OS City: una apuesta por el #GovTech en América Latina
La historia de OS City comienza en el 2017 cuando dos de sus fundadores se conocen en el Fellowship OEA para Gobiernos Abiertos de América Latina. Allí pasaron más de 6 meses pensando cómo mejorar los niveles de transparencia y eficiencia en la operaciones de gobierno: cómo modernizar a un sector rezagado. Lo que comenzó como una relación personal, hoy se fortalece como una relación profesional. Lo que en principio eran solo ideas, hoy se transforma en una alianza por la mejora de la democracia mediante el uso de las tecnologías de la cuarta revolución industrial.
OS City es el resultado de la integración de tres empresas: Data 4, una startup de investigadores, desarrolladores y diseñadores apasionados por encontrar y comunicar respuestas con datos; Prince Consulting, empresa con más de 20 años de experiencia en la consultoría a gobiernos; y One Smart City, startup de software datos e Inteligencia Artificial. Es así que estas tres iniciativas se unen como OS City para hacer frente a los principales problemas de gobernanza de nuestras ciudades y gobiernos. Estamos sumando el expertise en consultoría en políticas públicas con el dinamismo y la innovación de startups enfocadas en acercar a gobiernos las nuevas tecnologías. De allí que OS City no sea simplemente una empresa de software, enfocada en ofrecer sus servicios en el sector público, sino que es una empresa que genera experiencias y valor agregado en el camino de la transformación digital. Somos un blend entre técnicos, desarrolladores, politólogos y economistas; la combinación entre expertos en gobierno y administración pública, especialistas en datos, inteligencia artificial y blockchain. Sabemos que los problemas actuales no se resuelven sólo con tecnología, pero que sin ella es imposible gestionar de manera eficiente y de cara al ciudadano.
Ser una startup en el mundo del #GovTech no es simple, ya que además de los obstáculos tradicionales del mundo de los emprendimientos, debemos sumarle los desafíos de trabajar con gobiernos de América Latina. Dentro de esos desafíos, tenemos en claro que existen dos problemas centrales para la madurez del ecosistema: por un lado, los procesos y obligaciones burocráticas que deben afrontar las empresas a la hora de trabajar con gobiernos (en especial, las empresas pequeñas sin departamentos exclusivos para ese fin); y por el otro, quizás el aspecto más importante: la complejidad y lentitud de los procesos de contratación y pago, lo que puede hacer naufragar cualquier emprendimiento sin una estructura financiera sólida (lo que comúnmente sucede en una startup). Debido a ello, consideramos que el acompañamiento de organismos internacionales o fundaciones es fundamental para que las startups tengan lugar en la innovación y la transformación digital de nuestros gobiernos. Unicef, Fundación Avina, Omidyar Network, ALTEC, el Banco Interamericano de Desarrollo, Singularity University o Google son sólo algunas de las organizaciones que nos han acompañado en este proceso.
Nuestro propósito
Al enfrentarse a 5 mil millones de personas que vivirán en ciudades en 2030, los gobiernos están sufriendo una crisis de agilidad institucional, utilizando tecnologías obsoletas que son insuficientes para enfrentar los desafíos ambientales, sociales y económicos de hoy. Esto se traduce en 5 trillones de ingresos que desaparecen cada año en gobiernos de todo el mundo, en que el 87% de los empleados gubernamentales estén insatisfechos con su trabajo, así como en la baja satisfacción y confianza de los ciudadanos con sus gobernantes. Es por ello que nuestro principal compromiso es con las generaciones más jóvenes, actuales y futuros ciudadanos que vivirán en el mundo que hoy consumimos. Nos hemos unido con el fin de crear soluciones para hacer ciudades más sustentables y gobiernos más innovadores y de mayor confianza; para forjar un mejor futuro. Nuestros planes son difíciles de trasladar a la típica “visión y misión”, ya que perseguimos un propósito social transformador: “promover el crecimiento de ciudades más sustentables y gobiernos más confiables usando tecnologías exponenciales”.
Nos situamos en la intersección entre los Objetivos del Milenio (Agenda 2030) y las tecnologías exponenciales:
A diferencia de otras soluciones gubernamentales aisladas, nuestro producto es un software modular que utiliza computación en la nube, inteligencia artificial y blockchain para transformar gobiernos en plataformas integradas de servicios digitales. Desarrollamos un conjunto modular de servicios que funcionan como “ building blocks” para satisfacer las necesidades más apremiantes del gobierno y luego permitimos que terceros, otras empresas o desarrolladores, brinden acceso continuo a nuevos y mejores servicios. Mientras los ciudadanos obtuvieron un acceso masivo a la tecnología a través de sus dispositivos móviles y app stores, las instituciones públicas se quedaron atrás, generando subdesarrollo, organizaciones frágiles y entornos fragmentados con baja productividad en la entrega de servicios. OS City reduce esta brecha, abriendo la innovación gubernamental por medio de una AppStore para gobiernos.
