IIII PARTE DEPENDECIA EMOCIONAL: LAS REDES SOCIALES EN LOS ADOLESCENTES Y SU RELACIÓN CON LA VIOLENCIA DE GÉNERO.(PSICOLOGÍA DEL LENGUAJE).
Realizado por: Clara Molinillo Barragán, Lourdes Hurtado Pacheco y José Ignacio Morales García. Grupo T2 (B). Grupo de trabajo: “Los tóxicos”.
La mayoría de los jóvenes a día de hoy adoptan una nueva forma de socialización y comunicación mediante las TIC y los cibermedios. El medio virtual se ha convertido en el escenario en el cual surgen y se mantienen relaciones de pareja. Varios estudios han encontrado existencia de problemas en conductas inadecuadas hacia la pareja o la llamada dependencia emocional. A día de hoy la adquisición de un nuevo teléfono móvil con las mejores prestaciones, las últimas versiones… se ha convertido en un objetivo primordial para muchos jóvenes. La creación de un perfil en las redes sociales puede dominar la vida de un adolescente, ya que éste puede crear una nueva identidad “digital” que le resulte más beneficiosa, distorsionando incluso el mundo real.
Internet comenzó como fuente de información, llegando a convertirse en una fuente de interacción social. Es un medio de comunicación sencillo, accesible y rápido sin suponer una barrera la distancia física o temporal. En las redes se pueden compartir ideas, emociones, noticias, tareas, enlaces a otras páginas o contenidos…
Los adolescentes usan las redes sociales o cibermedios para satisfacer sus necesidades comunicativas, establecer una comunicación de manera instantánea, sencilla y ociosa, además, de que para ellos supone una construcción de su ser social. Muchos jóvenes piensan que es imprescindible tener una red social propia para disfrutar a día de hoy una vida social plena. ya que, según los adolescentes, con la situación de pandemia es muy limitado el conocer a personas y comunicarse. Por esto se convierte en el lugar en el que las personas jóvenes viven sus relaciones de pareja.
A todo lo anterior, se le suma la influencia que ejerce la cultura en cuanto a los estereotipos de género y la idea del amor romántico. La idea del amor romántico no parte de una base igualitaria, sino que mantiene un trasfondo de dependencia. Esta idea parte de mitos como la media naranja, la pasión eterna, que los celos son una demostración de amor, el amor platónico, etc.
Como se ve en la imagen, esta pareja utiliza el lenguaje aparentemente “normal” entre los adolescentes de hoy en día, pero con la intención de controlar y marcar límites en su relación de forma encubierta.
Las redes sociales, a día de hoy son un medio de comunicación para miles de parejas y más en la situación en la que vivimos. ¿Sabemos las consecuencias que tienen?
Las redes sociales generan desconfianza en las parejas, ya que en estas hay mucha facilidad de acceso a otras personas que no son de nuestro entorno. Hay mucha facilidad de control, ya que, subimos constantemente fotos de lo que hacemos, frases con lo que pensamos en perfiles públicos a los que puede acceder cualquier persona. Incluso en este aspecto, Whatsapp nos hace un flaco favor, ya que incorpora ticks azules cuando la persona lee el mensaje que has enviado, y guarda la última conexión. Esto pone a disponibilidad de otras personas información sobre que estamos haciendo y cuándo. Estas están diseñadas para crear adicción, por la rapidez en la que nos comunicamos, y de algún modo pone en manos de los demás nuestra autoestima y mide nuestros “valores” en el número de likes y seguidores. Cabe destacar la percepción de los adolescentes en cuanto al comportamiento que se desempeña dentro de estas redes, por ejemplo, el mero hecho de seguir a una persona o dar “me gusta” en una de sus fotos se suele interpretar como una doble intención (a esta persona le gusto, quiere conocerme). Por lo tanto, para las parejas esto puede significar una herramienta para “marcar los límites” a la otra persona, y al mismo tiempo enviar un mensaje al resto de sus seguidores de que no deben “cruzar la línea”. Las parejas necesitan que todos los demás sepan que están juntos, porque si no, entiende que su pareja es más accesible y por tanto, más vulnerable a cometer una infidelidad.
La violencia psicológica y de control es la más habitual a todas las edades, no solo en la adolescencia, y que debería constituir la primera señal para alertar de que se está en una relación muy peligrosa que si no se interrumpe puede alargarse con el tiempo. En los casos en los que no se detecta, todo este conjunto de comportamientos puede dar lugar a un bucle en el cual se encuentra la dependencia emocional hacia la otra persona, dando lugar a extremos como la violencia física, psicológica o de cualquier otra índole en un futuro.
Por nombrar algunos de los ejemplos con datos, según estudios realizados en el citado artículo, es común las discusiones entre adolescentes por el contenido de las redes sociales. Cuatro de cada diez chicas que habían tenido pareja, tuvieron discusiones a través de una red social con algún conocido o amigo que no les cayera bien a su pareja, y en la misma situación se habían visto tres de cada diez chicos. También es normal ceder toda la información de acceso a los dispositivos móviles y chats a las parejas, ocurriendo hasta en un 33% de los casos encuestados. Y uno de los datos más preocupantes: más de la mitad de los chicos justifica reacciones agresivas, como dar un puñetazo después de vivir una situación de nervios.
Ahora que disponemos de esta información, ¿miraremos del mismo modo la dependencia emocional en las relaciones sentimentales? ¿ y las redes sociales?
Esperamos con este hilo, que haga reflexionar a quien lo lea, haciéndole ver y replanteándose cómo situaciones de la vida que parecen ser “normales”, no lo son realmente, sino que, simplemente han sido ampliamente aceptadas por la sociedad. Darle la importancia que tiene el hecho de tomar medidas ante estas situaciones desde temprana edad (educación, campañas de concienciación, etc) debido a que las consecuencias ya las conocemos. Y de este modo enseñar a establecer relaciones de dependencia sana.
REFERENCIAS:
Blanco Ruiz, M. (2015). Implicaciones del uso de las redes sociales en el aumento de la violencia de género en adolescentes. Comunicación y Medios, (30), Pág. 124–141.
Espinar . E., Zych . I., y Rodriguez . A.J (2015). Ciberconducta y dependencia emocional en parejas jóvenes. Psychology, Society, & Education, (7), pág 41–45.