Salida de campo a Támesis
Pensamiento V — Pregrado en Comunicaciones
Facultad de Comunicaciones y Filología — Universidad de Antioquia
El día viernes 2 de febrero de 2024 a las 7:00 am, los y las estudiantes del curso Pensamiento V, acompañados por sus docentes, comenzamos el viaje hacia el municipio de Támesis, recorrido que tuvo una duración aproximada de 4 horas.
Alrededor de las 11:30 am llegamos al hogar juvenil, lugar de hospedaje por la siguiente noche. Luego de descargar los morrales, nos preparamos para dirigirnos a la finca regenerativa Café pastoreo y aves, allí don Pedro, su hijo Danilo, Astrid y Mónica recibieron cálidamente a todo el grupo. La comida siempre estuvo presente como motivo de encuentro: guandolo, café, agua; seguido por la frijolada que fue el almuerzo, caña, quesito hecho en la finca acompañado de panela y para finalizar, un té con hojas de coca.
Mientras subíamos hacia la Finca El Alcázar,Otra Banda, José Vélez, y algunos otros nombres con los cuales se puede ubicar el territorio en Támesis, Danilo nos contaba un poco sobre la historia de la misma y también del municipio. Nos decía que Támesis tiene aproximadamente 37 veredas y dos corregimientos. En la finca nos recibió la familia de Danilo y los cuatro perros que siempre los acompañan: Morcilla, Moringa, Clara y Metralleta. La importancia de este espacio es tal que la finca sale en el himno de Támesis: “Bello Alcázar que, al beso del Oriente, y en fruiciones de fe y de virtud, en promesas de vida se enciende cuando baña su frente la luz”. Es tanto así que Danilo mencionó a una historiadora que decía que Rafaela Gómez manejaba todo desde lo alto de esa finca. Antes era la finca de los Cadavid, hasta que el abuelo de Danilo decidió comprarla y convertirla en su nuevo terreno familiar.
“La naturaleza es el mejor maestro para el conocimiento y el buen vivir” — Don Pedro.
El café lo producen directamente en la finca y se basan completamente en la agricultura regenerativa, es decir, aprender de la naturaleza. Anteriormente los campesinos producían para comer y lo que sobrara lo vendían, ahora es el caso contrario, aunque ellos aspiran a retomar ese estilo de vida. En su casa se puede encontrar de todo: pollitos que sacan de sus jaulas para que absorban la energía del sol, agricultura de balcón (en donde cosechan cebolla, cilantro, té verde, tomate, todo completamente orgánico). Prefieren subir sus cultivos fuera del alcance de las gallinas para que estas no acaben con los mismos. También tienen producción de pollos, cerdos y marranos. En la finca de Don Pedro no se utilizan pesticidas, puesto que ellos matan los animales pequeños que matan y regeneran el suelo. De nuestras partes favoritas fue el sistema de bosque comestible: las plantas de auyama que protegen el suelo de los rayos del sol -y con la que se puede hacer una sopa deliciosa-, la diversidad en la naturaleza como el palo de café, quiebrabarriga.
Aprendimos a utilizar el machete y todos quedamos con ganas de cortar nuestra propia caña de azúcar para seguir comiéndola hasta el amanecer. El machete es lo primero que usa el campesino luego de echarse la bendición. El machete es ambidiestro, para un diestro se amarra en el lado izquierdo. El machete se agarra cruzado. Para cortar la caña simplemente se agarra y se corta bajito, luego se despeluca o se empelota, y por último se muerde y succiona para sacarle todo el dulzor. Recomendación: La mejor caña para cortar es la jecha, es decir, la madura, y la mejor parte para chupar es tres tacos debajo del suelo.
El proyecto bandera de la finca se llama Café pastoreo, en donde se busca que el café sea asociado con el pasto. No utilizan herbicidas ni sistemas tradicionales de control, dejan que las vacas se encarguen de todo; ellas limpian las partes que no le sirven al café pero que a las vacas sí. Se produce leche, queso, y en cosecha se saca el café. Las vacas limpian el café, se ahorran la mano de obra y lo que no se consume Don Pedro y su familia lo manejan manualmente. De este estilo no hay literatura, solo una familia que lleva 10 años implementándolo.
Por último, Danilo nos contó un poco más sobre su proyecto, por el cual cerró una parte del terreno fuera del alcance de las vacas, en donde sembró pastos, especies y también maíz para ofrecérselo a las aves. Las aves vienen y van, toman uno, toman dos o toman tres porciones, pero siempre comparten y siempre dejan, y también siempre se aseguran de volver.
Casa solar
Casa solar
la casa de todos
la casa del arte.
La casa del caminante y la montaña.
La casa de los colores y del tejido.
La casa del cantor y del poeta.
La casa de la luz
de la luz del Taita Inti
A las 7:00 pm nos encontramos en Casa Solar, en el casco urbano de Támesis. Allí Luis Carlos, co fundador del proyecto, nos explicó que la casa nació por la necesidad de contar con un espacio de resguardo para las artes en el municipio. Pudimos conocer que la casa abrió sus puertas a finales de 2023 y que sus espacios están destinados a: venta de productos de artesanos locales, espacio disponible para integrantes de Visión Suroeste, recursos y materiales disponibles para artistas tamesinos, una biblioteca, así como una ludoteca. Igualmente, conocimos el centro de operaciones de Montaña Travel, una empresa dedicada a la guianza en entornos naturales de Támesis con los ejes fundamentales de agua, montaña y patrimonio. Todo lo anterior sirvió para conocer una iniciativa cuya misión es enfocarse en el cuidado del territorio, las artes y la vida.
Río
El día sábado, nos movilizamos a la vereda de Río Frío a las 9:00 a.m, la cual está ubicada a una distancia de 7km aproximadamente. Una vez allí, visitamos “Río Frío” un espacio lleno de aire fresco y aguas cristalinas, el cual se encuentra en resistencia de las industrias mineras que amenazan la zona en búsqueda de minerales. La estadía en el río fue relevante en la medida que este nos permitió estar en sincronía con la naturaleza; olfateando, viendo y sintiendo la riqueza que habita en ella, y cómo debemos cuidarla y valorarla.
Una de las conclusiones a las que pudimos llegar como grupo es que la idea del buen vivir puede dejar de parecer tan utópica al acercarnos a nuevas y diferentes formas de vida, convirtiéndose en una realidad que más que deseable es necesaria. Igualmente, la apuesta por formas de vida que nos garanticen el equilibrio con la naturaleza empieza por soñar con una sociedad que reconozca la importancia del campo, la tierra, el agua y las comunidades como eje central de la vida y que no priorice ecapital por sobre estas cosas.
Trueque
El grupo organizador de esta salida de campo realizó y entregó varios productos audiovisuales a la comunidad que nos recibió. Estos videos y fotografías se pueden ver en los siguientes enlaces: