Crisis migratoria en Costa Rica y en el mundo
La migración cubana a Estados Unidos
A finales del 2015, la migración de los cubanos desde su país hasta Estados Unidos llamó la atención de muchos. Después de los mexicanos, corresponden a la mayor comunidad hispana en los Estados Unidos.
La crisis inició alrededor del 15 de noviembre de dicho año, cuando Nicaragua les impidió el paso a los inmigrantes. Rosario Murillo, portavoz del gobierno de Nicaragua y primera dama, denunció una violación al territorio nacional y el ingreso forzado de inmigrantes irregulares de nacionalidad cubana.
Paso de los cubanos por Costa Rica
La ruta por Ecuador se utiliza debido a que desde abril del 2014 el gobierno de este país anunció que ya no pediría carta de invitación para entregar visas a los cubanos; estas visas serían válidas hasta por tres meses.
De esta manera, se estaría evitando el paso entre Florida y la Habana, ante el riesgo presentado por la posibilidad de ser devueltos a su país al ser interceptados por autoridades tanto estadounidenses como cubanas.
Saliendo de Cuba, la ruta empieza por Ecuador, adonde se trasladarían por vía aérea. Una vez ahí, atraviesan la frontera entre Ecuador y Colombia por tierra; para después viajar por vías marítimas hasta Panamá. Desde este último, se trasladan una vez más por tierra hasta Paso Canoas, por donde ingresan a Costa Rica.
Ante la acumulación de inmigrantes en Paso Canoas, las autoridades migratorias costarricenses les otorgaron a los cubanos una visa temporal de siete días, para que así pudieran continuar con su viaje hacia Estados Unidos.
Una vez en Costa Rica, el plan era continuar por tierra hasta la frontera con Nicaragua. Esto no fue posible dado a que las autoridades nicaragüenses les cerraron el paso en la línea fronteriza.
Nicaragua cierra sus fronteras
Nicaragua sostiene que permitir el cruce de su territorio rumbo a Estados Unidos no solo los expondría a peligros graves, sino que también estaría legitimando políticas ilegales.
El 15 de noviembre, Nicaragua cerró fronteras y desplegó a su ejército para así impedirles el ingreso a los cubanos.
Esto ha causado tensión entre Costa Rica y Nicaragua, cuando militares nicaragüenses repelieron a 800 cubanos que buscaban pasar por Peñas Blancas. Fueron devueltos a Costa Rica luego ser acusados de “entrar por la fuerza”.
El gobierno de Nicaragua denunció la violación de su territorio e igualmente cuestionó a las autoridades costarricenses. Rosario Murillo, portavoz y primera dama, aseguró:
“Costa Rica, en una acción deliberada e irresponsable, lanzó y sigue lanzando sobre los puestos fronterizos del sur de Nicaragua a miles de ciudadanos cubanos que permanecían en su territorio”
El canciller costarricense, Manuel González, condenó el uso del ejército contra los cubanos y considera que Costa Rica actuó de manera responsable al otorgar las visas a los cubanos y al “valorar el aspecto humanitario” de esta situación:
“Costa Rica no originó el problema. El problema estructural surge desde Ecuador hasta Estados Unidos, si no hay una acción coordinada de todos los países para atender esta problemática, no va a haber una solución estructural al tema”
Plan Alternativo
Debido a la negativa de Nicaragua, se desarrolló un plan alternativo para poder completar el viaje de los cubanos a Estados Unidos.
El Gobierno costarricense tuvo que abrir una gran cantidad de albergues y destinó más de un millón de dólares en dar atención humanitaria a los inmigrantes, mientras buscaba una solución ante la negativa de Nicaragua. Esta solución tomó varias semanas de reuniones con autoridades de todos los países por los que se podía transitar y con Ecuador, que ha servido como plataforma para estos viajes debido al levantamiento de requisitos para la obtención de la visa.
Es debido a esto que miles habían salido de Cuba ilegalmente, con la ayuda de “coyotes”, hasta que el pasado noviembre uno de estos grupos de tráfico de personas cayó. Esto llevó a Costa Rica a intentar regularizar el flujo de inmigrantes. Vale destacar la labor diplomática que asumió Costa Rica para negociar estos acuerdos, a pesar de topar con la insistencia de Nicaragua en no dejarlos pasar, argumentando en que consistía en una acción irresponsable y una amenaza en contra de su soberanía.
Los cubanos esperaron por semanas una decisión, la cual llegó con la salida de Costa Rica del SICA, el Sistema de Integración Centroamericana, ante la falta de apoyo de los países vecinos ante la situación.
A finales de diciembre, los gobiernos de Centroamérica y México acordaron en Guatemala hacer una prueba piloto para trasladarlos a territorio mexicano a los miles de inmigrantes cubanos varados en Costa Rica.
El plan de viaje desde Costa Rica consistía en una salida por vía aérea desde el aeropuerto de Liberia y un cruce en autobús por El Salvador y Guatemala hasta llegar a Tapachula, en México. Una vez ahí se les otorgará una visa por 21 días para que puedan llegar a suelo estadounidense, donde la Ley de Ajuste Cubano les concede residencia a los cubanos que cumplan con los requisitos debidos.
El 15 de enero de este año, el primer grupo de los 8.000 cubanos que estaban varados en Costa Rica llegó finalmente a Estados Unidos.
Una vez ahí, la organización Cubanos en Libertad se encarga de realizar el encuentro con sus familiares y les da refugio en caso de que no tengan.
Situación Actual
Costa Rica dejó de emitir visas de tránsito para los cubanos desde el 18 de diciembre. Luis Guillermo Solís, presidente de esa nación, anunció que se estaría deportando a quienes ingresaran ilegalmente a partir de esa fecha.
Igualmente, ha sostenido reuniones con el Presidente de México, Enrique Peña Nieto, y el Presidente de Guatemala, Jimmy Morales para agilizar la frecuencia de vuelos y salida de la población cubana a Estados Unidos. Los detalles de nuevos vuelos y logística internacional se darían a conocer dentro de unos días.
Hasta el momento, los cubanos han agradecido inmensamente a Costa Rica por el respeto a los derechos humanos que se presentó ante su situación.
El numero de inmigrantes que han salido de Cuba y pretenden llegar a Estados Unidos ha incrementado desde el 2015 debido al temor colectivo a que cesen los privilegios migratorios entre Estados Unidos y Cuba para obtener residencia.
Valeria Sell es estudiante de Ingeniería en Computación y adjunta en la Secretaría de Bienestar del CE 15–16
