La hipótesis

¿Cuanto dura el tiempo que transcurre desde el comienzo de la acción hasta la replica esperada? Si bien entendemos el hecho de que las cosas se hacen des-interesadamente, y que no se debe estar al asecho constantemente mendigando una simple respuesta, nos involucramos hasta la espina, hasta que la margarita no tenga mas pétalos por arrancar, hasta que nos quedemos dormidos de tantas veces que dimos la vuelta al reloj de arena, y creo que por sobre todas las repercusiones que el hecho principal conlleva, sufrimos. Este dolor, huérfano de patología evidente al ojo, al medico o a cualquier especialista, nos deja desprotegidos, cual ave en la tormenta fuera de su refugio, y dando lugar al monstruo mas abominable de todos, la especulación.

Cuando los recursos de descifrar la actitud ajena, esa que esperamos con ansia, se limitan al pensamiento de abandono, o de des-interés, la libertad desaparece e invade la paranoia. El resto de las acciones que pasen posterior al abandono, no tienen nada que ver con el hecho principal, solo el rencor, la duda y la hipótesis gobiernan. El resto, nada existe.