“Mi corazón está roto”

Tras hablar de las metáforas en clase, caí en la cuenta de que son muchas las veces que las utilizamos para expresar cómo nos sentimos y como herramienta para manifestar nuestras emociones. Hablando con mi amiga, esta me comentó que “tenía el corazón roto” tras la ruptura con su pareja, expresándome la tristeza que sentía con esplendor. En ese momento, me acordé de mi abuela y de la multitud de veces que me ha dicho que “el amor es un fuego”, sugiriendo que el amor es una de las cosas más bonitas que existen en el mundo, que es apasionado, pero sin embargo, puede llegar a ser destructivo si no se controla. Una vez más, utilizando una gran metáfora para explicar cómo funciona ese valioso sentimiento.

De esta manera, fueron muchas las situaciones que se me vinieron a la mente en las cuales había utilizado metáforas como recurso para describir mis sentimientos, ya que considero que son de gran ayuda, puesto que a veces no soy capaz de expresar mis emociones, pero siempre encuentro una metáfora que describe esa emoción a la perfección. Estas metáforas ayudan a visualizar y comprender mejor las emociones al relacionarlas con elementos conocidos, lo que puede enriquecer nuestra expresión y comprensión de nuestras experiencias emocionales.

Las metáforas se inculcan desde pequeños a través de libros, canciones, películas, anuncios… Por poner un ejemplo, en la canción de Luis Fonsi de “Yo no me doy por vencido”, la cual estoy segura de que la mayoría de vosotros habéis escuchado y cantado una y otra vez, podemos observar muchas metáforas, como:

  • “Porque el corazón levanta una tormenta enfurecida, desde aquel momento en que te vi”: El autor usa esa metáfora para explicar que desde que vio a aquella mujer que le enamoró, ese amor que siente hacía ella es capaz de combatir a la tristeza en la que se sumerge su vida.
  • La frase “tengo una flor de bolsillo marchita de buscar a una mujer que me quiera” parece ser una metáfora poética que expresa sentimientos de desilusión, agotamiento y soledad en el contexto de buscar una relación amorosa. En esta metáfora, la “flor de bolsillo marchita” simboliza la búsqueda constante de amor y afecto, que ha resultado en decepciones y desilusiones repetidas.

Si nos vamos al otro extremo, Montesanto escribió una canción sobre cómo se ha enamorado de una mujer que le ha robado el corazón. En su canción “Me has robado el corazón” utiliza esta metáfora para expresar un profundo sentimiento de amor y atracción hacia alguien. Cuando alguien dice esta frase, significa que la persona de la que están hablando ha capturado su interés y afecto de una manera tan intensa que sienten que esa persona les ha “robado” su corazón, es decir, han conquistado su amor y afecto de manera completa. Es una forma romántica de expresar que se sienten fuertemente atraídos por la otra persona y que están enamorados.

En resumen, nuestro alrededor está plagado de metáforas que nos ayudan a entender un poco mejor el mundo en el que vivimos, a expresar cuando no tenemos ni las palabras adecuadas cómo nos sentimos y a comprenderlo mejor. Os invito a abrir las orejas un poco más en vuestro día a día, de esta manera os daréis cuenta de todas las metáforas que usamos constantemente.

--

--