¿Cómo definimos aquello que nos transmite? Música y emociones

Tras investigar y escribir el artículo anterior acerca de cómo la música puede transmitir emociones que las palabras no son capaces, decidí hacer un pequeño experimento para comprobar cómo puede influir una canción concreta en los demás, y qué sensaciones puede producir.

Realicé un cuestionario con 5 ejemplos de diferentes bandas sonoras/obras, a partir de las cuales los participantes deberían decir, mediante una escala tipo Likert (1–5), cuán representados se sentían al escuchar dichas canciones con un listado de emociones que se les presentaba. Para intentar hacerlo lo más representativo posible, elegí las emociones de alegría, tristeza, nostalgia, esperanza, enfado, conflicto, confianza, amor y aventura. Además, puse una opción para poder escribir alguna emoción que no estuviese reflejada en las anteriores.

Después de ver las respuestas de las personas que decidieron participar en este cuestionario, pude sacar varias conclusiones.

Además de ser consciente de la influencia del contexto a la hora de que una canción o banda sonora te haga sentir; como lo es la trama de la película, las escenas presentes al momento que suena la música o incluso el propio estado emocional en el momento concreto, me he dado cuenta de que en la mayoría de los ejemplos que propuse, todos coincidían en lo que sabían que no estaban sintiendo.

Es mucho más fácil decir que algo NO te provoca determinadas sensaciones, como por ejemplo enfado o conflicto, a saber con certeza que algo te provoca sentimientos de amor, confianza, o incluso nostalgia, ya que cuando una canción te transmite, las emociones se entremezclan a medida que la vas escuchando.

Por otro lado, a través del cuestionario podemos ver la efectividad que tienen la elección de los acordes que realizan los compositores en sus obras para evocar determinadas emociones. Por ejemplo, en este tema de Yann Tiersen, “Le Moulin”, el autor ha utilizado predominantemente acordes menores, los cuales señalan tristeza.

En dicha banda sonora de la película Amelie, hemos comprobado que las emociones predominantes que sienten nuestros participantes son “tristeza”, “nostalgia”, también acordes al momento concreto de la película.

El ritmo, los acordes elegidos por el autor (como ya hemos comentado antes), y el sentimiento con el que esta pieza es interpretada, son algunos de los factores que hacen que esta obra nos provoque este tipo de emociones.

Al fin y al cabo, lo que quería comprobar con esto es la influencia que tiene la música en cómo nos sentimos, y cómo los autores de las bandas sonoras son capaces de captar nuestra atención a través de la composición de piezas que logran hacernos ver el mundo de tantas formas distintas.