¿ CÓMO DEBERÍAN LOS PADRES Y MADRES EDUCAR A SUS HIJOS PARA QUE LAS ETIQUETAS SOCIALES NO LES AFECTARAN?
Tras una charla con el profesor acerca de la sociedad tan etiquetada en la que estamos, nos planteamos como podrían educar los padres y madres a sus hijos para que no le afectaran tanto las posibles etiquetas o para que reaccionaran de una forma u otra pero siempre con el fin de que no les hiciera daño.
Antes de hablar sobre cómo los padres tendrían que educar a sus hijos/as debemos saber que la manera en la que los padres educan a sus hijos puede influir en su desarrollo y que existen distintos modelos o estilos de autoridad que ejercen los padres con sus hijos:
- Modelo indulgente o permisivo: Los padres no ejercen ninguna autoridad sobre el niño. El niño es quien debe decidir todo y no se le puede imponer nada relativo a su conducta. No existe ningún tipo de castigo ya que, se consideran traumáticos para el niño.
- Modelo negligente: El interés prioritario de estos padres son sus propias actividades profesionales o negocios y los hijos solo son un entretenimiento pero no una ocupación. Son niños criados por abuelos y empleadas de servicio o con la ayuda de las instituciones escolares.
- Modelo autoritario: Los padres y madres autoritarios/as se comunican muy poco con sus hijos, apenas los escuchan y no los tienen en cuenta. Al niño no se le permite discutir ninguna orden y debe obedecer sin rechistar. De no ser así el niño será castigado fisicamente o psicológicamente. Para este tipo de padres el castigo es una forma de hacer a sus hijos más fuertes para enfrentar la vida.
- Modelo democrático o asertivo: En este modelo nadie se coloca en posición de superioridad jerárquica. Los padres y madres explican a sus hijos las razones del establecimiento de las normas, reconocen y respetan su individualidad y sus derechos, negocian mediante intercambios verbales y toman decisiones conjuntamente con ellos, intentando fomentar comportamientos positivos e inhibiendo los no adecuados. No tratan de imponer un sistema de creencias sino principios fundados en la razón.
Como se ha demostrado, el estilo educativo más adecuado para un crecimiento y desarrollo sano es el democrático o asertivo ya que, favorece la autonomía del niño, aumentando su autoestima y sentimiento de adecuación.
Una vez aprendida la teoría, la dificultad está en llevarlo a la práctica. Para ello estuve buscando ejemplos y encontré, entre otros, la siguiente conferencia que me pareció muy interesante porque pienso que un buen ejemplo se puede percibir de un propio padre, Carles Capdevila. Os dejo aqui una de las conferencias/monólogos más cortos para que podais ver su perspectiva:
Carles Capdevila fue el director del diario Ara y colaborador del espacio Guía de Padres del programa Hoy por Hoy de Cadena Ser. Carles habla de sus 19 años de experiencia como padre destacando la diferencia entre los niños y los adolescentes. Carles subraya la importancia del humor en la educación de lo niños e insiste en que “los padres supermotivados tenemos a veces ciertos complejos o angustias fruto de saber tanto y olvidamos esa misión más simple que es espabilar, controlar y divertirnos”.
Él habla de educar a los niños con cinco sentidos muy elementales:
1- El sentido común: Los niños entienden que el mundo funciona según las reacciones que tengamos a lo que hacen. Por ejemplo: Cuando un padre o madre le dice a su hijo vete a la cama de forma repetida pero el niño no lo hace esto es porque para el niño “vete a cama” no significa dormir, para que signifique eso el padre o la madre deberán de llevarlo a la cama seguidamente después de decir “Vete a la cama”.
2- El sentido del ridículo:Este es muy parecido al del sentido común,es un sentido muy importante que a veces los padres pierden. Por ejemplo: Un padre y una madre que son bajitos estaban preocupados porque su niño es bajito y van al pediatra a pedirle vitaminas. Aqui lo que los padres están haciendo es inculcar un prejuicio o complejo que ellos tienen a su hijo. En lugar de mostrar indiferencia y no avergonzarse de ser bajitos.
3- El sentido de la responsabilidad: “Si no quieres tener hijos no los tengas, pero si los tienes hay que educarlos”. Es totalmente cierto que tener hijos te cambia la vida, no es práctico pero si puede ser maravilloso, emocionante… No hay que tener resistencia ni miedo al cambio, cambiar es evolucionar.
4- El sentido moral: Hay que educar a los niños en valores y los valores se imitan por ello los padres deben de ser su ejemplo y realizar conductas adecuadas . Así podrán guiar su conducta. A veces,los padres confunden los roles y abandonan algunos valores. Por ejemplo: Cuando quieres ir a una discoteca y no tienes la edad y tus padres te falsifican el DNI para que puedas entrar. Aqui la misión o rol de los padres hubiera sido enfadarse o decirle que no se puede falsificar el DNI y no hacerlo ellos.
5- El sentido del humor: Es muy importante, si se tiene sentido del humor las cosas pueden ser más faciles. “Si practicamos la ironía desde la seguridad de que va a ser que no, los niños lo entienden”. Hay momentos en los que la ironia es mejor que ponerse muy serios o estar tensos,enfadados u obsesionarse con hacerlo distinto, hacer lo mejor etc. Por ejemplo: Le dijo una vez a su hijo: “Sí, por supuesto, vamos a ir a ver el Barça para celebrar tu 1,9 en Mates”. Y él le contestó: “Vale, ya lo he pillado, me pongo a estudiar ahora”.
Con respecto a los cinco sentidos pienso que el sentido del humor es una gran novedad y que aunque parezca algo raro vivir cada problema como una oportunidad para hablar con los niños y no como un inconveniente, habrá un mayor aprendizaje tanto para los niños como para los padres. Que cuando un padre está enfadado, respire y diga un chiste o utilice la ironía es una gran oportunidad para que exista una mayor cercanía y para inculcar los valores a los niños, de una forma que no le cause malestar y el día de mañana cuando tengan alguna situación que no les guste puedan afrontarla mejor.Porque aunque lo ideal sería que no se etiquetaran a las personas,la realidad muestra que en la actualidad sigue habiendo etiquetas sociales. Con este tipo de mecanismos inculcados,como la ironía o el sentido del humor, podemos lograr que tanto si somos niños como si somos adultos, ante una situación amenazante para nosotros, ya sea por las etiquetas sociales u otro tema, logremos que nos no afecte demasiado y podamos reaccionar sin ofender a nadie.
Como comenté en mi primer post con un ejempo personal de etiquetas sociales https://medium.com/psicolog%C3%ADa-del-lenguaje-ugr/las-etiquetas-sociales-el-arma-de-doble-filo-89ee6609cdcf , si yo hubiera sido educada con estos mecanismos, probablemente cuando mi amiga me hizo el comentario “Estas gorda, normal que no le gustes a los chico hubiera reaccionado de otra manera, con alguna frase tipo: “Si no me lo dices no me doy cuenta”, con tono irónico y una risa. Quizá no me hubiera afectado tanto por ello como se ha comentado en post de otros compañeros/as el humor no puede servir como un mecanismo de defensa.
REFERENCIAS:
http://psicologiacultural.org/Pdfs/Materiales/Ponencias/Estilos%20de%20autoridad.pdf
