El arte de conversar de Schulz von Thun: la condición política de la comunicación

Schulz von Thun habla en su artículo sobre un tema que me ha parecido muy interesante dado que es algo que nunca me había planteado antes y que considero que tiene más importancia de la que le otorgamos.

El autor hace referencia a la gran complejidad que existe en la comunicación interpersonal, y que la mayoría de las personas normalmente nos solemos quedar en aquello más superficial de la comunicación, como el mensaje en sí, lo más objetivo.

Pero hay mucho más que objetividad en los mensajes, de hecho podríamos considerar que la subjetividad es mucho más relevante.

Se presentan cuatro elementos esenciales en todo tipo de comunicación:

• El contenido objetivo de la noticia.
• La autoexposición, lo que el emisor informa de sí mismo mientras comparte la noticia.
• La relación entre emisor y receptor.
• La influencia entre los dos al procesar la noticia.

Con estos aspectos, se forma de manera imaginaria un cuadrado, colocando cada característica en un lado de la figura y en el centro se presenta la noticia/expresión en cuestión.

Además, no solo hay que tener en cuenta la parte verbal de la conversación, sino que también hay que hacer hincapié en todos los aspectos no verbales que transmite el emisor, como la entonación, los gestos o la pronunciación. De este modo, la noticia que se realiza puede denominarse “congruente” si todos los aspectos que se presentan concuerdan entre sí, o bien “incongruente” si no lo hacen y por lo tanto, se contradicen.

Una conversación en la que predomine la claridad, que es lo que se pretende, deberá ser congruente, para evitar cierto dilema en el emisor o receptor de la conversación.

Para poder detallar mejor estos aspectos, he intentado hacerlo con un ejemplo.

Vamos a imaginar a dos hermanos adolescententes desayunando juntos. Uno le pregunta al otro: “¿Podrías pasarme los cereales?”, y el otro le responde, “Sí, sí que podría”, pero en vez de hacerlo, los coge y se los come él.

El primer aspecto que percibimos es el contenido objetivo de la noticia, la información, y en este caso haría referencia a la pregunta de si le puede pasar los cereales, está claro que de lo que quiere informar un hermano a otro es de su deseo de desayunar cereales.

La automanifestación o autoexposición, expresión de la personalidad del emisor, en este caso, simplemente ha sido pedirle un favor a su hermano, pero debido la respuesta de él, es posible que se deba considerar otros aspectos en este mensaje, los no verbales, como por ejemplo la entonación con la que se lo ha preguntado, siendo muy probable que haya sido desagradable o con poca gana, dejando caer que no es de su agrado totalmente el hecho de tener que compartir palabras con su hermano o tener que pedirle favores, ya que eso puede dejar entrever que le necesita, que depende de él, algo que no quiere demostrar. Y eso podría evidenciar que tiene una personalidad un tanto hostil, características que puede notar el receptor y sentirse incongruente con la situación y por lo tanto no actuar correctamente.

La siguiente característica es la relación entre el emisor y el receptor. En este caso, podríamos deducir que el intercambio comunicativo que se ha realizado deja entender que no es una relación agradable, podría decirse que ha habido un problema entre ellos dos y hace que el uno del otro piensen cosas negativas. Se sitúan en una posición confrontada, no existe la cooperación entre ellos.

Por último, la influencia entre el emisor y el receptor, en este caso si consideramos que el hermano quiere que tenga una idea determinada de él, también sería una idea negativa, que sepa que está enfadado o molesto por alguna razón en concreto pero que esa molestia está relacionada con él, (estoy enfadado contigo y quiero que lo sepas). Quiere hacerle sentir mal.

El acto realizado por el hermano puede demostrar indiferencia hacia el otro, amenaza, fastidiarle, etc.

Como hemos visto, este malentendido ha sido protagonizado por la mala comunicación, algo que el autor enfatiza en su artículo que podría mejorarse, o al menos tratarse, con el estudio de las 4 características anteriores, de ahí, la gran importancia que le deberíamos otorgar y que no lo hacemos, pues si nos lo paramos a pensar, la comunicación lo es todo para nosotros, ¡sin ella ni siquiera seríamos quién somos!