¿Está DiCaprio realmente triste en esta imagen?
Anteriormente hemos hablado más en profundidad de los componentes de la emoción, a nivel cognitivo, como comentaba Damasio (2005) en su teoría de los mapas reales y falsos. A nivel fisiológico, según James (1884), esa sensación generaría emoción. Y ahora vamos a hablar del componente comportamental, o llamado de otra forma los patrones efectores de la emoción. No podemos entender el concepto de emoción por separado, es decir, sabemos que existen tres claves expresivas que un individuo manifiesta en función de la emoción que esté experimentando: respiración, expresión facial y expresión corporal.
Existen diferentes propuestas en cuanto a la cantidad de emociones primarias que experimentamos, pero nos vamos a centrar en la de Paul Ekam (1972), que postula que existen 6 emociones primarias: Miedo, Asco, Tristeza, Alegría, Sorpresa e Ira. Sabemos que cada emoción presenta una serie de patrones efectores en el cuerpo, como por ejemplo: las expresiones faciales, surgen de la actividad combinada de unos 23 músculos, que conectan directamente con los centros de procesamiento de las emociones, lo que hace que el control voluntario no sea fácil, aunque, siempre es posible «engañar» a un potencial observador. Bloch (1987,1994) constata que estos patrones efectores pueden ser reproducidos. Podemos decir que mediante la observación de una emoción “emergida” frente a una emoción espontánea “real”, un observador que no ha sido avisado previamente sobre el experimento, no es capaz de diferenciar cual de las dos es la realmente experimentada.
¿Y qué tiene que ver todo esto con DiCaprio? Sabemos que el famoso actor goza del privilegio de ser uno de los mejores intérpretes en sus películas, y un factor clave, que lo identifica, es su capacidad para transmitir la emocionalidad de la escena con su expresión corporal, facial, etc. Esta serie de patrones hace que el espectador conecte con su tristeza o rabia ya que somos capaces de percibir esa tristeza como real.
Entonces, ¿realmente DiCaprio está triste en esta escena?, la respuesta es: SÍ. Autores como Bloch (1987,1994), plantean que las emociones básicas corresponden a estados funcionales adaptativos del organismo, que cambian según los acontecimientos que se producen en el ambiente externo o interno. La experiencia subjetiva de si la emoción es positiva o negativa va a depender del punto de vista de la persona. Posiblemente DiCaprio, no tenga ningún acontecimiento que le esté generando dicha emoción si no más bien, un guión al que ceñirse.
¿Entonces, por qué puede DiCaprio expresar la tristeza sin necesidad de acontecimientos que lo induzcan? Pues posiblemente debido al método de “Alba Emoting”, que es un método que permite activar las emociones básicas mediante la reproducción de acciones corporales específicas (patrones efectores), que se utiliza principalmente para ayudar en el mundo de la interpretación a trabajar las emociones. Probablemente, entre camerinos, DiCaprio haya hecho un ejercicio sobre los patrones efectores de la emoción. En primer lugar, el actor debería entrar en un estado y expresión facial neutral inducido por una respiración lenta y calmada. Acto seguido, reproducirá una configuración completa de la expresión de la tristeza. “Inspire con sacudidas entrecortadas a través de la nariz y luego bote todo el aire de una vez a través de la boca abierta como en un suspiro; mantenga su cuerpo relajado con los brazos colgando; deje que la cabeza baje ligeramente y dirija la mirada hacia abajo., La espiración, al desinflarse, invoca emociones de desesperación y pesar. El sollozo comprende movimientos rápidos del diafragma. A causa de la protrusión del vientre, los movimientos inspiratorios son cortos, al tiempo que el diafragma debe realizar acciones de acortamiento más duraderas para expulsar el aire”.
Las personas que hemos experimentado esta técnica, sabemos de primera mano lo que significa el concepto de resaca emocional o abreacciones , para ello Bloch (1987), creó un método para “salir” de la emoción (“step-out”). Esta técnica consiste en que los sujetos que han experimentado la emoción, realicen: tres ciclos completos de respiración lenta, profunda y regular, se les pide que se toquen la cara y que cambien de postura. Este proceso hace que los sujetos vuelvan a un estado “neutro”, este proceso durará más o menos tiempo dependiendo del grado de activación del sistema de control emocional (Bloch et al,1987; Bloch, 1993). Si no se sale de la emoción y esta adquiere un nivel crítico de activación , la emoción seguirá manifestándose completamente en el sujeto produciendo abreacciones.
Este procedimiento de “salida de la emoción” hace que el sujeto con la práctica pueda salir al instante del estado emocional. Este tipo de trabajos tiene una aplicación directa para el entrenamiento de actores como hemos comentado anteriormente con la interpretación de DiCaprio.
Por último, Bloch señala que la posibilidad de inducir estos estados emocionales y poder controlarlos voluntariamente es una demostración de que los procesos centrales complejos pueden ser alterados por una modificación selectiva de la periferia Bloch (1992).
Así es que, con la literatura aportada, hemos concluido que esta técnica tiene un poder vivencial y terapéutico capaz de ayudar en situaciones de inexpresión o bloqueos emocionales que lleven a conductas desadaptativas, con el fin de regular y dar claridad a situaciones o experiencias vividas en las que no sean capaces de autogestionar sus emociones.
Por lo que consideramos que esta técnica no solo tendría una aplicación en ámbitos profesionales, sino también personales, pues el conocimiento de las emociones resulta primordial para entender cómo funcionamos como seres sociales e individuales.