ATRIBUCIONES IRREALES.

¿De qué manera influyen las experiencias en nuestra forma de actuar?

¿Realizamos ciertas conductas en base a lo que vemos en los demás?

Muchas veces hemos podido empezar un día con mal pie y pensar que todo el día será un horror, hemos podido suspender un examen o una prueba importante y relacionar ese mal resultado a futuros exámenes…

El ser humano tiende siempre a realizar atribuciones en base a lo vivido a lo largo de su vida, por lo que, a la hora de analizar nuestro comportamiento tenemos como componente esencial la experiencia y las emociones relacionadas con estas. En relación con esto, encontramos la Teoría de las Atribuciones; la cual explica que la conducta de una persona se desarrolla por causas internas, que estarían relacionadas con la personalidad y rasgos individuales, y causas externas como la motivación o la relación con el entorno.

Al comportarnos de cierta manera estamos atendiendo a nuestra forma de ser que nos caracteriza como ser único y a la forma de apreciar nuestro entorno. Además, influye un componente motivacional donde reinan los éxitos y los fracasos; por ejemplo, si vamos un día a jugar un partido de tenis y no tenemos una buena experiencia (fracaso), no volveremos a jugar al tenis.

Esto es un error que cometemos todos a menudo, por naturaleza tendemos a realizar atribuciones pero… ¿son reales? ¿nos ayudan a avanzar?

Muchas veces puede que actuemos con el miedo de que nos juzguen, con el miedo de equivocarnos pero esta es la mejor forma de aprender. No podemos dejar que nuestra mente adelante acontecimientos, no tenemos una bola de cristal para ver el futuro y si tenemos que equivocarnos lo haremos para la próxima vez no cometer el mismo fallo.

Cada día en nuestra vida es diferente, cada experiencia tendrá distintos resultados y distintas fuentes de motivación por lo que es un error generalizar un problema; tenemos que conseguir controlar lo interno, los pensamientos que nos llevan a bloquearnos, para dejar fluir lo externo.