S.C. Hidalgo | Madre en 1997 de bebé prematuro

“Los médicos no empezaron a ser conscientes de que mi hija salía adelante hasta los dos meses de vida”

La madre de una niña prematura cuenta su historia veinte años después para que no se olvide la labor de la Sanidad pública

Abril Gómez Casares
proBeta

--

La Sanidad y la Medicina ha avanzado mucho pese a los recortes que ahora sufre por parte del Gobierno. Entre 1996 y 2013 la tasa de bebés prematuros aumentó en un 36% y el 90% de los prematuros nacido en la semana 29 sobreviven, gracias al desarrollo de los cuidados intensivos neonatales y a los avances tecnológicos en la Sanidad pública española. Para poder llegar hasta las mejoras de hoy en día, tuvieron que existir hace varias décadas partos prematuros que salieron bien. Este es el caso de una familia castellonense que en 1997 tuvo un bebé a las 22 semanas de gestación. Por aquel entonces fue un milagro que finalmente el bebé sobreviviera sin ninguna secuela.

La madre decide contar su historia para que no se olvide la labor del área de prematuros | Abril Gómez

Veinte años después del nacimiento, la familia decide hablar sobre el caso de su hija. Fue uno de los primero partos de prematuros en condiciones tan especiales que se llevaba a cabo en el Hospital General de Castellón.

El caso de este bebé sigue estando presente en el Hospital General, cualquiera recuerda ese milagro que se produjo en mayo de 1997. La madre es consciente de la gravedad de la situación en aquella época. Tal era la circunstancia que los médicos no le daban ninguna esperanza de vida, sólo le daban como mucho unas pocas horas de vida al bebé.

Mayo de 1997 a las 10:15h esa fue la hora del parto prematuro en el Hospital General de Castellón. “Nació a las 26 semanas, pero llevaba ya entre dos y tres semanas que no crecía. Por tanto, nació con 22–23 semanas reales. Al nacer pesaba 513 gramos, pero como siempre pierden un poco, se quedó con 480 gramos.” Para esta madre le es imposible olvidar ningún detalle del parto prematuro planificado. Ya que mientras estaba embaraza, le detectaron una insuficiencia renal que fue la causa del parto prematuro.

Tres meses, ese fue el tiempo que tardó la niña en poder recibir el alta e irse a casa con sus padres. “Nació un 26 de mayo y salió un 3 de septiembre. Cuando la sacamos del hospital pesaba solamente 2 kilos 100, le costaba ganar peso. No fueron muchos meses, igual tendría que haber estado un mes más ingresada. Pero era tal el riesgo de que cogiera una infección que era más beneficioso llevársela a casa que dejarla en el hospital.”

Hoy en día, la Sanidad pública ha avanzado mucho en cuanto a recursos, pero hace dos décadas no existían esos progresos. A día de hoy, algunos sectores de la población infravalora el poder de los centros públicos. Aunque este no es el caso de esta familia. “Por suerte el nacimiento de mi hija se produjo en un centro público, en uno privado hubiera sido inviable que sobreviviera. Es más, hubiésemos tenido que trasladarla del centro privado al público y se hubiera muerto en el trayecto”.

El Hospital General Universitario de Castellón cumple 50 años desde su apertura y siempre ha sido un centro pionero en nuevas técnicas y comodidades. Esta familia fue una de las muchas que se ha beneficiado de los avances de este centro. Como cuenta la madre fueron unos de los primeros en probar la sala de neonatos de grandes prematuros y recuerda que.para aquella época la sala estaba muy bien equipada.

Además, alaba el trabajo de los profesionales del centro y su predisposición; “los médicos eran muy jóvenes y si tenían que pedir consejo a Estados Unidos o a otro hospital, pues lo pedían. Es más pidieron diversos tipos de oxígeno, pañales y un montón de cosas, porque eran bebés muy pequeños. No les servía nada.”

Los bebés prematuros sufren un alto riesgo de padecer secuelas, si es que logran sobrevivir, pero por suerte, este no es el caso de esta niña. Secuelas que pueden venir producidas por el abuso del oxígeno. Aunque no todo fue bien en el desarrollo de este bebé, la madre cuenta que cuando llevaba apenas un mes y medio sufrió una septicemia.

Dos décadas después las áreas para prematuros han incluido en su forma de trabajar diversas técnicas para el mejor desarrollo de los bebés. Como peluches en forma de pulpos pequeños que se hicieron viral, ya que sus patas recordaban al cordón umbilical y los niños no los soltaba. Otro tratamiento es el llamado piel con piel, pero del que esta familia no disfrutó: “nosotros como mucho podíamos acariciarla con los dedos a través de la ventana.”

Parece mentira que con solo unos meses de vida los prematuros puedan sentir tanto. La madre recuerda ese momento que su bebé la reconocía con unos simple gestos: “la niña era consciente de que éramos nosotros cuando la tocábamos u oía nuestras voces. Estaba feliz.”. Era un gesto que solo ocurría con ellos. Por el contrario, cuando le tocaba la enfermera, la niña se ponía a llorar como una “loca”.

Cada año nacen en el mundo 15 millones de bebés prematuros en el mundo. En España la tasa de bebés prematuros es del 6'41% lo que supone 1 de cada 13 nacimientos. Y solo en la Comunidad Valenciana nacen 3.370 bebés prematuros.

--

--

Abril Gómez Casares
proBeta
Writer for

20. Construyendo mis sueños en la UMH. Redactora en Time Just. Solo quien comparte mi pasión entiende mi locura. Ante la duda búscame en los circuitos.