Migración a toda costa
Santa Pola promociona la participación ciudadana de los inmigrantes a través de un proyecto de integración europea
Se ha desmembrado Pangea, aquel primer continente que unía a todo el planeta. Ha dado a luz a diferentes tierras donde habitan cuerpos de colores, que a menudo abandonan sus orígenes y se tambalean a la deriva. A veces invisibles, a veces identificados; muchos atraviesan el mar de tinta para dar una nueva forma a su vida. Y es que, un nuevo orden les espera. La villa marinera quiere visibilizar la realidad de la población migrante y crear espacios de convivencia e interacción para fomentar la participación de los inmigrantes. Para ello, cuenta con un innovador proyecto europeo de intercambios culturales.
Santa Pola es el único municipio español integrante del programa SOLIDA, Europa para la ciudadanía. Este proyecto ha sido el colofón final de un año lleno de lucha por los derechos de los inmigrantes. Grecia, Portugal, España, Italia, Malta, Croacia y Eslovenia son los países que realizarán el intercambio de prácticas en materia de migraciones y participación ciudadana entre 2017 y 2019. La finalidad de este proyecto es crear una asociación activa con los inmigrantes residentes en la localidad.
La empresa alicantina Créate 160 propuso a Santa Pola como representante español. Esta propuesta fue aceptada por la Unión Europea y Santa Pola ha sido subvencionada con 15,960€ de un total de 127,500€, según la base de datos de SOLIDA. La localidad costera contará con 22 participantes internacionales el próximo mes de marzo, donde se abordará la temática de los foros consultivos y organismos. El desarrollo de actividades, tales como seminarios, bailes, conciertos, reuniones y conferencias de cooperación, pretenden alcanzar a unas 800 personas aproximadamente.
Santa Pola de los 127,500€ contará con 15,960€ para el proyecto SOLIDA, según la base de datos del programa
Samuel Ortiz, máximo representante de la Concejalía de Migraciones, explica que el objetivo es poner en contacto a todas las personas migrantes activas y abrir el camino hacia nuevos proyectos. “Nos gustaría conseguir una nueva asociación para la población migrante”, expresa Ortiz. Y añade: “El proyecto debe servir de estructura para crear ferias mensuales gastronómicas y culturales”.
Hasta el momento, el proyecto está teniendo una gran repercusión. Más de 30 personas han sido inscritas en la base de datos de SOLIDA para participar de manera voluntaria. Además, “cualquier persona puede proponer acciones para visibilizar los derechos humanos”, comenta el concejal.
Experiencia directa
¿Viajar a otro país con gastos pagados? Ahora es posible gracias a SOLIDA. Todas aquellas personas interesadas en el intercambio cultural y con un cierto nivel de inglés pueden optar a esta oportunidad. El objetivo de este viaje es producir un choque cultural y lograr una mayor implicación en futuros proyectos de la localidad.
El primer encuentro del proyecto se produjo en Gioiosa Ionica, Italia. Gema Molla fue la encargada de representar a Santa Pola como técnico del Ayuntamiento. Molla explica que tuvo la oportunidad de hablar con personal técnico, participantes de otros países y con la vecindad del pueblo. Sin duda, reconoce que fue una experiencia enriquecedora que apuesta por visibilizar más la diversidad de culturas.
Las estancias en los países del proyecto constan de cuatro días y se centran en diferentes aspectos, según la temática abordada. En cada encuentro se tratan objetivos particulares. “Santa Pola será la cuarta población a visitar y abordará la temática de foros consultivos y organismos”, detalla la abogada.
“Santa Pola será la cuarta población a visitar dentro de las siete participantes”, explica la técnico del Ayuntamiento Gema Molla
Una vez cumplido el objetivo principal del encuentro, Santa Pola contará con actividades lúdicas turísticas, visitas a monumentos y museos, ponencias en el Baluarte y diferentes ferias gastronómicas y culturales.
