Un dato y un reto
A tiempo de presentar la flamante Ley 366 del libro y la lectura “Oscar Alfaro”, el Ministro de Culturas mencionó el dato: En un país con 332 municipios, solo existen 166 bibliotecas municipales, la mitad de ellas en el departamento de La Paz. (Audio del Discurso de Pablo Groux)
La Ley busca revertir esta situación incorporando la obligación de que las alcaldías del país construyan bibliotecas. El pedido del Ministro es simple: “no pedimos grandes edificios, sino un espacio” para que los niños, los estudiantes, las familias tengan los libros y puedan reunirse a leer.
El reto fue expuesto por el Presidente, cuando pidió a todos los presentes que logremos enamorar de la lectura a todos los bolivianos. En un acto de franqueza reconoció que su principal problema es que no le gusta leer. Desafortunadamente, este medio, y varios blogs, se dieron un festín con esta frase (que bien puede ser pronunciada por el 90% de los bolivianos), en vez de destacar la importancia de que un Presidente que reconoce su poco hábito de lectura, es quien promulga una Ley que –es la esperanza de todos- promueva la mejora de los índices de lectura en nuestro país. (Audio del Discurso de Evo Morales)
La Ley del Libro es un instrumento jurídico largamente esperado principalmente por el sector del libro. Pero sería injusto reducir la Ley a sus artículos de exenciones impositivas, cuando en realidad establece las bases para aplicar políticas públicas, más allá del IVA, que permitirán mejorar los índices de lectura.
Políticas como el incremento del número de bibliotecas públicas, que implícitamente reconoce que no podemos pretender que la compra de libros sea la única forma de acceder a ellos. O como la conformación del Comité Plurinacional que busca reunir a todos los que trabajan a favor de la promoción de la lectura para establecer un marco normativo que facilite las labores de todos quienes actualmente trabajan llevando la magia y fantasía de la lectura a ciudades y poblaciones del país.
Publicado originalmente en murmullo.org el 10 de abril de 2013, este artículo fue escrito para el suplemento Brújula de El Deber del sábado 4 de mayo.
