Story #3: “Si no estás en Internet, no existís”
Estamos constantemente conectados: transmitiendo, consumiendo, consultando y generando información; ya sea desde las redes sociales, aplicaciones de mensajería instantánea, buscadores u otros: internet se ha vuelto primordial en nuestras vidas.
Diez años después del nacimiento de esta red, con el constante y acelerado avance de la tecnología, Bill Gates predijo una hipótesis que hoy, sin dudas, es un hecho comprobado:
si no estás en Internet, no existís.
Un nuevo mundo
Con la incorporación de esta nueva herramienta, el comportamiento de la sociedad se vio notablemente afectado y muchos hábitos, atravesados. Un ejemplo claro de esto es la búsqueda de un proveedor o servicio que, anteriormente, se realizaba a través de las ya obsoletas páginas amarillas y hoy, se realizan a través de un smartphone en apenas unos segundos.
En este sentido es que las marcas deben crecer, aggiornarse y evolucionar en torno de esta revolución que implica que, ‘cuando un usuario te busque, te encuentre’.
¿Qué es lo que supone cognitivamente cuando no encontramos una marca? que no existe. Si no está en ese medio donde se concentra la mayor cantidad de información del mundo, es que no existe, o bien, que no está donde debiera estar.
El desafío de ‘ser relevante’
Una marca que quiera generar una relación con su audiencia, no solo debe ofrecerle la posibilidad de encontrarla, sino proporcionarle y anticiparse a toda la información que ésta pueda requerir y que refieren puntualmente a su negocio y al servicio que ofrecen ¿quién más que él mismo sabe y conoce lo que hace?
Estar un paso adelante, eso es lo que un negocio debe aprender a hacer en internet. Entender, descifrar, cuestionarse y pensar como si fuera un usuario, son las claves para una buena UX (user experience), la cual, debe ser netamente primordial a la hora de plantear su estrategia de comunicación.
Partiendo de una buena estrategia, en donde los objetivos comerciales, y de marketing se conjugan para establecer cuales son los pasos a contemplar para alcanzarlos, es que una marca puede empezar a trazar su camino para que el usuario encuentre ‘lo que está buscando’; y cuando decimos esto, nos referimos a que no solamente esta red debe utilizarse con objetivos netamente comerciales (si, vender!), sino que también debe tener en cuenta el marco de interés en torno al producto/servicio que comercializa y así, ¡ser relevante!.
En un tiempo no muy lejano, en donde todo se haya sistematizado y toda esa GRAN CANTIDAD DE INFORMACIÓN llamada data base haya establecido patrones y comportamientos, el usuario sólo recibirá la comunicación de aquellos anunciantes que sean relevantes a sus intereses. Para llegar a esto, primeramente la marca deberá realizar un largo recorrido para entender y descifrar al usuario que <<la está buscando, porque quiere encontrarla>>.
