Puesta en practica del movimiento expresivo
El lunes 16 de diciembre se realizó en clase de psicología del lenguaje una puesta en práctica del movimiento vital expresivo al estilo río abierto. Debido a la restricción de tiempo (1h solo) tuvimos que realizar una sesión más corta de lo habitual, sin poder explicar el por qué de los ejercicios. Por ello nos gustaría explicar en este post por qué hicimos lo que hicimos y poner en contacto, con la gente que no pudo venir ese día, este maravilloso sistema.
Lo primero de todo sería recomendar que leyeseis el post de mi compañero Nacho
En este post se habla sobre nuestro primer contacto con el movimiento expresivo, con el sistema río abierto, y de las herramientas fundamentales con las que se trabaja. Como se aprecia en el post, la finalidad de río abierto es permitir y facilitar la expresión de diferentes emociones y sensaciones que conllevan al autoconocimiento y al aumento del estado de consciencia. Debido a que nuestro tema es la expresión del sufrimiento, nos resulta muy llamativa esta forma de expresarlo. A veces expresar los sentimientos con palabras puede resultar insuficiente para algunas personas. Por ello les proponemos otra alternativa, movimiento expresivo.
En la sesión de movimiento expresivo que realizamos el lunes pasado empezamos preguntando a los integrantes cómo se encontraban. No nos valían las respuestas típicas de “bien” o “mal” si no respuestas más elaboradas, en las cuales tenían que interiorizar más en sí mismos. Esto se hace siempre al principio de la sesión para tener una idea general de como se encuentran los participantes. Una vez hecho esto, se observó que todos reportaban un malestar general.
A continuación, empezamos con el primer ejercicio
El primer ejercicio en casi todas las sesiones de río abierto suele ser movimientos enérgicos y extendidos. Los participantes tienen que moverse continuamente estirando sus extremidades y comportándose como “animales” o de forma trivial gracias a la guía del exponente. Esto se hace para que la gente se suelte desde el principio y conecten con su yo más animal. Prácticamente vimos como después de este ejercicio ya la gente empezó a reportar de que se sentían diferentes. Ahora se sentían más felices y enérgicos.
En el segundo ejercicio utilizamos una canción bastante diferente, alegría. A nosotros nos reportaba paz y felicidad y queríamos hacérsela llegar a los demás. Para este ejercicio mezclamos un ejercicio típico de la terapia Gestalt (una terapia humanista), el cual es moverse por el escenario, con el movimiento expresivo. Debido a que uno de los puntos clave de río abierto es la utilización de la voz, instamos a los participantes a gritar alegría cada vez que lo escuchasen mientras iban fluyendo por la habitación. Nunca obligamos a nadie a realizar las diferentes acciones, pero sí que los instábamos a seguirnos y a realizar sus propios movimientos. En este tipo de sistemas es muy importante que la persona se sienta libre y fluya. Pudimos observar durante la realización de la actividad de que al principio nos seguían bastante y estaban algo cortados, pero poco a poco empezaron a realizar movimientos propios y algunos maravillosos. Después de este ejercicio reportaron tranquilidad y alegría.
En el tercer ejercicio plateamos una dinámica diferente. Es muy importante en la conexión con uno mismo la respiración. Por lo que planteamos un ejercicio más calmado y estático, haciendo que todos se sentasen en el suelo. Aquí tenían otra vez libertad de movimiento, pero esta vez con los ojos cerrados y debiendo estar sentados. Les comentamos que era importante sentir la conexión terrenal y tocarse el cuerpo. Esto facilitaría a una conexión más profunda. Al terminar el ejercicio se les pidió que levantasen y que nuevamente comentasen lo que sintiesen. Ahora el sentimiento general era de tranquilidad y estar a gusto.
Como último ejercicio nos centramos más en la expresión del dolor somático. Se puede observar cómo en los ejercicios anteriores se centraban más en la expresión emocional y este en la expresión más somática, más corporal. Al haber empezado nuestro grupo de trabajo con el caso de Kurt Cobain y su dolor estomacal diseñamos una forma en la que este hubiese podido expresarlo. Gracias a la canción de 45 cerebros y 1 corazón y una serie de movimientos. La canción fue escogida por recomendación de un compañero que ha realizado muchas sesiones de movimiento expresivo y que justamente esta canción le transmitía dolor interior. Por otra parte para los movimientos escuchamos la canción e imaginamos que había algo en el estómago que queríamos expulsar. El movimiento de la columna fue vital al igual que balanceos de la cabeza hacia delante hacia atrás para expresar nuestro “dolor”. A la hora de realizar este ejercicio en clase le comentamos a los compañeros los movimientos anteriormente dichos pero también le instamos a intentar expresar algún dolor somático que ellos tuviesen con sus propios movimientos. Gracias a esto vimos a compañeros mover mucho el cuello y hombros (padecían una contractura en el hombro)al igual que movimientos de cabeza, sobre todo girándola (queriendo expresar dolor de cabeza). Al preguntarles esta vez como se sentían volvieron a experimentar relajación y tranquilidad
Como última parte práctica de la sesión realizamos un masaje de dos en dos final. El masaje suele usarse en la corriente río abajo para liberar tensiones y sentimientos que hayan podido quedarse tras las sesiones. A parte, nosotros la utilizamos como una actividad social, conjunta, con otro compañero. A la hora de la expresión son muy importantes los ejercicios individuales al igual que los grupales. Para que resultase el masaje entretenido y divertido ideamos comparar al que recibe el masaje con un coche: primero habría que echarle el agua, después el jabón y por último secar. Cada parte tenía su movimiento específico con las manos y fue crucial masajear todo el cuerpo, sobre todo la cabeza.
Como punto final en la actividad se preguntó por última vez de como se sentían los participantes y qué les había parecido esta forma peculiar de expresión. Tanto los compañeros como nosotros salimos relajados y contentos tras la sesión por lo que al final todos consideramos de que es una forma de expresión bastante útil.
Como se puede apreciar fue una sesión corta pero contundente. Normalmente tras una sesión de movimiento expresivo suelen salir a la luz muchas emociones retenidas las cuales son habladas y tratadas en grupo. No solo es útil para la expresión de emociones y dolor, también lo es como antecedente para una terapia. Como futuros psicólogos que seréis, os invitamos a que probéis el movimiento expresivo e informaros de ello. Por último os dejamos algunos testimonios reales de gente que ha probado río abierto.