El supercontinente
Pangea, supercontinente que dio origen a los continentes actuales, es el nombre que engloba la sede de los inmigrantes de Santa Pola. Se encuentra dentro del Espacio Amics, centro social comunitario de referencia donde se valoran los temas de igualdad, participación ciudadana y migración. Dentro de este programa se atiende a personas inmigrantes con diferentes necesidades, siempre y cuando, estén empadronadas en la localidad.
Pangea es el lugar donde las personas migrantes pueden regularizar su situación mediante el informe social de arraigo y pedir información sobre la tarjeta sanitaria, alquiler de viviendas, becas y cursos de formación, así lo confirma Marisol Casanova secretaria de la sede. La población migrante que acude es de origen diverso, cuya edad está comprendida entre los 25 y 45 años. Además, Casanova destaca “las mujeres inmigrantes son las que más acuden para solicitar información”.
La sede está coordinada por el Ayuntamiento de Santa Pola y la fundación Elche Acoge. “Una vez asumida la responsabilidad de la nueva concejalía, amplié el servicio realizando un convenio con Elche Acoge”, afirma el concejal de Migraciones, Samuel Ortiz. Y añade: “Hemos pasado de un servicio mínimo a tener un convenio amplio que da lugar a actividades de sensibilización”. El instrumento principal de cambio se produjo con el convenio de la fundación. Así pues, actualmente el programa “Servicio Pangea” permite combinar el trabajo social con el servicio jurídico.
Elche Acoge es una entidad especializada en inmigrantes que se encarga de gestionar la rama social de Pangea. Para ello, Lidia Durá, coordinadora de Elche Acoge, comenta que la fundación realiza acciones de sensibilización con personal voluntario en el centro comunitario, colegios e institutos. Asimismo, desde esta oficina se imparten talleres y charlas abiertas a la sociedad con el objetivo de fomentar la integración social.
Por otro lado, el servicio jurídico recae en manos de Gema Molla, abogada de Servicios Sociales de Santa Pola. La abogada expone que la mayoría de problemas que tiene este colectivo son de tipo administrativo, en el ámbito jurídico, a efectos de regular su situación administrativa: un permiso de residencia y/o trabajo bien remunerado. “El principal problema que subyace a la hora de renovar estos permisos es el de los recursos económicos”, informa Molla.
En primera persona
Malas situaciones económicas, inestabilidad salarial, crisis políticas, conflictos internaciones o catástrofes generalizadas, son algunas de las razones por las que los inmigrantes deciden realizar sus maletas y adentrarse en busca de una mejor vida.
Santa Pola cuenta con 31.000 empadronados, de los cuales 5.981 son inmigrantes, según la memoria anual realizada por Elche Acoge y el Ayuntamiento local. Un 19% de la población de la localidad hace referencia a las personas migrantes empadronadas, según confirma el informe del Departamento de Estadísitca. Sin lugar a dudas, ya sea por la condición climática o por el empleo, Santa Pola se ha posicionado en el camino de estos inmigrantes. Manuel Cazorla, ecuatoriano residente desde hace 17 años, cuenta que él nunca pensó venir a España pero era la única opción que tenía para pagar la deuda que había contraído en su país. Sin embargo, actualmente ha formado en la localidad su familia y dispone de un trabajo estable. Fabiana Sandstrom acudió a la localidad para encontrarse con su familia brasileña, que meses antes había emigrado, y en busca de un buen nivel de educación para su hija. Marinela Chavez llegó a la villa porque quería criar a sus hijos en un pueblo pequeño español y Santa Pola le llamaba la atención. Silivini Forlani vino a España porque en Argentina ya tenía conocimientos acerca de la calidad de vida española y quería mejorar sus condiciones de vida.
Los inmigrantes coinciden en que los comienzos son duros debido a que hay gente que vulnera los derechos humanos. Así pues, Manuel Cazorla cuenta “Una vez iba por la calle y una moto me gritó inmigrante de mierda”. Fabiana Sandstrom admite que en alguna ocasión los españoles la han insultado en temas laborales.“Los españoles piensan que los extranjeros les quitamos el dinero de sus bolsillos”, afirma la brasileña Sandstrom. La brasileña, enojada, explica que las ayudas de las que disponen provienen de la Unión Europea y que son para que todas las personas tengan acceso a las condiciones básicas.
