“Emociones Elementalmente No Habladas: Explorando la Comunicación No Verbal en la Película Disney Pixar ‘Elemental’, 2023”
Para entender bien el contraste entre los protagonistas debemos remontarnos a como en el contexto del cine, los símbolos del fuego y el agua han sido elementos visualmente poderosos y ricos en significado simbólico. Estos elementos no solo contribuyen a la estética visual de una película, sino que también llevan consigo una carga simbólica que puede variar según el contexto y la narrativa de la historia.
El fuego en el lenguaje simbólico del cine, el fuego a menudo se asocia con la expresión de la pasión y las emociones intensas. Su presencia en una escena puede resaltar momentos de amor apasionado, ira desbordante o determinación ardiente. Además, el fuego tiene la capacidad de transformar y renovar. Sin embargo, el fuego también puede representar la destrucción y el peligro, evocando amenazas inminentes, desafíos intensos o situaciones críticas. Metafóricamente, la luz del fuego puede iluminar la oscuridad, simbolizando la búsqueda de la verdad, la revelación de secretos o la comprensión profunda.
El agua, en contraste, se asocia comúnmente con la fluidez y la capacidad de adaptación. Su presencia en el cine puede representar cambios, ya sea a nivel personal o en el entorno circundante. Las diferentes formas del agua, ya sea calmada, agitada o tormentosa, a menudo reflejan el estado emocional de los personajes o el desarrollo de la trama. El agua también simboliza renovación y purificación, compartiendo con el fuego la capacidad de representar procesos de cambio y regeneración. Además, las profundidades del agua a menudo se utilizan para evocar misterio y lo desconocido, siendo un símbolo de lo inexplorado, lo oculto o lo misterioso.
Ambos elementos, fuego y agua, se utilizan de manera complementaria en el cine para resaltar contrastes, conflictos y la complejidad de la experiencia humana.
No obstante, resulta muy curioso como en la película “Elemental” de 2023, se otorga cada uno de ellos a un género. El agua: calmada, serena y débil al hombre y el fuego; ágil, poderoso y peligroso a la mujer. Son muchas las escenas en las que esto se representa. Como cuando, “Wade” el chico de agua presenta a Candela a su familia, y todos ellos muestran debilidad y mucha facilidad para el llanto. Sin embargo, en la familia de ella pese a que prima el amor son múltiples las escenas en las que se comparten crisis de ira y enfado.
Son muchas las críticas hacia esta película, pero considero muy destacable como sin pronunciar palabras deja el siguiente mensaje: “Los hombres si lloran”. Y no como llevamos años escuchando que los hombres no lloran. Considero que se trata de una expresión cultural que refleja expectativas y normas de género arraigadas en la mayoría de las sociedades. Ha evolucionado a lo largo del tiempo, desde las nociones tradicionales de masculinidad que han existido durante siglos.
La idea de que los hombres no deben mostrar emociones, especialmente llorar, ha sido parte de constructos culturales y sociales que han tratado de definir roles de género. Estas expectativas a menudo han asociado la fortaleza emocional y la valentía con la masculinidad, mientras que mostrar vulnerabilidad o expresar tristeza a través de las lágrimas ha sido estigmatizado como una muestra de debilidad, más arraigado al papel de la mujer en la sociedad.
Me gustaría destacar como estas nociones están cambiando y evolucionando en muchas sociedades modernas. En la actualidad, se defiende cada vez más la idea de que la expresión emocional y la vulnerabilidad son aspectos saludables y normales de la experiencia humana, independientemente del género. La promoción de la igualdad de género y la desmitificación de las expectativas tradicionales de masculinidad y feminidad son parte de los esfuerzos para superar estereotipos restrictivos y permitir a las personas expresar sus emociones de manera auténtica, tal y como considero que demuestra esta película, sin verse limitadas por normas de género obsoletas.
A pesar de tratar otros muchos tópicos como el amor imposible entre contrarios, la xenofobia, el racismo, las migraciones, el dejar atrás a la familia, y un largo etcétera. Creo que es una película que refleja y demuestra una gran lista de valores a nivel de comunicación tanto verbal como no verbal. Y, en ella, he encontrado una gran lista de ejemplos de los temas que hemos tratado durante este cuatrimestre en las lecturas planteadas en la asignatura de “Psicología Del Lenguaje” como son las metáforas, los conceptos, las historias, imágenes y el montaje de ellas, las sugestiones en sus distintas formas…
Nerea García Torres, T1.
