La música como medio de transformación social

La música, como hemos ido viendo a lo largo de los diferentes posts, tiene un gran poder sobre la sociedad al poseer ese carácter emocional que hace que llegue profundamente. Ésta tiene la capacidad de generar emociones compartidas y la convierte en un poderoso medio de unión entre personas con un sentimiento colectivo. Además, la música tiene un papel muy importante en el desarrollo de la identidad personal y grupal debido a que sirve como refuerzo del sentimiento de pertenencia a un grupo. En el siguiente post vamos a abordar no solo la influencia que tiene la música en el área social sino también cómo la política la ha integrado como mecanismo de identificación social.

A lo largo de la historia, la música se ha utilizado no solo como forma de entretenimiento sino que también se ha empleado con otros fines. Entre ellos, encontramos que se ha usado para alcanzar objetivos políticos, como medio de protesta o de movilización social.

Uno de los ejemplos más claros que se nos viene a la mente es la canción “Bella Ciao” que fue popularizada durante la Segunda Guerra Mundial como himno de resistencia antifascista. Esta canción fue utilizada por los partisanos italianos a modo de protesta contra las fuerzas alemanas nazis. Además, también fue cantada durante las manifestaciones obreras y estudiantiles de mediados de los años 60.

Siguiendo con el movimiento antifascista, durante la Guerra Civil Española se popularizó el lema “No pasaran”, el cual usó el bando republicano durante la batalla de Madrid. Esta frase se utilizó como grito de resistencia frente al dictador Francisco Franco. En respuesta a este lema, Celia Gámez Carrasco, compuso la canción “Ya hemos pasao”, donde se burla de la oración de las milicias republicanas. La letra constituía una proclamación en respaldo al levantamiento militar contra el gobierno del Frente Popular.

¡NO PASARÁN!

decían los marxistas.

¡NO PASARÁN!

gritaban por las calles.

¡Ya hemos pasao!

y estamos en las cavas

¡Ya hemos pasao!

con alma y corazón

¡Ya hemos pasao!

y estamos esperando

pa ver caer la porra

de la gobernación.

Estos son algunos ejemplos destacados donde se puede contemplar que la música no solo tiene un fin lúdico sino que también entra en lo político. Ésta se convierte en un medio poderoso de comunicación y de persuasión. No solo eso, sino que también se configura como una herramienta de división de grupos y de identificación social, evidenciándose la capacidad de la música para reforzar enfrentamientos de diferentes grupos en conflicto. También se observa la manipulación de la música con fines políticos llegando a desacreditar y a burlarse de la oposición. Además, puede generar el aumento de tensiones entre los mismos y contribuir a la fragmentación social.

Según como hemos podido analizar, la música forma parte de la identidad de una persona. Y no se queda en la individual, sino que establece las bases de una identidad colectiva que se refleja en una imagen, unos ideales, unos valores, una actitud y una forma de socializar. Tanto los géneros como las letras se convierten en elementos que unifican a las personas en torno a creencias comunes.

A modo de conclusión, el uso político de la música no solo implica la promoción de ideales y valores compartidos sino que también puede ser utilizada como modo de manipulación con fines partidistas. En este sentido, ésta se alza como un medio de expresión política que refleja tanto la identidad individual como la colectiva.

Por otro lado, cabe destacar la importancia de cuestionar cómo la música puede influir en la opinión pública y cómo puede contribuir a la construcción de discursos políticos. En definitiva, la música, al ser una herramienta de comunicación política tan potente, requiere una mirada crítica para comprender su impacto en la sociedad.

Bibliografía

  • CCárdenas, J. (s. f.). ¡NO PASARÁN! http://pueblodeespana.blogspot.com/2011/06/no-pasaran.html
  • Ramírez Paredes, J. R., (2006). Música y sociedad: la preferencia musical como base de la identidad social. Sociológica, 21(60), 243–270.
  • LA MÚSICA EN LA CONSTRUCCIÓN DE LA IDENTIDAD POLÍTICA. (s. f.). Dialéctica Revista de Investigación 2010.

Trabajo realizado por Aitana Mendoza Wendorff y Jesús Sleiman Rodríguez

--

--