Alerta: violador suelto
Desde hace unos días que tengo la necesidad imperiosa de ahogar mis dos o tres penas en Asimov. La primera pena, se pasa, la segunda, también, la tercera es un poco más peliaguda pero se sobrevive o eso dicen-: cuentan que te vas acostumbrando hasta que te cagas en quien te hizo creer…