¿Qué es la escuela?
Esta pregunta me recorrió la cabeza durante toda mi experiencia en la secundaria, a veces el tiempo pasaba, los meses transcurrían pero siempre estaba ahí y ahora en mi último año esta pregunta empezó a resonar mucho más debido a que la escuela pasó a un segundo plano en mi vida, en donde empecé a dedicarle mucho más tiempo a hacer lo que más me gusta que es jugar al fútbol y el colegio ya no era mi prioridad por lo tanto mis notas no fueron las mejores.
Mis primeros años en la escuela secundaria fueron como cualquier alumno normal entraba a la mañana al colegio y en la tarde me retiraba terminando la jornada escolar. Mi escuela posee una exigencia alta debido a la carga horaria de la escuela que es de doble turno pero nunca en mis primeros en años me costó mucho debido a que prestaba atención y estudiaba para las pruebas que me costaban más y así fui aprobando todas las materias en mis comienzos en la secundaria. Luego en tercer año elegí una orientación, que es una posibilidad que te ofrece la escuela para que dentro de ciertos intereses educativos que decide la escuela puedas decidir, yo elegí informática porque dentro de las ramas que había era la que más me interesaba. Para mi fue un gran año porque tuve la oportunidad de cambiar de curso porque juntaban a todas las personas que habían elegido la misma orientación y los mezclaban a todos para crear nuevas divisiones que permitieron nuevos compañeros, amistades y experiencias. En lo personal este año fue un punto de inflexión porque fue cuando la escuela empezó a importarme menos y teniendo más trascendencia las actividades extracurriculares, en resumen fue un año de aprendizaje, nuevas experiencias y muy divertido.
2020 seguramente fue el año más particular que cualquier alumno de la secundaria haya vivido, en lo personal mi año arranca en verano cuando me estaba preparando para intentar ingresar a un club profesional de fútbol que tiene una exigencia mucho más alta a nivel técnico y físico que cualquier otro club regular, antes de comenzar mi cuarto año de secundaria puede quedar en uno de estos clubes que demandaba que todos los días a la tarde vaya a entrenar a las 14:30 pm. Esto era imposible de compaginar con la escuela porque yo terminaba mi cursada entre las 16:00 pm y 17:30pm, entonces ya comencé a hablar con mis papas por el tema de cambiarme de escuela para poder entrenar todos los días en ese horario y poder ir a una escuela que se acomode a esos horarios pero a penas comencé mi año escolar apareció el Coronavirus, un virus que puede causar enfermedades respiratorias, altamente contagioso y que podía ser letal, por lo tanto el gobierno decidió que todos los ciudadanos debían encerrarse en su casa y nada más salir para las necesidades básicas como comprar comida y los trabajadores esenciales para trabajar por supuesto.
https://www.boletinoficial.gob.ar/detalleAviso/primera/240233/20210130(Decreto sobre el DISTANCIAMIENTO SOCIAL, PREVENTIVO Y OBLIGATORIO Y AISLAMIENTO SOCIAL, PREVENTIVO Y OBLIGATORIO )
A partir de este virus nadie sabía cómo iba a continuar todo porque casi todas las cosas de la cotidianidad se perdieron, la escuela, reuniones sociales, ir a comer, etc. Una de las cosas que más le preocupaba a la sociedad era cómo iba a continuar la educación de ahora en adelante debido a la ausencia de presencialidad y ahí entro esta famosa aplicación Zoom, una app digital que permite hacer reuniones virtuales en donde hay un anfitrión que dirige la Reunión y participantes que asisten a la misma. Esto permitió millones de posibilidades, clases educativas, reuniones sociales, entrenamientos físicos, etc.
