dramática escena actuada ante sus propios ojos, y en vez de condenarlo se vieron forzados a aplaudirle.

CABALLEROSIDAD

El jefe de la corte entonces proclama que es perdonado y se le excusa de sus crímenes gracias a su valor personal.

Esta decisión de la corte es recibida con aclamaciones por el resto de la tribu, que había estado parada alrededor, mirando los procedimientos desde que el Bramador de Toros los había llamado a juntarse.

La manera de manifestar un “hurra” es gritando, “ah, ah, ah”.

AMISTAD

Cada miembro de la corte felicita al prisionero por haberse salvado.

Donde nosotros nos estrechamos la mano, ellos presionan sus pechos.

Las tribus normalmente están en guerra unas con otras, pero un mensajero es siempre considerado como sagrado y no susceptible de ser matado o captura- do, ya que se presume que lleva un cargamento importante.

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