No sé si sus entrevistas son una mierda o increíbles…

Ana Rosso
Psicología del Lenguaje — ugr
4 min readDec 3, 2019

Recuerdo estar un día en el sofá de mi casa con mis compañeros de piso y ver por primera vez una entrevista de La resistencia. El entrevistado era Albert Pla, el cual a día de hoy sigo sin saber a qué se dedica o qué fue a promocionar. Sinceramente esa primera entrevista no me gustó nada, pero con el paso del tiempo y viendo más acabaron por gustarme. Se supone que una entrevista no es casual, sino que se trata de un diálogo interesado con un acuerdo previo, intereses y expectativas por ambas partes. Pero no encontré en esta ninguna de las claves que normalmente se usan en este tipo de conversaciones, por lo que nos dispusimos a buscarlas.

Todos aquellos que han visto alguna vez una entrevista de David Broncano conocen esa magia tan especial que crea durante sus programas. En ellas, a veces sin necesidad de palabras, con una simple mirada, sabes lo que está pasando por su mente. Seguramente habréis visto una de las entrevistas más virales del programa, la de Gerard Piqué (entrevista que podréis encontrar en el link de esta publicación). Pero, ¿qué tiene esta entrevista que la hace tan adictiva y divertida?

En general, estamos acostumbrados a ver programas donde van famosos y los presentadores de estos van con su guión muy estructurado de preguntas. En este, tienen apuntados los datos bibliográficos y el material que van a promocionar al alcance de la mano. Esto es lo habitual, pero quizá no es lo correcto. David Broncano nos propone indagar en la persona sin importar quien sea, su relevancia, si es famoso o si viene a promocionar algo. Desde esta perspectiva es mucho más interesante conocer la personalidad, la espontaneidad o el humor del entrevistado. A su vez esto provoca una sensación de familiaridad que te hace sentir como si de alguien cercano se tratase.

La técnica que utiliza Broncano es muy espontánea a la vez que meticulosa, porque para poder improvisar sobre la marcha, el entrevistador tiene que manejar muy bien muchos ámbitos, de otra forma las preguntas no serían coherentes. Todo comienza lanzando una primera pregunta, en el saludo inicial con alguna broma o de una interacción del público; del resto no sabes que va a pasar. En el caso de Piqué todo comienza con una broma sobre su culo que deriva en lo mucho que le sudan las manos a David.

El comienzo de una entrevista es importante pero, ¿cómo hacer del desarrollo de esta algo vibrante y con gancho?. Él se dedica a hilar una pregunta con otra desde la presentación, a veces dando su opinión abiertamente sobre el tema. Esto produce que la entrevista se vaya dirigiendo hacia los intereses de la persona entrevistada y los suyos propios.

Sin embargo hay algo más, porque en el caso de este jugador de fútbol se coloca en situaciones realmente incómodas. Esto ocurre debido a que la aleatoriedad de las preguntas y el miedo a la incertidumbre llevan a las personas a dirigirse a los temas cómodos que manejan, que en general suelen ser sobre su vida íntima. Por ejemplo, algunos entrevistados suelen contar anécdotas vergonzosas o sobre su vida sexual, mientras que otros menos participativos se ven ante la tesitura de preguntas tales como: ¿Cuál es tu montaña favorita?, ¿Cuánto dinero tienes?… etc. De hecho, aquellos entrevistados que no se implican en las preguntas y dan respuestas cortas, producen en David una gran incertidumbre e incluso generan aburrimiento para ambos.

En el caso del jugador del FC Barcelona, que siempre ha transmitido al público sus ideales políticos abiertamente, ha bromeado sobre los equipos contrarios y también sobre su matrimonio con Shakira. Si analizamos la entrevista, estos suelen ser los campos sobre los que se siente cómodo y sobre los que habla. Todos estos generan mucha crítica y movimiento social, puesto que juzga y se coloca de manera clara en ciertas posturas que generan dilemas sociales.

En conclusión, tras analizar sus entrevistas mis compañeras y yo nos hemos dado cuenta de la importancia en el diálogo de crear sensación de familiaridad en las personas. Una conversación fluida se producirá sólo si los componentes de esta se sienten interesados por el tema y si funciona la escucha. Para ello es muy importante que se manejen bien una amplia gama de áreas, tratando de salir de zonas de confort y se arriesgue en las propuestas. Esto produce el incremento de la atención tanto de los componentes como de los oyentes y transmite una sensación placentera.

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