¿Y eso qué es?… preguntas que evolucionan

Ayer, en una conversación breve y casual, hablando sobre las experiencias vividas durante el último año, comenté que a finales de septiembre había terminado un máster en psicología positiva, a lo que la respuesta de mi interlocutor fue… “¿Y eso qué es?”

La charla se quedó ahí, no dio para más, pero hoy al levantarme he tenido un momento eureka!, y he caído en la cuenta de que me han hecho esa pregunta muchísimas veces. Fundamentalmente en temas que se relacionan con mi propósito vital, mis espacios de aprendizaje, mis intereses. Relaciones humanas y públicas, inteligencia emocional, Lego® Serious Play®, psicología positiva, liderazgo compartido, organizaciones adaptativas, organizaciones líquidas, evolución del trabajo, Ohana… son algunas palabras (conceptos, metodologías, conocimientos, ciencia e investigación…) que he ido incorporando a mi desarrollo profesional y personal y que, en todos los casos, en algún/os momento/s han recibido la misma pregunta: ¿Y eso qué es?

Y mientras doy vueltas sobre esa pregunta común, voy descubriendo respuestas compartidas:

Es acercarse a la vida desde la curiosidad y el interés por descubrir cosas nuevas.

Es descubrir y aprender cada día.

Es querer y creer con todas tus fuerzas que es posible evolucionar.

Es actuar en consecuencia.

Es rodearse de personas que miran un mundo con matices, con oportunidades esperando a ser descubiertas.

Es poner tu energía al servicio de los demás y al tuyo propio, para poder dar lo mejor, para florecer.

Definitivamente son muchas personas las que preguntan, pero también cada vez somos más quienes compartimos respuestas, quienes trabajamos en la construcción de un mundo mejor, en el que las personas puedan desarrollar todo su potencial.

De alguna manera u otra esta tribu se va conectando, nos vamos encontrando, sin importar las barreras (distancias físicas, idiomas diferentes, historias y conocimientos diversos…). Vamos coincidiendo en el camino y generando espacios para compartir y construir nuestra Ohana.

Y enlazando mis propias reflexiones, llego a la conclusión de que personalmente, estoy viviendo ese momento, el del encuentro y el descubrimiento de personas maravillosas con las que transformar la pregunta inicial, de “¿Y eso qué es?” a “¿Cómo lo hacemos?”. Momentos y espacios donde podamos construir juntos nuevas respuestas y descubrir nuevas preguntas. Es por ello que, la ilusión, las expectativas, la curiosidad, me llevan a desear que llegue el próximo marzo y participar en la nueva edición del Ohana Meetup 2019. Deseo y espero que esta sea una posibilidad de crear y reforzar lazos para nutrir a este gran ecosistema de personas que trabajamos en la (re)evolución del trabajo (y el mundo).