Nada más lejos de la realidad

celiajimenezpozo
Psicología del Lenguaje — ugr
4 min readDec 10, 2022

Retomando la idea de la mentira que desarrollamos en Mamá, creo que soy una mentirosa… (Medium. Psicología del lenguaje, 2022), no pude evitar pensar en la película de “Chicas Malas”; en este metraje una de las protagonistas, Regina George, hace todo lo posible para que todo el instituto esté a sus pies recurriendo a la mentira.

Películas de nuestra adolescencia como “Chicas malas” o “Rumores y mentiras” nos muestran el típico instituto americano organizado por una jerarquía. En la cima de esta pirámide siempre se encuentra un personaje femenino que se caracteriza por ser manipuladora y mentirosa. Entonces, tras reflexionar sobre esto, varias preguntas aparecieron en mi mente ¿Qué nos puede enseñar estas películas? ¿son verosímiles?

En primer lugar, me gustaría resaltar la famosa escena de “Chicas Malas”, en la que ocurre lo siguiente:

  • Regina: Oh dios mío, me encanta tu falda. ¿Dónde la compraste?
  • Chica aleatoria: era de mi madre cuando era adolescente.
  • Regina: Vintage, me encanta.

Después, la chica aleatoria se va y Regina le dice a su mejor amiga:

  • R: Es la falda más fea que he visto en mi vida.

Extrapolando este ejemplo a nuestra realidad, al principio pensé que era muy exagerado, pero luego reflexioné y no es tan descabellado dar cumplidos con otro objetivo que no sea halagar. Muchas veces mentimos con maldad porque nos aburrimos o por sentirnos mejor con nosotros mismos, para aumentar nuestra autoestima. Y es que en muchas ocasiones hacemos cumplidos con otras intenciones, elogiamos para hacer daño o para ofender. Se puede recurrir al cumplido para resaltar lo negativo de uno y esto, lamentablemente, se ve mucho en casos de acoso escolar. A partir de este momento empezamos a preguntar tanto a amigos como a familiares cumplidos que hayan hecho o recibido pero con una intencionalidad negativa.

El primero que contestó a esta pregunta fue mi hermano, y admitió que en muchas ocasiones me felicitaba y me elogiaba cuando me vestía y me preparaba a tiempo, dando a entender que siempre llego tarde a todos lados.

Después de hablar con mi hermano les pregunté a mis padres, y es que muchas veces cuando dejo mi cuarto desordenado me suelen decir:

  • Me encanta cómo tienes el cuarto ordenado, qué elementos de decoración más innovadores y bonitos hay por toda la cómoda.

Con este cumplido el objetivo no es subirme la autoestima, sino darme cuenta de lo poco ordenada que he dejado mi habitación.

Una amiga mía también me comentó que una compañera suya de la universidad le dijo lo siguiente:

  • Haces muy buenos trabajos, pero ya veo que sola.

Aquí se puede ver cómo la compañera de universidad, a través de este cumplido, resalta la falta de “compañerismo” que puede tener o lo solitaria que es.

Otro ejemplo a resaltar fue el que le hicieron un día a otro amigo, que acabó enfadándole mucho. Le dijeron que su novia era muy guapa y seguido de esto le preguntaron cómo lo hizo para conquistarla. Aquí podemos ver cómo la persona deja caer que él no es tan atractivo como su pareja.

Un cumplido muy frecuente que recibía una compañera de clase al adelgazar era el siguiente:

  • Desde que estás más delgada estás guapísima, seguro que ligas más.

Lamentablemente, recibía muchísimas frases de esta índole, lo que le afectaba a la forma en la que se percibía a sí misma. Con este tipo de cumplidos, que en muchas ocasiones se hacen de forma inintencionada, se puede afectar a la salud mental de quien lo recibe, pues se le está dando, en este caso, una importancia al físico que realmente no merece e incluso da a entender que tras la pérdida de peso es una persona más válida en la sociedad.

A raíz de estos ejemplos podemos ver que los cumplidos son un arma de doble filo y que las películas que nos muestran esto de forma exagerada no están nada lejos de la realidad. Cuando empezamos a ser conscientes, nos damos cuenta de que los cumplidos no sólo sirven para elogiar sino que pueden ser una herramienta para alimentar la autoestima de muchos, para demandar necesidades o para llamar la atención sobre errores que la otra persona comete. Y es que los cumplidos no siempre tienen que ser positivos; la próxima vez que te halaguen ten cuidado, porque a lo mejor te están mintiendo…

Hecho por

Celia Jiménez Pozo y Cristina Pérez Gómez

Referencias:

Zolani. El elogio como forma de manipular (8 de mayo, 2014). http://zolani.es/elogio-para-manipular/

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