Aprendizaje del lenguaje según la TMR
Tras el debate en clase sobre la Teoría de los Marcos Relacionales (TMR) me gustaría dar mi opinión sobre el tema. Esta teoría se posiciona como teoría “post Skinner” e intenta mejorar algunos aspectos respecto al desarrollo del lenguaje. Esta teoría se basa que todo el comportamiento es una operante generalizada, es decir, la conducta esta basada en el condicionamiento operante (refuerzos y castigos), a través de interacciones con el entorno/medio. En cambio no considera los factores genéticos o innatos como factores importantes de la aparición del lenguaje.
Una de las mayores críticas realizadas al modelo conductistas de Skinner, es que no todas las relaciones que hagamos en el lenguaje las podemos condicionar. Si fuera esto cierto, nos pasaríamos gran parte de nuestro tiempo reforzando cualquier asociación que hagamos y no podríamos avanzar. Aunque, yo añadiría que esto no es del todo cierto. Dado que el condicionamiento, adquiere gran importancia a edades tempranos para aprender las asociaciones más sencillas y básicas. Como se muestra en la TMR a través de la implicación mutua la cual asocia relaciones bidireccionales, como Mamá-Hijo. Por lo tanto cada vez que el niño diga “mamá”, recibirá un gran refuerzo por parte de su familia que le animará a repetir esa palabra sucesivas veces. Así, influyendo a que el niño se vaya dando cuenta de que significa mamá, al usarlo otras personas ajenas. Dando lugar a implicaciones combinatorias, en las cuales con reforzar unas cuantas asociaciones, siguiendo el ejemplo de la familia, “ella es mi madre y ella es mi tía” por lo tanto el niño podrá realizar una relación derivada y deducir que mi madre y mi tía son hermanas. Sin haber sido esta relación reforzada en ningún momento. Por último, el niño podrá llegar a un nivel de asociación sin la necesidad de ver físicamente el objeto. De esta forma aprendemos en nuestro día a día, ya que la mayor parte del conocimiento que tenemos, no lo hemos visto en persona. Además facilita que en tareas como Stroop, al leer el color se nos venga a la mente al momento el color leído, o como al decir guindilla se nos viene a la mente picante.
Ya para terminar, me gustaría citar a Joaquín Manuel Martínez, profesor de primero de condicionamiento, motivación y emoción, que en una de sus clases de condicionamiento dijo que “si aprendiésemos todo desde pequeños como aprendemos a hablar, no tendríamos fracaso escolar y seríamos muy hábiles en todos los campos”. Se refiere con esta frase que si recibiéramos la cantidad de refuerzo que reciben los niños pequeños al decir una palabra y así sucesivamente cuando amplían su vocabulario, nos sentiríamos motivados para seguir esforzando en ese campo. Ya que, por ejemplo, en matemáticas si eres el último de tu clase en realizar la suma, no vas a recibir ningún tipo de refuerzo, al contrario, se sentirás castigado e inútil. Por lo tanto, desde mi punto de vista, sin condicionamiento no hay lenguaje, es fundamental para su inicio.
