Lo mejor de Medium
Oompa Loompas, algoritmos y quién sabe qué más
Estoy enamorado de Medium. No es una relación enfermiza, y sin embargo, estoy al borde de la obsesión. A quién no le gusta el diseño — especialmente si has creado 15 blogs distintos en 277 plataformas diferentes — . Sí, esos números son correctos.
Pero esta no es la cuestión.
Hoy me he dado cuenta de que los mejores artículos de Medium no están en su top 20. Algunos sí, pero la mayoría no. Y esto es, a la vez, muy bueno y muy frustrante.
Me gusta que los contenidos con fundamento me sean servidos en bandeja de plata. Y mucho mejor si no tengo que masticarlos, solo tragarlos. Estoy divagando.
Esta paradoja me ha hecho pensar. El Doctor Ev debe estar tramando algo. Creo que su equipo de Oompa Loompas trabaja día y noche para darle la vuelta a toda la perversión que hay en internet.
Espera… ¡¿Qué?!
No. No trabaja eliminando fotos de animales raros o incluso porno fetichista. Lo que está haciendo está relacionado con publicar (o algo así), redes (sobre todo) y un futuro mejor (fundamentalmente, ¡también!). Y seguro que tiene que ver con algoritmos, pero no de la forma que todos pensamos.
¿Y si los algoritmos de Medium estuvieran diseñados para dejar a la mayor parte de los mejores artículos fuera del Top 20?
Es una pregunta peligrosa. Porque sugiere que alguien ha elaborado adrede un curioso algoritmo para mantener lo mejor alejado de este top. Es un juego al que solo los macarras totales como Ev (no le conozco, pero puedo imaginar que seguramente sea un macarra) jugarían.
En un mundo donde proliferan tantos sitios con enlaces trampa, webs de listas y toda esa mierda — te conviertes en rey por ser un acólito de Nassim Nicholas Taleb — . Esto funciona así: acumulas un montón de efectivo, juntas a algunas personas muy listas en una habitación durante 3 o 4 años para que creen una plataforma muy resbaladiza pero que esté muy bien diseñada, limitas su contacto con el mundo exterior, les das a los creativos solo un poquito menos de lo que realmente desean. Y te sientas a esperar.
El resultado
Si remueves todos estos ingredientes en una olla, obtendrás una explosión que encenderá el fuego de una nueva era de comprensión.
¿Qué coño significa esto? No estoy seguro, pero suena genial.
En serio, es algo grande. Recuerda a la época en que una determinada empresa hacía las cosas de un modo tan distinto que su tribu no te dejaba decir nada sobre ellos. Esa empresa declinó seguir desarrollándose del modo convencional. En su lugar, decidieron utilizar el combustible de la tribu para hacer algo importante.
A estas alturas ya habrás adivinado que la empresa de la que hablo es Apple. Pero esta analogía parece cobrar mucho sentido, dado el cariz de la marcha y la experiencia de Ev y sus locos especialistas Oompa Loompas.
Imagina lo que pasa cuando no dices dónde vas. Aparece un vacío. Y todos odiamos el vacío, así que lo empezamos a llenar. Llenamos los vacíos.
Esto funciona como un buen imitador de Elvis. Es tan bueno que casi te olvidas de que no estás viendo al rey. ¿Cómo es eso? Ellos hacen lo justo, dejándote rellenar los espacios en blanco, créeme.
De todas formas, si solo sigues haciendo buena mierda — con las limitaciones que sean — se establece una situación en la que la gente anhela la siguiente iteración o incluso la que tienen, porque creen que es la mejor — porque no hay nada que pueda superar a la imaginación.
Esta es la primera parte de un plan maestro. Sé muy particular, pero sólo accesible hasta cierto punto, lo justo para evocar respuestas emocionales en la gente. Crea arte.
Se ha hablado mucho acerca de lo que es o no es Medium. No soy lo suficientemente inteligente como para saber qué es o qué será — pero creo que esto nos mantiene distraídos de lo que en realidad está pasando — . Así, el Doctor Ev y sus Oompa Loompas pueden seguir ocupándose de crear el mundo mágico del mañana.
Eh, ¿¡a quién no le gustan las metáforas hiperbólicas!?
La segunda parte del plan maestro es un poco más sutil y su éxito depende por completo de no revelar lo que hay detrás de la puerta en esa oficina extraña que está en el pasillo en el que todo se reduce a la mitad. No porque sea un secreto comercial que la competencia se puede llevar, sino porque revelando su propia existencia, podría condenarlo al fracaso. Dudo que mi artículo (apenas leído) proponiendo esta existencia sea lo mismo que el Doctor la admitiera — así que no estoy preocupado por echar nada a perder.
¿Qué es?
Una red de escritores y lectores que se encuentran entre sí a la antigua usanza.
¡No, no en un Starbucks! Se encuentran entre sí preocupándose lo suficiente por buscar intereses comunes entre ellos (nosotros). Se encuentran y se conectan con la fricción justa para que el compromiso que surja sea escalable.
¿Alguna vez te has dado cuenta lo tonto que te has vuelto? De acuerdo, quizá tú no, pero yo sí. Me siento muy estúpido porque he dejado que los algoritmos me digan lo que tengo que leer. Así que cuando me dan una barra de búsqueda en blanco, ni siquiera se me ocurre qué puedo escribir en ese espacio.
Esto me asusta.
Y otra cosa, ¿cómo es que sólo tenemos unas pocas lecturas por artículo si nuestras listas de suscriptores son de 4 dígitos? Es extraño. No estoy insinuando que mis artículos merezcan atención inmediata por parte de todos, pero ¡debería tener una tasa de éxito mayor con mis suscriptores que el spam a través del Pony Express!
A no ser que estés trabajando para el Doctor, éste quiere que te afanes, sudes e improvises para conseguir que tu voz sea escuchada. Si solo puedes amplificar tu voz con la tecnología equivalente a un megáfono, utilizando algún widget inteligente o algún proceso, eso no hace tu voz más importante ni mejor — solo más fuerte. Y esto hace que la red apeste.
Así que el Doctor está haciendo que te ganes tu red.
Sí. Todavía te cabreas cuando ves artículos flojos en el Top 20 (eh, ¡que me permito ser juzgón!) o incluso ves que artículos de tu feed reciben cientos de lecturas y piensas: WTF?! Y sin embargo, continúas, porque sabes que esto requiere trabajo y sabes que no eres tan bueno (todavía).
¿Te das cuenta de lo que pasa?
Trabajo más duro. Mejoro. Y buceo profundo en el sistema para encontrar lecturas que no estén en el Top 20. Lo que me lleva a la construcción de una red de calidad, de escritores y lectores especializados.
Igual que en la película,
Nuestra red siempre ha estado aquí.
Resulta que el Doctor ha construido una plataforma para ayudarnos a encontrar lo mejor de nosotros mismos en nuestros caminos.
¡Ah! Y por cierto, aunque todo esto es sólo una idea loca en mitad del océano, estos principios siguen siendo aplicables a la forma en la que todos hacemos nuestro arte.
Vamos, impresióname.
[PD. No tengo ni idea de por qué estoy llamando a Ev el Doctor, pero todo encaja.]
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