Al principio fue complicado, teníamos pocas horas de colegio y luego algunos profesores nos mandaban trabajos prácticos que muchas veces no los entendíamos bien porque no habíamos tenido clase y nos daban algún material didáctico para que podamos hacerlo o teníamos clase pero era mucho más difícil explicar un tema para el profesor desde una pantalla sin saber si del otro lado te prestan atención. A medida que fue avanzando el tiempo las cosas cada vez fueron mejor, ya empezábamos a tener días completo de colegio, los profesores empezaban a manejar mejor la aplicación y eso permitía una clase más fluida y más clara y hasta nos pudieron evaluar de manera directa a través de un examen oral que respondemos en una Reunión privada con el profesor. En este aspecto tengo que reconocer a mi Secundaria que en ese aspecto fue sobresaliente porque supieron utilizar los recursos que tenían para poder brindarnos la mejor educación que tenían al alcance y en particular hacer énfasis en los profesores y asistentes educativos de mi colegio porque pusieron todo su voluntad y esfuerzo para poder hacer el año lo más llevadero posible porque podrían haber mandado un par de trabajos prácticos en cada trimestre sin haber tenido clases virtuales y que a través de algún material que ellos nos daban poder estudiar de ahí, en cambio la gran mayoría le ponía muchas ganas para poder generar el mejor ambiente educativo posible. También en lo personal mi coordinadora fue de muchísima ayuda porque me facilitaba la comunicación con el docente a través de su posición, me aconsejaba constantemente y realmente me ayudó a poder transitar ese año con mucho comodidad y seguridad.
Finalmente llegó a 5to año de la secundaria, un año que empezó con muchas dudas acerca de mi futuro porque ya transcurrido un año entero de pandemia volvieron a la normalidad los entrenamientos pero como pasaba de categoría empezaba a entrenar a la mañana, desde las 6 o 7 de la mañana hasta las 9 am o 10 am todos los días. Entonces como mi secundaria es de doble jornada arrancaba a cursar a las 7:40 am hasta las 4:oo pm aproximadamente todos los días, por lo que tenía que perderme casi toda la mañana para poder cumplir hacer las dos cosas, por lo que yo pensaba que me iba a cambiar de escuela ya que cuando empezamos hablar con el colegio y no ofrecían mucho apoyo al principio para que yo pueda cumplir con el entrenamiento y el colegio. Gracias a dios mis papas me insistieron en que tenía que terminar en la misma institución que ya solo me quedaba el último año y que tenía que terminar con los mismos compañeros, por lo que mis papas movieron cielo y tierra para que pueda seguir, hablaron con directivos, tuvieron reuniones para poder llegar un acuerdo y luego de insistir y insistir pudieron conseguirlo. Llegamos a un acuerdo con la directiva del colegio en donde básicamente me permitieron entrenar pero yo debía estudiar afuera de la escuela para poder lograr los mismos conocimientos que mis compañeros y a través de la constante comunicación con el profesor poder llevar las materias que faltaba de la mejor manera posible.
A partir de que pudimos llegar a este acuerdo con el colegio me “convertí” en un estudiante-deportista , esto se trata de una persona que es una atleta de alto rendimiento, que significa que practica un deporte a gran nivel competitivo y a la vez cursa algún tipo de estudio, secundario o universitario. Esto conlleva a este gran parte del tiempo cumpliendo alguna de estas dos cosas, el estudio o el entrenamiento, por lo que en lo personal puedo decir que conlleva un gran esfuerzo mental y físico pero yo no considero que sea un sacrificio porque tu elección es esa ya que nadie te obliga a hacer ese deporte todos los días, es decisión tuya. También yo pienso que a nivel mental es muy complicado poder hacer ambas disciplinas porque te exigen un nivel de concentración extremo y es muy difícil mantener esa concentración por tantas horas ya que sino disminuye tu rendimiento deportivo o académico. Además tenés que lograr una tolerancia al error muy alta porque si el entrenamiento de la mañana no te sale como querés no podes permitir que te arruine todo el día porque constantemente te vas a equivocar debido a que somos humanos y está en nuestra naturaleza. Por lo tanto para mi eso es lo más complicado poder salir del club y si hago te salió mal ya cuando estas en el colectivo de vuelta yendo para la escuela “cambiar el chip” porque tenés que rendir en la parte académica también.
