Rock y fans desde Almost Famous
Sobre ‘¿Qué es ser un Rockstar?’ [Evergreen, siempre evergreen: octavo artículo]
¡Exactamente! Este fue el primero de dos post que escribí sobre: ‘¿Qué es ser un rockstar?’ Viendo un poco mi blog antiguo me he dado cuenta que hay cosas que siempre me han gustado. No solo ha sido un asunto de pasión musical, también me he sentido encantada por la parte visual y estética de la música. Es por eso que quise escribir sobre este tema, porque la visión de lo que es ser un rockstar ha permeado casi todos los aspectos de la cultura popular.
Este artículo que escribí hace un tiempo y que rescato para mi sección de evergreen, es un pequeño homenaje a una película, que desde mi humilde punto de vista es la que más representa el espíritu, sentido y actitud rockstar. Hay muchas películas sobre el tema que todos conocemos, como The Doors de Oliver Stone, y hasta llegaron a sacar una llamada Rock Star con Mark Wahlberg -que siempre quise ver, pero no llegó a Colombia-, pero solo hay una ganadora: Almost Famous (Casi Famosos), del director Cameron Crowe, en el 2000.
Almost Famous es una película que para quienes amamos la música es fundamental, porque es una de las pocas que refleja muchos de los sentimientos y emociones que muchas canciones nos generan. También nos lleva a una emoción que solo podemos capturar en los conciertos, en esos momentos mágicos en los que estamos frente al artista. Todos quisiéramos vivir esa vida, todos quisiéramos ir de gira. Al menos por dos horas, la película nos lleva de la mano en la carretera.
¿De qué trata Almost Famous?
Almost Famous, como la mayoría de películas de Crowe, es autobiográfica. Esta es la historia de un adolescente, William Miller (Patrick Fugit), quien crece con las represiones cristianas de su madre Elaine (uno de los mejores papeles de Francis McDormand), pero él encuentra en la música su mejor aliada. Gracias a los discos de vinilo de su hermana y su pasión por la música, encuentra una forma de desahogo al escribir artículos comentando sobre sus bandas favoritas, entre ellas Stillwater.
Esto lo lleva a que Rolling Stone lo llame para que acompañe a la banda en la gira y haga una crónica. Lo que la revista, ni la banda saben, es que el joven William cuenta apenas con… ¡15 años! Aún con el consejo de ‘no hacerse amigo de la banda’, que le dio el crítico Lester Bangs (Philip Seymour Hoffman) termina envuelto en una serie de situaciones con el líder, Russell (Billy Crudup) y enamorado de la Band Aid (ahora explico el término) favorita de todos los rockstars: Penny Lane (Kate Hudson).
Parece complicado pero solo es divertido
El marco de la historia de la película es la generación de Rockers y Rockstars de los 60’s. Russell es la representación del típico Rockstar de la época: Hendrix, Janis, Jim y todos los demás que para Crowe, marcaron su adolescencia. En realidad fueron ellos quienes construyeron ese sentido de rock n’ roll en el cual no era solo una vestimenta o una imagen que dar, era un estilo de vida en el que ellos creían, en un momento en el que realmente se creía que el rock podía cambiar el mundo. En el que cambió el mundo.
Una de las mejores escenas de Russell es cuando está parrandeando en un pequeño pueblo se sube al techo de la casa y grita: ‘I’m a golden god!!!!’ (¡Soy un dios de oro!) y después se lanza a la piscina. Aunque siguiendo la escena se sabe que todo viene de un efecto de las drogas y el alcohol consumido… ¿Qué más rockstar que eso?
Aunque existen más escenas que tienen este sentido del efecto de las drogas y el alcohol, por ejemplo en The Doors cuando Jim Morrison está en un escenario y de todos los efectos alucinógenos no puede cantar. Esa escena es triste y afecta al espectador. En esta escena en Almost Famous, casi que hay una histeria colectiva en la que todos se suman llenos de emoción. Eso hace parte del verdadero sentido del rockstar.
Las eternas, las mejores, las fans
Pero en realidad con quienes me identifiqué es con las band aids, en especial con Penny Lane. Algo interesante que plantea la película es aquella mala fama que tiene la palabra ‘fan’ y cómo las band aids son algo más. Hablan que las fans solo quieren acostarse con los miembros del grupo, mientras que las band aids los siguen porque admiran y aman la música.
La película plantea que si eres cool, eres una de dos: o eres rockstar o eres band aid. Pero al ver a Penny Lane en la película se sabe algo:
No hay rockstar sin band aid, no hay band aid sin rockstar.
La identidad de ambos se construye un poco en los otros. Algo increíble es la ropa que usa Penny Lane, es una forma también en la que ella está ligada con la banda. Pero también está esa camaradería entre el grupo de band aids. No es difícil para quienes amamos la música identificarnos con un personaje como Penny Lane.
El efecto de ser band aid y de, en algún punto, ser crítico
Pero ser band aid no es cuestión de ser mujer, como ser ‘fan’ es simplemente una cuestión de pasión que se siente y que no se puede controlar. Personajes muy reconocidos que después se volvieron grandes en la industria, como Mark Romanek, o David LaChapelle empezaron como fans, casi band aids, alabando a grupos y ese amor los llevó a estar cerca de esos artistas y tuvieron las exclusivas, la oportunidad de tomarles fotos y hacer videos.
El recorrido de William, nuestro héroe en la historia, va más allá de ser un band aid. Al final, él fue el único capaz de llegar al corazón de Penny, de entender a Russell, de aceptar las palabras de Lester y de volver a casa asumiendo que si bien amaba la música, su vida tenía otro destino. Eso nos ha pasado a muchos, quienes terminamos volviendo nuestras pasiones parte de nuestro trabajo y al final, de una vida que queremos vivir todo el tiempo.
La vida necesita rockstars. Pero también necesita band aids que puedan mostrar el amor por los artistas, las obras y esa pieza de canción que lo hace sentir a uno en el cielo.
