¿Saldrá Elsa del armario? ¿Habrá beso? Frozen 2

Hasta ahora, estamos acostumbrados a que todas las películas Disney donde hay una relación de amor (hasta la fecha, todas protagonizadas por parejas heterosexuales) finalizan con un beso de la pareja, que simboliza que entre ellos hay una relación de pareja y no solo amistad, el cual además, suele ir seguido de una boda. Nosotras desde el principio teníamos la idea de que iba a ver un beso en la película, sin embargo, al exponer el trabajo en clase, hablando con los compañeros, nos surgió la duda… ¿debería haber beso entre nuestras protagonistas en la película? ¿o debería no haberlo?

Esto ha sido bastante enriquecedor, ya que nosotras habíamos dado algo por hecho, que consideramos importante, y por eso estamos escribiendo este último post. Cuando en clase se planteó si debería o no haber beso, una compañera dijo que ella creía que sí debería de haberlo, al igual que en las películas donde los protagonistas son heterosexuales, pero que al mismo tiempo pensaba que quizá se debería de hacer “poco a poco”, para evitar un escándalo, es decir, que el beso se diera en un tercera película de la saga, o directamente en otra película diferente.

Además, enlazando con el tema, una de las polémicas en las que se ha visto envuelto Disney recientemente ha sido en estreno de la nueva película de Star Wars en diciembre del año pasado, donde se mostraba el primer beso entre mujeres en esta franquicia.

Ocurre al final de la película, y las dos mujeres aparecen en la multitud junto a los personajes principales (es decir, es una escena de unos segundos donde las mujeres que se besan no están ni siquiera siendo enfocadas, sino que aparecen de fondo). Sin embargo, Disney ha eliminado el momento en países como Singapur y Emiratos Árabes para evitar que fuera calificada como “para mayores de 18”, y así poder alcanzar a un público más amplio.

En estos países la homosexualidad es considerada un delito (aunque más concretamente entre dos hombres, ya que entre dos mujeres no existen leyes específicas que las prohíban), y Disney no ha querido arriesgarse. Esta decisión ha sido bastante polémica, pues las asociaciones LGTBI han criticado fuertemente a Disney por haber eliminado en algunos países la única secuencia homosexual de su historia, la cual ni siquiera es explícita y aparece de fondo en un plano.

Siguiendo con nuestro tema, nosotras creemos que lo ideal es que haya un beso al final que la película, ya que, si no fuera así se podría mandar el mensaje de que una pareja lésbica no está al mismo nivel que una pareja heterosexual. O incluso, lo que creemos que podría ser más posible, es que la relación de Vesta y Elsa acabará totalmente invisibilizada, y se “maquillara” como una bonita amistad, ya que no es algo nuevo que las mujeres que tienen relaciones con mujeres, pues suelen ser invisibilizadas o infantilizadas, esto quiere decir que no se toma su relación en serio, y de hecho es una de las principales reivindicaciones que se realizan desde el colectivo lésbico. Incluso existe el Día de la Visibilidad Lésbica, el 26 de abril, donde se reivindica la visibilidad del colectivo lésbico así como sus problemáticas específicas. (Os dejamos el manifiesto lésbico de la Federación Española LGTB por si os interesa).

Por todo esto, consideramos que evitar un beso sería contraproducente, pues le estaríamos dando a la audiencia la idea de que “los niños son muy pequeños para ver un beso lésbico, pero no para ver un beso heterosexual”, el cual está totalmente normalizado. Eso sería lo contrario a lo que pretendemos, pues toda esta idea surgió a raíz de normalizar las relaciones entre mujeres, al mismo nivel, lo que buscamos es “ser visibles hasta ser indiferentes como decíamos en nuestros post anteriores Pensamos que la finalidad de este proyecto sería que algún día no nos preguntemos si habrá beso o no, porque sean dos princesas, en vez de un príncipe y una princesa.

Otra pregunta también relacionada con el tema de la visibilidad que surgió en clase, es si Elsa le contaría a Anna que es lesbiana, como saldría Elsa del armario. A la hora de contar una historia de un personaje LGTB se pueden hacer de distintas maneras; una de las opciones sería que se tratara el tema dentro de la película, es decir, que Elsa “saliera del armario” y Anna la recibiera bien, o que al principio le costara comprenderlo, pero que finalmente le aceptara y la apoyara, pues, al fin y al cabo, es una película infantil y nos gustaría acabar con un final positivo y bonito. La otra opción sería no nombrar la sexualidad de Elsa, no etiquetarla y simplemente hacer que el resto de los personajes, Anna, Kristoff, y Olaf, recibieran a Vesta igual que si fuera un chico.

Nosotras nos hemos decantado por esta segunda opción por distintas razones. Para empezar, debemos de tener en cuenta la película está dirigida a un público infantil, y relatar el hecho de salir del armario (aunque es una realidad, dado a que la heteronormatividad sigue estando presente) pensamos que podría tener más desventajas que beneficios. Primero porque haces ver que es algo diferente (en ninguna película se revela a un personaje como heterosexual), y segundo porque los niños pequeños quizá ni siquiera puedan entender por qué Elsa le cuenta a Anna este hecho, y por qué Anna al principio se extrañase al escuchar la noticia.

Siempre tenemos que tener en cuenta a quién va dirigido el mensaje que se pretende mandar.

Si quisiéramos mandar un mensaje que, por ejemplo, contara la historia de un personaje LGTBI, donde su familia al principio no le comprende, pero después acepta, entonces elegiríamos la primera opción (Elsa saldría del armario). Sin embargo el mensaje que queremos mandar, es que no hay diferencias, y no importa a quien ames. Y al igual que las princesas que están con príncipes no “salen del armario”, y no cuentan que son heterosexuales, no creemos que Elsa lo deba hacer, si lo que realmente queremos es que se perciba como que las dos circunstancias son iguales. De esta manera, pretendemos que en un futuro desaparezca el concepto de “salir del armario” en las nuevas generaciones, y que sean capaces de mostrarse al mundo sin miedos, tal y como son.

Esto no quiere decir que la primera forma de contar una historia LGTBI sea inapropiada, pues se muestra una realidad que tristemente sigue siendo la de muchas personas LGTB ya sea con final triste o feliz, pero consideramos que es más apropiada para un público adulto, que ya puede comprender procesos, que un no todavía no.

Hemos tomado estas decisiones en función del mensaje que queremos mandar, así como la finalidad de este mensaje. Sin embargo como hemos dicho hay diferentes opciones ¿Que opináis vosotros? ¿pondríais el beso, o lo evitaríais para evitar censura? ¿cómo llevaríais la sexualidad de Elsa?

Esperamos que os haya gustado nuestra aportación, que hayáis reflexionado y aprendido, igual que lo hemos hecho nosotras.

Referencias:

https://www.lgbtqnation.com/2019/12/censors-cut-star-wars-historic-lesbian-kiss-foreign-release/

http://www.felgtb.org/temas/politicas-lesbicas/noticias/i/15432/222/dia-visibilidad-lesbica-2019

ELVIRA HUERTA LÓPEZ Y BEATRIZ GARCÍA FERNANDEZ-MEDINA