Artículo de una universidad sobre los estudiantes-deportistas
Nota de un diario de Rio Negro sobre un Estudiante-deportista universitario
El transcurso de este último año de secundaria fue una montaña rusa de emociones en las que muchas veces mi estado de ánimo dependía de cómo me había ido en el entrenamiento y eso repercutió mucho en mi ánimo en las clases porque si había sido un buen entrenamiento iba con mucha mejor predisposición a las clases y era mucho más participativo en estas pero si a la mañana no me salían las cosas como quería empezaba las clases cansados, me costaba mantener la concentración y por lo tanto me dispersaba más fácil. A lo largo del año fui luchando con eso y de a poco fui mejorando en ese aspecto, a sí mismo la mejora académica fue progresiva, al principio me distraía muy fácil y sinceramente no estaba cumpliendo como debería pero a medida que fue pasando el tiempo cada vez me esforzaba un poco mas y llegue al final de año mejor pero con muchas materias mal debido a que el principio del año me paso factura pero tranquilo porque si me esfuerzo en las semanas de recuperatorio voy a aprobarlas todas. En el aspecto de fútbol también fue un año insatisfecho porque no pude dar todo lo que tenía y me faltó esforzarme más, principalmente en la mitad del año. Pude tener un progreso paulatino pero no fue tanto como esperaba pero todavía sigo con hambre de mejorar y de seguir intentando.
Bueno ya finalmente está terminando el año luego de muchas cosas, experiencias lindas y duras, conociendo gente nueva y sobre todo de mucho tiempo de disfrute y felicidad porque a final de cuentas hago lo que me gusta y eso es impagable. Ya con un par de materias por rendir a final de año terminando la etapa de la secundaria me vuelvo a preguntar ¿Qué es la escuela? y luego de todo este año que no concurrí mucho a la que escuela ya que la realice por zoom me doy cuenta que es la gente, la gente que compone a la institución es lo que en verdad enriquece a una escuela y para mi es lo que más me llevo de la secundaria, los amigos, compañeros, relaciones, etc. Porque además de todo lo que te pueden llegar a enseñar en un salón de clases como la historia Argentina o cómo resolver una ecuación, de donde más aprendes es de la gente, de cómo tratar dependiendo de la persona, la educación, como relacionarse, tener empatía por el otro, trabajar en equipo, etc. El otro día fue el acto de egreso de mi colegio y en el primer discurso que daban lo terminaban con una frase que representa a esta escuela mucho que es “educar para la vida” y ya finalizando esta etapa reflexiono y en ese punto estoy absolutamente seguro que cumplí desde el día uno, capaz no tuve las mejores notas y hasta me lleve alguna materia a febrero pero en ese ámbito saque sobresaliente. La persona que entro a este colegio es una totalmente diferente a la que sale, mas madura, mas segura, mas sabia y sobre todo más preparada para la siguiente etapa de la vida. Finalmente solo me queda agradecer a todos, amigos, compañeros, profesores, asistentes educativos como mi coordinadora, directivos y también no me quiero olvidar de todas las personas que cuando los alumnos se van siguen trabajando como las personas de limpieza que hace que todos los días encontramos los baños limpios, las aulas, etc. Y a la seguridad del colegio que nos hacen sentir seguros dentro y fuera de la institución y a veces estas personas pasan desapercibidas pero son fundamentales para que la escuela se mantenga a flote y desde mi posición de alumno les agradezco. Por el último agradecerle a la institución de poder seguir en la escuela y a la vez entrenar y aunque no estaban preparados para este tipo de situaciones se que hicieron un gran esfuerzo para estar a la altura y les pido a todos los que componen a la escuela que den lo mejor de ellos y siempre sigan esforzándose todos los días porque todos ustedes hacen la “magia” de la escuela. Gracias.
Agustín Saggio
