Notas sobre Animal Crossing: New Horizons
No hace falta decir que esto es mucho menos que mi crítica definitiva a Animal Crossing. También pasa que no he avanzado tanto como me gustaría en el juego como para estar satisfecho con mi experiencia, no he probado el multi jugador aún, que es lo que más me atrae del juego ahora. Tal vez entonces me proponga escribir tal crítica, hasta entonces solo diré lo siguiente.
AC a veces me sienta como una mentira. Eso de que te invita a vivir en una isla desierta y empezar de cero, no sé si verdaderamente te aventuras a habitarla, ¿En donde está el verdaderamente “habitarla”? Todas las islas son más o menos iguales: árboles significan madera y cerezas, rocas significan piedra y minerales, quizá el río es la única cosa que me impone un alto, y me sabe más a un truco para fomentar esa idea de “progreso” que ya conocemos muy bien dentro mío. Trabaja mucho y un día cruzarás el río. Vamos, que la isla misma en su concepción solo se ve a sí misma como un conjunto de recursos por y para el progreso.
A ver, por poner otro ejemplo, yo creo que Minecraft se salva de caer en el mismo pozo porque aunque todo es posible recurso, también existe físicamente en tu mundo, y puede ser transformado en otras cosas que, o podrán ayudarte a seguir transformando la naturaleza o a edificar cosas en el mundo, pero ver las cosas como recursos en minecraft es una de las múltiples posibilidades con las cuales ver al mundo, en AC me da la impresión que el mundo solo se revela desde un punto de vista. Aunque en Minecraft esta suele ser la visión predominante -y para mi hay una critica posible muy válida en este aspecto- lo cierto es que no les niega la posibilidad de ser ““algo más””. Existe la posibilidad de explorar los objetos, su materialidad, en diferentes formas: eso es lo que es verdaderamente habitar un mundo. La unidad árbol puede ser talada para extraer recursos, pero también puede ser usada como mirador, puede volverse tu casa, o puede ser un “landmark”, en AC todos los árboles y piedras se revelan ante mi siempre igual: son máquinas expendedoras.
En AC por la manera en que el mundo esta construido me es difícil ver la isla de otra forma que no sea literalmente un terreno llano en el cual extraer recursos. Luego construyo el palito ese para pasar al otro lado y extraer más y más, se dice que eso depende de nuestro acercamiento, y así es, pero me pregunto yo si la isla misma justamente niega tener y expresar otro tipo de juego.
Ahora, sé que AC se interesa más en construir una nueva comunidad que literalmente lanzarte a un nuevo nuevo mundo, pero justamente, en cuanto a los vecinos, que es cierto que es con lo que más me he encariñado, admito que también me cuesta ver mucho de eso de “vivir con ellos”. Sí, te tocan al azar y tal, pero no suponen ningún obstáculo en tu día a día, son más como decoraciones para que veas a lo lejos y digas “eh, ahí va Lou el Gorila, con su caña de pescar”. ¿Que si me gusta el dichoso gorila? no, la verdad no, pero tampoco es como que él haga algo más que caminar todo el día en círculos, la sensación es más como cuando no te toco el juguete que querías en la cajita feliz. En la vida real no solo basta con aceptar a los demás, tienes que moldearte -para bien o para mal- a ellos, o resistir el ser moldeado, y al mismo tiempo tu ejerces la misma presión a tus seres queridos. Tampoco creo que Animal Crossing tenga que ser una fiel simulación de la vida o de vivir en una isla, más bien me da la sensación de ser una triste fantasía: te venden el sueño de una vida fuera de la vida moderna, ¿pero qué haces al llegar? extraer recursos en todo lo que hay, hasta saludar a los vecinos trae recompensas (millas, creo), visitar la isla es explotarla, porque fue diseñada para eso, formar una comunidad se resume en hacerle los recados a todos. Me siento más turista que explorador, osea pretender vivir diferentemente -fuera de la modernidad, en este caso- pero no darse cuenta que sigues acurrucado por los mismos sistemas de siempre.
Para tener un juego que explora mejor formas de relacionarse y vivir en comunidad fuera de la modernidad -con ángulo vitalista- prefiero muchísimo mas a un juego como Mutazione, que verdaderamente se aventura a explorar las crudezas de nuestra tradición occidental, cómo bajo una máscara de mártir escondemos nuestro solipsismo más bajo, y junta esto con sueños de formas alternativas de comprender la vida y la naturaleza. Escapamos, sí, pero para volver con una carga de futuro que empuja los fundamentos inestables y decadentes de nuestras tradiciones, que se ven reflejadas en nuestros comportamientos de todos los días, esos eventos tan ideológicos que se esconden bajo mantos falsos de naturaleza, es escapismo revolucionario.
Cuanto más veo de AC, solo parece interesado en ofrecer un espacio que resulta ser una extension más de lo que ya es la vida ahora, el escapismo burgués por antonomasia.
