Open Challenge

El regreso del U.S. title y la figura del campeón defensor.

Jorge Hernandez G.
PROYECTO SUPLEX
3 min readAug 10, 2015

--

El reinado part-time de Brock Lesnar fue cuestionado por la ausencia del campeón en los shows semanales. Las apariciones esporádicas de Lesnar lo habían convertido en un evento especial en sí mismo, lo suficientemente excepcional como para garantizar must-see, can’t-miss television. Combinar este fenómeno con el campeonato mundial, sin embargo, generó una caída en el interés del producto semanal. La ausencia del título más importante, y la pobre presentación de los títulos menores, causaron que Raw se sintiera irrelevante.

Caída en el promedio de audiencia desde que Brock Lesnar ganará el título en Summerslam 2014 hasta el final del año. (Comparación con 2013)

Durante el tiempo en que Lesnar fue campeón, el maletín MITB de Seth Rollins funcionó como título de facto. Su rivalidad contra Dean Ambrose tomó popularidad y su sorpresiva coronación en Wrestlemania fue bien recibida por el público. Su presencia semanal sería mayor que la de Lesnar por obvias razones, pero al final del día Seth sería un campeón escurridizo: hasta el día de hoy ha defendido el título en weeklys (Raw o Smackdown) solo en 3 oportunidades, y en una de ellas, se trató de una no-pelea contra Kane.

Quizás teniendo en consideración la situación de estos dos luchadores, la empresa ya había dejado circular rumores en marzo que indicaban que los títulos de segunda línea, el de Estados Unidos y el Intercontinental, serían arropados por John Cena y Daniel Bryan. En ambos casos se trataba de figuras más grandes que los campeonatos que buscarían aumentar su credibilidad con defensas semanales, mientras que el inédito Rollins se asentaba como campeón mundial. El truco no funcionó con Bryan a causa de lesiones, en demérito de Smackdown. Pero Raw se vería en una situación idílica: Todos los lunes, John Cena iba a ser parte de una pelea titular.

Pelear contra John Cena te pone en una situación especial. En primer lugar, significa que todos te van a prestar atención; y además, implica que gran parte de la audiencia va a apoyarte por el simple hecho de no ser John Cena. Pero desde que el 15 veces campeón mundial ganara el título de los Estados Unidos en Wrestlemania 31, también significa ser parte del segmento más consistente y productivo que la empresa tiene para ofrecer: el U.S. Title Open Challenge.

La apuesta no ha respondido en términos de audiencia, porque al final del día John no está abriendo y cerrando los shows, pero el éxito de su reinado como mecanismo de bookeo ha sido incuestionable. En primer lugar, ha hecho del campeonato de los Estados Unidos algo importante nuevamente; tras solo 4 meses, Cena se encuentra a solo dos defensas más de igualar el total de defensas en shows semanales de los últimos tres campeones… combinados (11 contra 13). Los retadores se han visto beneficiados al lucir extremadamente competitivos contra el luchador franquicia, ya sea en el caso de asiduos del roster principal (Dean Ambrose, Stardust, Bad News Barrett) o en el de nuevos rostros provenientes de NXT (Sami Zayn, Neville).

Defensas titulares del campeonato de los Estados Unidos por los últimos 4 campeones.

Los dos casos más simbólicos han sido los de Kevin Owens y Cesaro. En el primer caso, la empresa se entregó a convertir a Owens en una estrella lo más rápido posible, respondiendo el reto abierto e iniciando una rivalidad de meses con Cena. Mientras que para Cesaro, las peleas contra John han sido fundamentales para reavivar el interés del público en su figura.

Quizás la guinda en el pastel se dé este 23 de agosto, cuando John Cena haya logrado que el título de los Estados Unidos, luego de no haber sido defendido en Summerslam 2014, este año forme parte del evento estelar de la cartelera.

--

--