La consolidación de Aziz
La segunda temporada de “Master of None” viene a consolidar a Aziz Ansari como un autor mucho más serio de lo que parece (y no es chiste).
Dev es un actor de treinta años que vive en Nueva York y cuya vida se divide entre relaciones fallidas, la búsqueda constante de trabajo en un medio marcado por la inestabilidad laboral y la relación con sus padres, una adorable pareja de inmigrantes indios que viven en la constante lucha entre la preservación de sus tradiciones ancestrales y la adaptación a un mundo que los pone a prueba día a día.
Definida de esta forma, “Master of None” está lejos de ser una serie que arrastre masas al televisor, sin embargo, para quienes vieron ya la primera temporada, el estreno de la segunda se transformó en una prioridad en las redes sociales. Lo anterior es especialmente llamativo, considerando que dentro de la plataforma la serie “pelea” con 7 estrenos este mes, en lo que muchos han considerado una frenética carrera por ‘meter’ en la competencia de los premios Emmy el mayor número posible de producciones originales posibles, antes que el plazo para ésta cierre (el 31 de Mayo).
De cierta forma, quizás por los personajes que retrata, “Master of None” apunta en dirección similar a LOVE, otra serie de Netflix (producida por el director Judd Apatow). Sin embargo, los logros de la serie de Azis Ansari y Alan Yang, tienen que ver con cómo construyen capítulos que se sostienen en sí mismos tanto a nivel dramático (de trama) como a nivel de estilo. Así, en la primera temporada nos encontramos con un capítulo como “Plan B” que plantea un estilo narrativo en su puesta en escena y luego con “Mornings” que plantea otro totalmente diferente, como si se tratara de otra serie. Lo mismo sucede en la segunda temporada: el primer capítulo “The Thief” es un claro homenaje a ‘El ladrón de bicicletas’ de Vittorio de Sica, mientras que el cuarto capítulo, “First Dates”, es totalmente diferente (y refrescantemente innovador).
Otro gran elemento de la serie es su diversidad etnográfica, lo cual está directamente relacionado con el origen de sus creadores: Ansari es de familia india y su socio creativo, Alan Yang, de origen asiático. Así las cosas, “Master of None” está llena de personajes de ascendencia afroamericana, india y asiática, en roles poco comunes, que escapan totalmente del estereotipo al cual los mismos medios nos tienen acostumbrados. Dicho de otra forma: es poco común ver un personaje de origen indio que no maneje un taxi, no sea dueño de un almacén o que, por incluso, no tenga acento como Apu de los Simpsons.
“Master of None” es una comedia única, improbable, que -por lo mismo- sólo podría tener cabida en una plataforma de streaming que cuente con información de su audiencia que avale el potencial comercial de Ansari. Este actor de la desaparecida “Parks and Recreation”, autor literario (‘Modern Love’) y, por sobre todo, humorista stand-up, ha demostrado estar a la altura del adjetivo de ‘Woody Allen indio’ que algunos le han dado. No sólo por su sentido del humor y sus temáticas, sino principalmente por su innovadora búsqueda formal, que lo pone en la escalera que lleva al lugar de los grandes autores.
