Conoce el nuevo paradigma de la enfermedad
Grandes y trascendentes cambios ha tenido la ciencia regresando a su unión con la espiritualidad (de donde nunca tuvo que separarse), esto nos ha llevado a la gran verdad: Somos seres holísticos compuestos de cuerpo, alma y mente; componentes unidos como un Todo, lo que significa que si una de las partes enferma afecta al resto.
Nuevas ramas de la ciencia han surgido tales como la física cuántica, Neurociencia , Epigenética, Programación Neurolinguistica y otras; así mismo otras se han reforzado (Psicogenealogía,Trangeneracional,) permitiendo estudiar al ser humano desde una lente más amplia para llegar al conocimiento de que somos de la misma esencia de nuestro Creador, somos energía, y como tal transmitimos y nos transmiten información energética, la que afecta nuestro entorno y es trasferida de generación en generación.
Hoy se sabe que el bebé en su vida intrauterina no solo se alimenta de su madre, sino que al estar bajo un mismo campo magnético el bebé percibe y siente las emociones, sentimientos y pensamientos de la madre, asumiéndolos como suyo; por tal razón si la madre durante su embarazo permanece en estadios largos de tristeza, el bebé traerá esa huella activa y será una persona que pasará mayormente su vida en estado de tristeza. Si la madre vive sentimientos de abandono por parte de su pareja, el bebé lo vivirá como que es un estorbo o no digno de amor; así es como surgen las primeras creencias limitantes en el individuo, las que luego cuando adulto serán parte intrínseca de su personalidad. Dado este gran descubrimiento es que hoy se hace necesaria sanar la etapa intrauterina pues la mayoría ,por no decir la totalidad, de bebés nacen (y hemos nacido) afectados por estas creencias que se forman como heridas del alma que habrá que sanar.
El nuevo paradigma de la medicina define que la enfermedad es multifactorial, paradigma que centra sus fundamentos en la Nueva Medicina Germánica descubierta por el Dr. Hammer mediante su propia historia de vida; de esta nueva medicina se deriva la Biodescodificación o Bioneuroemoción que demuestra que detrás de toda enfermedad hay emociones reprimidas, vividas en soledad, que han impactado al cerebro y éste a un órgano vinculado con la emoción afectada. Aunado a este gran descubrimiento y las nuevas ciencias, se concreta que “la enfermedad” es un conflicto emocional interno no resuelto, el alma lo evidencia a través del cuerpo para que nos hagamos consciente de que hay emociones atrapadas que trabajar y sanar.
Cabe referir que no somos un simple cuerpo, tenemos 7 cuerpos en total, 4 inferiores ( físico, etérico , emocional, mental); y 3 cuerpos superiores entre ellos el cuerpo espiritual. Si el cuerpo mental (la mente) se enferma, descompone al resto, de ahí la gran importancia de cambiar la forma negativa de pensar y hablar; igualmente debemos trabajar las emociones ya que el reprimir o no gestionarlas adecuadamente lo que hacemos es bloquear la energía vital y eso nos conduce a lo que conocemos llamamos enfermedad.
“El mayor error que cometen los médicos es que intentan curar el cuerpo sin curar la mente; sin embargo, la mente y el cuerpo son uno y no han de ser tratados por separado”. Platón
Factores que influyen o generan “La enfermedad”:
1.- La heredad o transmisión generacional, pues todo evento o trauma no resuelto por nuestros antepasados ( duelos, abandonos, incesto, violencia, alcoholismo, adicciones, abuso sexual, secretos, patrones de conducta, etc.) queda grabado en el inconsciente familiar para luego transmitirlo a la nueva generación, a fin de que un nuevo miembro familiar encuentre la posible solución de lo no resuelto en generaciones anteriores. Hoy por hoy se sabe que detrás de enfermedades tales como la esquizofrenia, autismo, depresiones, diábetes, adicciones, existe un trasfondo generacional. El Dr. Salvador Sellam expresa que un 95% de lo que conocemos como enfermedades son psicosomáticas, que todo lo que callamos se convierte en síntoma. https://www.lavanguardia.com/lacontra/20130701/54377109081/todo-lo-que-callamos-se-convierte-en-un-sintoma.html
2.- Nuestros pensamientos y palabras son energía, tienen poder de construir o destruir según se usen; desde el útero y en la infancia nos hemos visto afectados por la programación recibida de nuestros progenitores, cuidadores, maestros, religiosos, etc., quienes nos influyeron su forma de pensamiento (negativo, mayormente) y son precisamente esas creencias –obsoletas a nuestra edad adulta — -las que nos encadenan a sentimientos de poca valía, de indefensión, de poca creatividad, de confusión, etc.; creencias tan fuertes y limitadoras como el concepto de la enfermedad misma, donde se nos ha hecho creer que es producto de agentes externos.
Síntomas o enfermedades leves (gripes, alergias, ) algunas proceden de creencias tales como: “No salgas que está lloviendo y te vas agripar”. “No andes descalzo que te dará gripe y calentura”. “Todo es que entre invierno y me da gripe”. “No comas eso que sos alérgico”. O peor aun, cuando escuchamos que anda el virus X, Virus Y y creemos que efectivamente se nos pasará, ese temor es un gran pensamiento negativo que al final se traducirá en que te enfermarás del famoso virus; ten muy presente el poder de tus palabras.
Ahora bien, al ser la enfermedad un conflicto interno entre alma, mente y cuerpo esto se traduce en un conflicto entre tu Yo falso (ego) y tu Yo verdadero ( tu esencia), por tanto si estás viviendo desde la aprobación de otros, cuidando y controlando a los demás , no te das abasto en atender las necesidades de otros descuidando las tuyas, viviendo constantemente en resistencia con el fluir de la vida, entonces estarás dando lugar a que la enfermedad se pronuncie en tu cuerpo avisándote que para amar y cuidar a otros, primero te debes amas y cuidar tú.
Enfermamos por:
— Vivir desde creencias limitantes/erradas y cargas emocionales heredadas
— Vivir desde el dolor y resentimiento (emociones reprimidas y/o atrapadas)
— Vivir para otros en lugar de vivir para ti (desvalorización)
— Vivir en el pasado y/o futuro, dejando de vivir tu presente
— Culpar a agentes externos de tu malestar en lugar de buscar en tu interior lo que roba tu bienestar.
La enfermedad en su origen latín significa: In firmuss, lo que equivale a : Sin firmeza. Por tanto, inicia por amarte y reconciliarte con ti mismo y con los demás; de esta forma empezarás a “enfermarte menos” y podrás experimentar bienestar y plenitud en tu vida.