II. Brillo de esperanza, ¡una nueva transformación!
¡Poof! ¡Magia por todos lados!
Cuando enfermé, no encontraba sentido de seguir viviendo con un cuerpo que no respondía y que había perdido funcionalidad. Así es, así de mal estuve…
“Si me voy a morir, pues mejor hago algo me gusta mientras pueda”.
Este fue uno de los pensamientos del momento. Todos mis planes de vida y anhelos se desvanecieron al sentir que mi mente y cuerpo se quebrantaban. Al comparar mi camino con el de mis amigos y compañeros y al ver que yo me estaba “quedando atrás”, sufrí una gran herida emocional al sentir que nunca mejoraría. Mi situación era tan severa y desesperante que sentía que mi vida podía acabar en cualquier momento, por lo que decidí entrar al mundo de la música, algo que siempre quise hacer. Aunque estaba haciendo algo que quería, seguía empeorando aún más. Mi vida se sentía asfixiada y mi conexión con las personas se debilitaba gradualmente…
A nivel de médicos y profesionales de la salud, no me encontraban nada particularmente extraño. Según las evaluaciones y exámenes médicos, todo estaba “normal”.
No entendía que estaba pasando…
Tanta incertidumbre era exageradamente frustrante y un golpe bajo para mi alma, claramente no me sentía bien. A pesar de todo, siempre supe en mi interior que encontraría una solución que localizaría la “raíz” del problema. Que bueno que fui paciente y enfocado en mi camino, no sé como no perdí la cabeza en ese tiempo.
Hoy, me siento infinitamente agradecido por el apoyo de mis seres queridos y por haber encontrado la solución, pero no puedo negar que hay momentos de tristeza por no haberla encontrado antes.
Por todo esto, siento una alta necesidad de compartir mi historia porque posiblemente muchos están pasando por algo similar.
Para mis entradas del blog, he decidido evitar contar detalles y acontecimientos particulares de ese tiempo oscuro. En vez, utilizaré símbolos, imágenes y referencias para comunicar el sentimiento y la esencia de mi camino.
Después de muchos años y gracias al Internet, encontré a Anna Gibson Steel, una mujer que tuvo su propia historia de dolor y estrés crónico al punto de perder casi toda su funcionalidad física. Esto severamente impactó su alma, ahogándola en depresión. Con el tiempo y mucha perseverancia, encontró la solución, sanó y decidió compartir su mensaje con el mundo abriendo su propio Centro Holístico de Excelencia (al hacer clic en el hipervínculo, podrán ver a Anna y su hermosa energía). Hice contacto con ella y tuve el enorme privilegio de tener una conversación por Skype, ella en Irlanda y yo en Honduras, ¿!se imaginan!? En cortas palabras, Anna es un ángel.
Una vez que ella compartió la solución y empecé a sentir resultados, comprendí porqué había enfermado y lo que tenía que hacer para recuperar mi vida. En este proceso, obtuve herramientas que le permitieron a mi cuerpo sanarse por sí mismo; nuestros cuerpos tienen esa capacidad, pero en ciertas ocasiones necesita asistencia guiada.
Anna me explicó que para aumentar el poder de las técnicas, idealmente tenía que divertirme con ellas y sentir que era un niño otra vez, así evitaba rigidez y frustración, especialmente durante los bajones. Al descubrir que el “divertirse” era clave para facilitar el aprendizaje y suavizar la recuperación, me di cuenta que podía utilizar mi imaginación para ver mi proceso de vida de una forma distinta.
En este camino descubrí que la imaginación es un gran regalo que dejamos de aprovechar en la etapa “adulta”. De niños y adolescentes utilizábamos esta facultad siempre, nos divertíamos y nos sentíamos poderosos.
¿Porqué será que en la edad adulta nos volvemos tan serios y secos de magia y poder?
La buena noticia es que la habilidad de utilizar la imaginación nos acompañará siempre, simplemente hay que reactivarla y usarla a nuestro favor.
Lo siguiente puede parecer “infatil” para muchos, pero a mi me resultó y me sigue dando resultados. Me arriesgaré en contarles cómo puse a trabajar mi imaginación:
Empecé a identificarme con uno de mis personajes favoritos de los juegos de video para aliviar la frustración y ver mi recuperación como un reto. Me refiero al personaje de Link de la serie The Legend of Zelda. Link se hace más fuerte y obtiene nuevas habilidades tras resolver acertijos en templos y derrotar monstruos formidables.
Esto cambió todo para mi y empezó a ser muy divertido…
En estos juegos, el personaje siempre inicia en un contexto de crisis y recibe una invitación para iniciar una aventura. Es apoyado por personas en el camino, adquiriendo nuevas armas, poderes, habilidades, aumentando su resistencia y energía vital. Muchas veces es derrotado y debe acudir al descanso, hadas o pociones mágicas para restaurar su energía. Hay momentos donde Link se enfrenta a enemigos muy fuertes para él y lo sabio es retirarse, pero al aumentar su fuerza y conocimientos, se vuelve capaz de vencer esos mismos enemigos con destreza.
Si traducimos esto a la vida “real”, todo encaja a la perfección. Esto es porque algunos juegos de video son un reflejo de las historias de muchas personas, nada más que utilizan símbolos, colores, mundos imaginarios, destellos de luz y magia. Cada elemento que aparece en los juegos de video está inspirado en un elemento de la vida real. Por ejemplo y en mi caso:
Monstruos =Momentos cuando no me sentía/siento bien. También pueden representar retos o pensamientos nocivos. Este es el momento perfecto para utilizar las técnicas o “armas” que he adquirido.
El sabio que guía a Link= Mi mentora, Anna Gibson Steel.
Espada Maestra=Técnica principal que me brindó Anna. A futuro tendré que hacer otra entrada para contarles sobre esta, es increíblemente sencilla y fascinante, hasta un niño de 5 años puede utilizarla.
Pociones mágicas =Líquidos que restauran como el agua, té calientes o licuados. Supongo que para otros puede ser una cerveza o tequilazo XD
Escudo de espejo=Herramientas emocionales para protegerme y reflejar ataques emocionales.
Y así sucesivamente. Si lo veo de esa manera, todo se vuelve emocionante y mágico✨Además, esto me ha llenado de coraje para adueñarme de mi historia.
Al hacer uso de mi imaginación de esta manera, aumento mi energía y valor para continuar mi entrenamiento hacia el bienestar. Este camino contiene altos y bajos, derrotas y logros, siendo la perseverancia y la fe elementos claves para triunfar.
He emprendido un nuevo camino en donde me atrevo a soñar otra vez.
Que alegría me da saber que puedo identificarme con un personaje ficticio cuya creación nace por la inspiración de la historia de miles de personas y acontecimientos en la humanidad.
Aunque Link y el mundo donde él habita no existen en nuestro plano físico, existen en mi corazón e imaginación. Con eso me basta.
Les extiendo la invitación de utilizar su imaginación para crear soluciones propias y pensar en sus personajes favoritos, ya sean de películas, cuentos, figuras religiosas, juegos de video, ánime, novelas, etc. Piensen en personajes que les haya inspirado; no tengan miedo ni pena de sentirse identificados con ellos. Además, todo esto permanecerá en la imaginación y nunca nadie se dará cuenta ;)
¡Les deseo mucha magia y diversión en sus caminos!
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