“Una vez iba por la calle y una moto me gritó inmigrante de mierda”, expresa el ecuatoriano Manuel Cazorla
En este momento hay dos millones y medio de españoles y españolas residiendo en el extranjero, según la base de datos de Elche Acoge. Todas ellas también son personas migrantes y deben ser respetadas. “Santa Pola, a diferencia de Elche Acoge, no tiene ninguna nacionalidad predominante”, expresa Lidia Durá.
Un día especial
El 18 de diciembre, Día Internacional de la Personas Migrantes, es una fecha señalada para las millones de personas que, por múltiples razones, han dejado su país de origen y han comenzado una nueva vida en un país de acogida.
En este día, la población migrante de Santa Pola junto a Fundación Elche Acoge y la Oficina de Atención a las Personas Migrantes, por primera vez ha realizado un evento cultural en el centro de la localidad con el objetivo de reivindicar el derecho que tiene toda persona de salir de cualquier país, incluso del propio, y de regresar a él.
Bajo el lema “Yo también soy de aquí”, las autoridades públicas pretenden combatir los ataques racistas, insultos xenófobos, abusos y el trato diferente que las personas migrantes sufren en su vida cotidiana.
Son muchas las personas que tienen una imagen estereotipada, en la mayoría de los casos negativa, de quienes provienen de otros lugares del planeta. Por ello, desde la concejalía de migraciones consideran que es importante reivindicar el derecho a que toda persona sea tratada con dignidad y respeto.
En el evento se desarrollaron actividades para toda la ciudadanía. En primer lugar, se contó con la presencia de una biblioteca humana, donde todas las personas de origen diverso se convirtieron en libros contando su cultura, sus costumbres, motivos por los que decidieron migrar y cómo está siendo su proceso de integración. Asimismo, había un trivial intercultural con el fin de conocer mejor las diversas culturas que integran la sociedad. Por último, se procedió a una lectura por parte del concejal Samuel Ortiz. Seguidamente, todos los participantes soltaron globos de colores.
Además, con motivo del día del migrante, se realizó un taller de mediación en la oficina Pangea donde una veintena de personas procedentes de diferentes nacionalidades interactuaron. Contribuir al progeso colectivo, celebrar la diversidad y fomentar la riqueza cultural de los intercambios entre los pueblos, son algunas de las finalidades que presentaba este taller. “La principal idea era explicar la importancia de la resolución de conflictos, así pues una solución colectiva es más eficaz”, afirma Lidia Durá.
Caminando hacia el futuro
2017 ha sido un año productivo dentro de los proyectos que abordan las cuestiones sociales y culturales de las personas migrantes. Durante este intervalo se han realizado diversas actividades, así como la celebración de la feria de igualdad y solidaridad o el Día del Migrante. Por otro lado, Samuel Ortiz destaca también la subvención para cursos específicos A1 de español para extranjeros, lo cual ha ayudado a la integración.
Además, Ortiz revela que la villa marinera consiguió un proyecto de cooperación de ayuda humanitaria, dotado de 35.000€. “Desde 2008 no se daba ninguna ayuda”, aclara el edil. En este proyecto se abordan las causas de catástrofes naturales y las condiciones extremas. “Hemos ayudado a países como Ecuador o Cuba en temas de atención sanitaria”, declara el concejal.
“Desde 2008 el Ayuntamiento de Santa Pola no recibía ninguna ayuda de cooperación humanitaria”, aclara el edil Ortiz
Solidaridad, integración social y multiculturalidad son, entre otros, aspectos que desembocarán en las orillas del Mediterráneo en el 2018. Este año se prevé como un período de innovación donde se realizarán nuevas actividades y campañas colaborativas. El flujo de inmigrantes es un vaivén constante que irá aterrizando cada vez más en la pequeña villa marinera. La multiculturalidad aportará nuevos conocimientos sobre el vínculo que une a las personas y demostrará que todos somos Pangea.