Hacia dónde vamos: Gobiernos como Plataforma (GaaP)
Uno de los principales obstáculos que vemos a la hora de avanzar en la transformación digital de nuestras ciudades, es la falta de interoperabilidad entre las distintas áreas de gobierno. Actualmente cada área avanza en la digitalización dependiendo de la voluntad política, el interés o el presupuesto disponible, lo que hace que algunas áreas estén más avanzadas que otras. Es natural que la velocidad del cambio digital sea heterogénea, pero esto se transforma en un gran problema si luego los sistemas que implementa cada área no pueden interactuar entre sí. De allí que veamos gobiernos fragmentados, que no comparten datos ni procesos, y que por esta razón los ciudadanos terminan repitiendo un mismo trámite cientos de veces o entregando la misma información una y otra vez.
Desde OS City, sostenemos que el camino para evitar esto radica en construir gobiernos como plataformas digitales de servicios. Por ello brindamos la posibilidad de contar con una plataforma interoperable de código abierto, que permita a los gobiernos construir los cimientos de su digitalización. Así como en nuestros celulares tenemos la posibilidad de contratar servicios de terceros pero a través de una plataforma común, cualquier desarrollador o empresa podrá desarrollar su propia solución para la digitalización de los gobiernos y anclarla a nuestra plataforma. De esta manera, buscamos evitar los típicos silos de datos de la administración pública. Para avanzar de manera homogénea en la digitalización de nuestros gobiernos, debemos hacer que entren en la era de las plataformas y ello será posible si manejan un sistema común y de código abierto.
No confundir plataforma de gobierno con “gobiernos como plataforma”. Lo que sucede comúnmente en la actualidad es que los gobiernos crean su propia plataforma donde alojan los servicios que el propio Estado ofrece. Esto es un gran avance en la digitalización, pero sigue siendo un camino de una sola vía. Al igual que en la economía industrial, es el gobierno el único que interviene en la digitalización de sus servicios (y, obviamente sus proveedores). Cuando hablamos de “gobierno como plataforma”, nos referimos a la construcción de una economía de red en base a los servicios públicos. Al contar con una plataforma de código abierto, en donde cualquier empresa o startup pueda ofrecer sus soluciones de manera interoperable, el Estado se transforma en un nexo entre la innovación tecnológica y el ciudadano, en un promotor del desarrollo tecnológico y la transferencia de innovación. El Estado como plataforma implica la apertura de la innovación pública y la colaboración entre el gobierno, las startups y la ciudadanía.
Tecnologías exponenciales
¿Cuál es la diferencia entre un invento y una innovación? Los inventos se quedan comúnmente solo en la oficina de patentes y no tienen una adopción masiva por parte de las personas. Las innovaciones logran cambiar conductas, procesos o formas de vivir en general. Las innovaciones resuelven problemas sociales, los inventos sólo resuelven la idea de su propio inventor. Toda gran invención tecnológica ha estado acompañada de transformaciones organizacionales, culturales, económicas o políticas. La revolución tecnológica de la actualidad no será distinta en este punto. Serán necesarios cambios en nuestras organizaciones públicas para poder aprovechar al máximo el impacto de las TIC. Es por ello que buscamos transformar las tecnologías de las cuarta revolución industrial en innovaciones públicas que tengan un impacto directo en el ciudadano. Consideramos que la Inteligencia Artificial, Blockchain, Internet de las Cosas o la Ciencia de Datos tienen un potencial enorme en la gobernanza de nuestros países y ciudades.
Al plantearnos como una empresa del mundo #GovTech queremos hacer presente nuestro compromiso con el cambio organizacional, no sólo con el tecnológico. Por ejemplo, la diferencia entre OS City y otras empresas del mundo crypto, es que no somos una empresa de blockchain que busca implementar proyectos en el sector público, sino que somos una empresa de #GovTech, con experiencia en gobierno digital, que utiliza blockchain para mejorar la innovación en el Estado. Parece una sutil diferencia, pero hablamos el idioma de la administración pública, conocemos sus obstáculos y sabemos sus limitaciones. Esa diferencia, también muestra que no somos fanáticos de ninguna tecnología en particular. Nos enfocamos en los problemas de la gobernanza pública y en base a ello, buscamos soluciones tecnológicas. Nuestro agnosticismo tecnológico nos lleva a primero pensar el problema y luego a buscar qué tecnología cuadra mejor. Suena simple, pero en realidad requiere haber experimentado con diversas tecnologías para encontrar el verdadero valor agregado. Tomemos nuevamente el caso de blockchain: hemos sido de los primeros en América Latina en aplicar esta tecnología en el gobierno. No en todos los casos hemos encontrado el valor de blockchain en la transparencia o eficiencia, pero esos casos nos han dado la experiencia para saber en dónde blockchain puede significar un cambio.
En definitiva, nos hemos embarcado en un viaje que apenas comienza, el de mejorar la calidad de vida de las ciudades mediante la utilización de tecnologías exponenciales. Sabemos que será un camino lleno de obstáculos, pero también sabemos de nuestra pasión por afrontarlos. Mejorar la confianza en nuestras democracias, no es sólo una tarea de nuestros gobiernos, sino también de todos aquellos que formamos parte del ecosistema #GovTech.
