“After” the languaje
Después del sexo contigo
quedan los restos de dos animales
que han aprendido que
la mejor forma de quererse
es devorándose.
Después de hacerlo contigo
quedan las grietas de un terremoto
en cada pared de mi cuarto,
y mi cama hecha añicos
es la mejor muestra de que
más que querer construir,
lo nuestro es destruir.
Después del sexo contigo queda
el olvido involuntario
-aunque certero-
de tus bragas en el suelo de mi cuarto,
los condones del amor,
y las cenizas de un incendio
esparcidas en mi almohada.
en mi boca,
y en mi pelo.
Queda el recuerdo
de que con la boca llena
estamos mucho más guapos.
Quedo yo, desecho,
quedas tú, entera.
Me convierto en un hombre que aprendió
que su mayor fantasía
es no decirte adiós, dos besos,
después de un orgasmo.
Después del sexo contigo,
queda la llamada perdida de tu novio,
y la petición formal
de que compres pan antes de subir a casa.
Queda el eco del portazo,
tus tacones dejando huellas
en el suelo de mi portal,
mi erección de despedida
y un taxi que se pierde
por mi calle.
Después del sexo contigo,
quedan mis ganas
de volverte a ver
y tu promesa, -falsamente indecorosa-,
de que esta vez
será la última.
Miguel Gane.